Perdóname, mejor amigo.

22.

No sé con qué cara mirar a Néstor cuando llego a casa después de pasarme horas llorando con Katie sin decir una palabra.

Lo único que hablamos fue para despedirnos cuando le dije que ya tenía que irme porque mañana hay que trabajar.

Él no está pero no tarda en llegar mientras Matt, Josh y yo cenamos en la sala.

Más bien, ellos cenan y yo miro cómo lo hacen porque mi estomago está cerrado y nervioso.

Mi mejor amigo nos cuenta su día en el trabajo junto a nuestros dos amigos, pero yo no habló en ningún momento o lo hago lo menos posible.

Su teléfono suena haciéndole sonreír abiertamente mientras sus ojos brillan.

Disculpándose con un "es Katie", se aleja descolgando y yo me voy a mi habitación.

¿Po qué él y no yo?