Mi Mejor Amigo [2] ✔

15

Era domingo por la mañana. Cada vez se podía sentir más el frío en Inglaterra. Tan solo faltaban dos semanas para mi cumpleaños n°17. Ya se, era una de las más chicas de mi curso. Aún no sabía que hacer, pero luego lo pensaría. Lo que si sabía era que el próximo miércoles iríamos a recorrer el museo natural de Londres. Nada divertido a decir verdad pero quitaba tiempo de clases así que ninguno de mis compañeros, incluyéndome, se habían quejado.

Bajé las escaleras y caminé hacia la cocina en busca de algo para desayunar. Tomé uvas y una banana y las corté en pequeños trozos para luego depositarlos en un bowl y echarles encima un poco de miel.

Mientras comía mi desayuno oí que alguien estaba bajando del primer piso, para luego llegar a la cocina.

- Buenos días. - saludó mi mamá dirigiéndose a la alacena para buscar el tarro de café y una taza. Yo tan solo seguí masticando- Lola. - la miré- Qué te pasa?

- Nada. - dije terminando mi desayuno y dejando el bowl en la pileta de la cocina- Tengo que estudiar. - me fui de ahí.

Entré a mi cuarto y cerré la puerta. Me senté en la silla junto a mi escritorio y abrí mi mochila. Ugh. Esto era depresivo. Un domingo por la mañana, el cual estaba nublado, había humedad y hacía frío, estudiando. Estudiando porque dentro de pocos días tendría examen.

Pero, después de haber pasado cuarenta minutos, algo me distrajo. Mi celular, el cual había vibrado.

Si quieres hablar podemos vernos hoy a la tarde en el parque.

- Aaron.

Okay. No me esperaba esa propuesta de su parte, más no la rechacé. Poder hablar con Aaron y aclarar todo era lo que más quería.

A los pocos segundos de haberle respondido, Penny entró a mi habitación y se sentó encima mío.

- Hey! - me quejé.

- Axel y yo nos reconciliamos. - comentó feliz- Ahora somos novios.

- Enserio? Felicidades. - sonreí- Son él uno para el otro.

- Tu crees? - rió un poco.

- Por supuesto que sí. Al igual que Clara con Josh. - afirmé.

- O, al igual que tu y Diego.

- Qué? Penny... - la miré fijo- Él y yo no somos nada.

- Sí que lo son. - bufó- Tu crees que no me doy cuenta de como ambos se miran y se sonríen? - dijo- Además, el jueves saliste con él. - abrí la boca para hablar pero ella me interrumpió- Si, Lola, te vi. Por cierto, eso no es serle infiel a Aaron?

- Primero, lo del jueves no fue una cita, sino una salida de amigos, nada más.

- Lola, los ex no son amigos. - opinó antes de dejarme sola en la habitación.

Suspiré pesadamente.

x x x 

Se hizo la tarde. Salí de casa tranquila y sin apuro, y comencé a caminar hacia el parque. El cielo se encontraba igual que hace un par de horas, pero la diferencia era que ya no hacía tanto frío. 

Al llegar, me senté debajo de un árbol y esperé a que Aaron apareciese. Este llegó un par de minutos después. Lucía cansado y deprimido por algo, aunque no me atreví a preguntarle ni si quiera como estaba. Se veía serio. O más bien, estaba serio, pero sabía la razón. Todavía seguía enojado conmigo.

- Hola. - dije.

- Hola.

- Así que... Querías hablar... - comencé a decir mientras jugaba a entrelazar mis dedos.