Anoche lo poco que dormí fue para soñar con ella.
Soñé que la tenía entre mis brazos, que la acurrucaba contra mi pecho y aspiraba el perfume de su cuello.
Soñé que la acariciaba, que la besaba, que la amaba, que la hacía mía entre las sábanas de mi cama con la mayor dulzura que podía.
Se sintió tan real que me desperté sonriendo y buscándola alrededor.
Dejé de sonreír.
Ella no estaba.
Estaba solo.
Como siempre.
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Perdóname, mejor amigo.
Short StoryPerdóname, mejor amigo. Perdóname por traicionarte. Perdóname por fallarte. Perdóname por no poder controlar mis sentimientos. Perdóname por no haber sido capaz de decírtelo. Perdóname por ocultártelo pero, créeme, así es mejor. Perdóname por cuidar...