Trato de buscar el mejor lugar para guardar la daga, pero lo único que consigo es desesperarme más. Jamás en mi vida había tenido miedo, ni siquiera como humana. Lo que verdaderamente aterra de esta cosa son sus espinas, si se introduce en el cuerpo es casi imposible sacarla sin hacer más daño del que ya ha hecho, es hermosa por la blancura de su hoja pero más peligrosa que cualquier otra. Todo se está poniendo de cabeza y lo único que hace es empeorar. Ningún lugar es seguro para esta cosa, así que alzo la falda y la guardo en la liga de la parte de arriba de la media. Acomodo todo de nuevo en su lugar y me pongo la peluca para volver a la fiesta.
Al cruzar por segunda vez las puertas del gran salón, me concentro para encontrar a mi hermana.
—Caterina —su voz llama mi atención—, te estuve buscando, lamento lo de mi familia.
—No te preocupes Aarón —dirijo mi atención de nuevo a la multitud en busca de Julieta—, ¿Sabes dónde está mi hermana?
—No lo sé, además de disecar a mi primo en el jardín, no sé dónde pueda estar.
—Típico —pongo los ojos en blanco ante el comportamiento de mi hermana—. ¿Alguien más sabe eso?
—Creo que no, la mayoría de los que están aquí son cazadores, así que no creo que estén tan tranquilos.
—No lo creo, hay personas de alcurnia que no están enterada de ese tema.
—Eso no sería problema, lo solucionaríamos fácil —no puedo evitar fruncir el ceño ante su respuesta.
—Creo que no se todos sus secretos después de todo.
—No eres la única que le gusta el misterio, amor —por un momento su sonrisa me relaja un poco, es imposible no devolvérsela.
—Será mejor que vayamos por mi hermana si no, la siguiente obra de caridad será una donación de sangre para tu primo —engancho nuestros brazos y me dejo conducir por él hacia el jardín—. Que bien se siente respirar —él me mira confundido, por lo que me limito a decir—. Lavanda.
—Claro, me imagino lo agobiante que debe de ser.
—No tanto como un objeto cortándote el muslo —murmuro para mí.
—¿Qué?
—Que no tanto como buscar a la golosa de mi hermana.
—¿Golosa yo? ¿Quiénes que te recuerde cuantas veces lo hicieron ustedes en un día? —soy interrumpida por Julieta.
—¿Recuerdas a Daniel Grayson?
—Creo que las dejaré solas —interviene Aarón antes de irse.
—¿Y quién no lo haría? —una sonrisa traviesa se forma en sus labios.
—Luego recuerdas a tus amantes muertos, tenemos cosas más importantes en las que pensar ahora.
—¿Qué es eso tan importante que requiere nuestra absoluta atención?
—No lo sé, quizás la homicida más peligrosa del mundo esté libre. Pero no es para nada importante —hice un gesto para irme, pero soy detenida cuando ella se interpone en mi camino a velocidad vampira.
—Dime que es una broma.
—Jamás jugaría con eso, la prueba está en que algo demasiado filoso para mi gusto me está cortando la pierna —su miedo se incrementa al oler el metal de la daga.
—Eso no es posible. La escondiste con Erzsebet ¿Enloqueciste o se te contagio el trastorno mental de Erzsebet?
—No estaba con ella, estaba en la tumba de Tristán, protegida por el mismo hechizo que el de ella. Él se la entrego.
—Eso es imposible, él está muerto.
—Tal vez, pero las visitas que estoy recibiendo últimamente demuestras lo contrario.
—¿Por qué no me lo dijiste?
—No lo creí importante, pero ahora son demasiadas coincidencia: Ettore, Tristán... —dudo el siguiente nombre—, David.
Sus ojos se expanden asombrados, luego la ira se instala en ellos.
—Viste a nuestro hermano y aún así me lo ocultaste.
—Fue exactamente por tu reacción que no lo hice.
—Era mi hermano, debiste decírmelo —sus ojos se nublan por las lagrimas—. Seguro me culpa por su muerte.
—Tristán dijo que tenía un ejército de enemigos, quiere decir que me odia es a mí, y estoy segura de que fue por convertirte a ti. Te adoraba, podría jurar que no te culpa por su muerte.
—Esto es malo, muy malo. Tenemos que arreglar esto lo más pronto posible.
—Tenemos que viajar pronto a Čachtice. Ella no puede seguir con su casería.
—Por Dios solo le quedan dieciséis chicas — dice empezando a alterarse.
—Sí, sólo 16 jóvenes —murmuro para mí misma sintiéndome culpable—, será mejor que vaya a descansar, me despediré de Aarón y le diré que me iré pronto.
—Descasa, lo necesitas —se despidió y ambas fuimos a nuestras habitaciones
Jamás le dije a nadie que en realidad faltaban más, ni siquiera a Julieta. No es que no confié en ella, es todo lo contrario, no confió en el mundo en general. Si Bathory cree que solo le faltan unas pocas y al rellenar los espacios que le quedan no funcionan por que esa no es la verdadera cifra pensara que no funcionó y lo dejará, o al menos eso espero. Aún me intriga como sobrevivieron, es entendible de lobas, caen en un sueños profundo durante meses, si su corazón y cabeza siguen intactos sigue vivas, Erzsebet jamás dañaba sus rostros, lo cual es sorprendente a como deja sus cuerpos, pero todas las que sobrevivieron siendo humanas.
Avié fue de mucha ayuda al ir con nosotros y sacar de sus tumbas a las sobrevivientes durante la velada. Lo más probable es que reto a un ser más poderoso que ella.
"mataré al resto del mundo para completa el hechizo, ni siquiera el ser más poderoso me impedirá reunirme con mi amor, lo juro Caterina" su amenaza resuenan en mi cabeza atormentándome.
O tal vez no lo deje pero quizás no pierda nada en el intento.
Y de nuevo siento que aspiro mucho a la vida.
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HELLO.
Ya saben. Si les gusto denle me gusta y acepto en los comentario quejas, reclamos, felicitación, cartas profetizando su amor por la novela, realmente me encantan leer su comentarios, el lo que me inspira a escribir.
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LA ORIGINAL °SIN EDITAR°
VampiroSiempre te han contado la misma historia de que Dracula es el primer vampiro. Pues ella siempre se encargo de que todo el mundo creyera en eso. Su verdadera historia la marcara todo la eternidad. Una decisión que la condeno a vagar por el mundo com...