Me alivia saber que Katie no le ha dicho nada a Néstor de lo que hice en su casa hace ya unos pocos días.
Me alegra saber que nada ha cambiado entre los dos, que sigue tratándome de la misma manera que antes de besarla.
Me gusta saber que sigue viniendo a verme a mi trabajo y sigue pasando las horas en las que no tiene nada que hacer en el parque.
Ya no llora por la muerte de su amiga, y no es porque no la extrañe, si no porque dice que llorar no la traerá de vuelta a la vida.
En parte tiene razón.
Ya deja de culparse por no haber hecho algo más por ayudarla porque ese chico que la mató ahora está en prisión por asesinato, tanto de Eli como de otras chicas.
Ya Katie vuelve a sonreír de esa manera que me encanta, aunque no sea por mí.
ESTÁS LEYENDO
Perdóname, mejor amigo.
Storie breviPerdóname, mejor amigo. Perdóname por traicionarte. Perdóname por fallarte. Perdóname por no poder controlar mis sentimientos. Perdóname por no haber sido capaz de decírtelo. Perdóname por ocultártelo pero, créeme, así es mejor. Perdóname por cuidar...