You and Me. (Gay/Yaoi)

2.

Christian.

La alarma de mi celular empezó a sonar, me iba a estirar para apagarla pero alguien más lo hizo, sentía que alguien me agarraba de la cintura, y me atraía más a él, vi quien era, otro de los modelos que tuve un polvo, tenía sus ojos cerrados de nuevo y solo estaba junto a él, creo que se quedó dormido, me quería separar pero apretaba más su agarre.

Fue en una fiesta en donde me estuvo ligando, pero es guapo así que lo deje, muchos trataron de llevarme con ellos pero los ignoraba, no estaban en mi nivel y como olvidar a las chicas, con sus escotes dejando ver que no usaban sostén, otras abriendo sus piernas para que viera que no tenían ropa interior, era asqueroso, pero solo les decía que ya tenía a alguien, algunas aceptaba y me pedían disculpas pero otras, me decían que no dirían nada si me iba con ellas, solo me iba de ahí y pedía otra bebida.

Quite la mano que sostenía mi cintura, creo que me pase de bebidas anoche o le abran puesto algo, solo recuerdo que él me trajo la bebida y agradecí, creo que me drogo, me senté en la cama y sentía los mareos, sí, me drogo.

Baile toda la noche y más con esa canciones que ponían, animando más la fiesta, además con esa droga sentía que todo se movía, recuerdo que bailábamos más pegados que antes, pequeños fragmentos de lo que paso anoche llegan a mi mente, solo espero que haya usado condón, no quiero tener una enfermedad por este pedazo de imbécil.

Me quite su agarra y fui a darme un baño, debo ir a la universidad, no debí salir del departamento pero quería tomar algo además de que me dijeron que abría directores que podrían ayudarme a llegar a donde quiero, deje que el agua fría me quitara lo mareado y más episodios de lo que sucedió anoche llegan a mi cabeza, recordandoque el imbécil si había usado condón y que lo había apresurado para que me lametiera.

Salí del baño con una toalla en mi cintura y antes de salir me seque el cabello, ya cuando estaba seco me peine, fui a mi armario y busque ropa que ponerme, una camisa gris con un chaleco negro, unos jeans oscuros ajustados y unos converse, me puse un reloj y una cadena, me vi en el espejo para verme, sexy.

– Que sexy – escuche una voz detrás de mí, solo voltee a verlo.

– Que bueno que ya despertaste... Ahora largo – dije y él se sorprendió.

– Así no me decías anoche – se cree chistosito el señor.

– Si, no lo dije porque me drogaste – me daban ganas de ir por un cuchillo y matarlo pero no debo tener antecedentes penales, aunque mi cuñado puedo sacarme de aprietos. – Ahora quiero que te vayas de mi departamento – salí de cuarto y fui a la cocina, tome unas barras y un jugo, después tome mi mochila. – Cierra la puerta cuando te vayas.

– Espera – me detuvo sosteniendo mi muñeca. – Lo siento, perdón por drogarte – no tiene vergüenza, creo que le pediré un favor a David. – Sé que no debí hacerlo, pero quería algo contigo... Ya que nos arreglamos, porque no salimos – comento con una sonrisa estúpida, creyendo que con eso me conquistara, hare que me lo creo, tire mis cosas al piso, solo mi mochila, me acerque a él poniendo mis brazos en su cuello y el me sostenía de mi cintura, bese sus labios y cuando vi que me seguía el ritmo, mordí su labio inferior hasta sentía su sangre. – ¡Maldición! – grito, sonreí y tome mis cosas.

– No te creas tan importante cariño – dije y escupí la sangre, deje de sonreír, mi cara daba miedo y él lo noto. – No quiero que te me vuelvas a acercar, te podría ir muy mal si lo haces – me acerque a la puerta. – Mandare a uno de seguridad, si todavía estas aquí – lo mire. – Con el si te divertirás, nos vemos.