34.

3.4K 288 36
                                    


Jonathan.


Mi padre me había mandado a llamar, me había levantado temprano, apenas regreso y quiere con lujo de detalle que fue lo que paso, estaba cansado pero debía ir, deje a Chris durmiendo, la que si se dio cuenta que me desperté fue Cariñitos, solo cambie su agua por una limpia y se acostó de nuevo junto Chris.

Me di un baño rápido, me lave los dientes, me puse un traje, fui a la cocina y tome un bote de yogurt, salí con las llaves y maletín en manos, con el celular en mi pantalón.

Salude al guardia y busque mi camioneta, me adentre a ella y sentí el celular, sacándolo para ver que era una llamada de mi padre, la deje pasar, me fui de ahí.

Llegue en media hora, con cuatro llamadas de mi padre y seis de su secretaria, me adentre al estacionamiento subterráneo, la estacione, tome mi maletín y le puse alarma, fui a los ascensores.

Las puertas se abrieron y me dejaron en el penúltimo piso, la secretaria de mi padre se levantó de inmediato.

– Joven Phillips, buenos días – saludo, en manos tenía una carpeta. – Lamento llamarlo, pero su padre estuvo llamándolo y no atendía.

– Iba en camino, no podía contestar – comente.

– Lo lamento – me dio una carpeta. – Aquí viene el contrato de la empresa Fuster, espera hacer negocios pronto – me detuve, hace mucho que no escuchaba ese apellido, sonreí un poco.

– ¿Desde cuándo esta este contrato aquí? – pregunte.

– Su padre dijo que debíamos esperar hasta que regresara de su viaje, han estado llamando para saber qué fue lo que decidieron y hacer una reunión – contesto.

Mi padre tuvo unos problemas con esa familia, y más con ese hombre, cuando le regresaron más de la cuenta del dinero que invertimos con ellos, mi padre no sabía de donde habían sacado ese dinero, siendo que ellos estaban casi en quiebra.

– ¿Mi padre está en su oficina? – asintió.

– Llego temprano hoy, siendo que es sábado.

– Bien, trae dos cafés por favor – pedí, si mi padre estaba en la oficina es porque mi papá Santi se enteró de algo y para no recibir regaños se escapó de la casa.

Suspire antes de entrar, abrí la puerta y mi padre leía unas documentos en sus manos, tenía sus lentes puesto, levanto la vista cuando me vio, sonrió quitándose sus lentes.

– Mi muchacho – se levantó y me acerqué, palmeo mi espalda e hice lo mismo, me beso la mejilla, aunque sus ojos siempre te hagan sentir miedo, es un padre muy amoroso, eso me gusta.

– ¿Cómo estas papá? ¿Tan temprano en la oficina? – pregunte divertido mientras él se sentaba en su silla, y yo hacía lo mismo, hizo una mueca.

– Pues... Que te puedo decir, había trabajo pendiente – contesto, sonreí divertido.

– Pero tienes asistentes, deberías dejar que ellos lo hiciera – dije.

– No, no todo debo dejarles – me sonrió.

– Ya padre – dije, quería saber que había hecho ahora. – ¿Qué fue lo que descubrió? Un sábado, tan temprano en la mañana y un hermoso día para seguir durmiendo con mi papá... Estarías todavía acostado con él y almorzando tarde – puse mi pierna sobre otra mientras me acomodaba mejor para escuchar lo que diría.

You and Me. (Gay/Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora