Un ligero soplo,
en un día de viento.
Un niño recién nacido,
comparado con el anciano que es el viento.
Pero supongo que será como la nieve:
una mota
que con el tiempo se convierte en una gran bola
temible.
Gigante.
Y el ligero soplo que se torcía,
se desvanecía en el momento,
ahora es el gran viento,
ese que silba sin ninguna melodía,
el que se mueve con fuerza,
al compás de su propio ritmo.
Bailando entre los árboles,
mientras el soplo,
en un intento desesperado de seguirle,
se choca contra todas las ramas que encuentra.
Tranquilos,
el tiempo lo hará fuerte,
y él también silbará,
bailará,
esquivará árboles.
Simplemente déjenle ser un simple soplo.
De momento.
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Rozando lo Absurdo
PoesiaPoesía amigos, Poesía. Letras creando palabras, palabras intentando expresar sentimientos. Bienvenidos a esta aventura sin rumbo, donde el guía está loco, y el visitante... bueno, usted lo sabrá.