Miedo.

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Después de varías horas, por fin llegué a ese lugar donde en cada rincón viví miles de cosas. Llegue a casa, no había nadie, había olvidado que todos se encontrarían en el hospital.  Condujimos hasta el hospital. Estaba Adriana, Jeremy, Julio y más familiares, me imagino que de esme. 

-Hola mi amor.- Dice Adriana abrazándome. Abrazo a Julio, el estaba muy cansado, se le veía en sus ojeras. 

-Hermanito, tienes que ir a descansar.- Digo dándole un beso en la mejilla.

-No, no me iré de aquí.- Dice nervioso. 

-No he podido convencerlo.- Dice Jeremy interrumpiendo nuestra conversación.

-Bien, mira, vamos a que te bañes, y duermas un rato, en la noche te quedas tu.- Digo. Toda mi familia sabe que yo soy la única que puede obligar a Julio a que haga lo que sea. Effy y Eduardo se habían quedado en el coche, estaban cansados, pero cuando volví estaban despiertos,les presente a Julio y sin más conduje a casa.  Después de unos minutos, ya habíamos llegado, Julio abrió la casa, todo estaba igual, nada había cambiado en estos 4 meses que no estuve. 

-Venga, báñate y después duermes, eres más ojeras que hombre.- Digo riendo.  Sin decir nada más, subió a hacer lo que le pedí. 

-Mi amor, tomen asiento, por favor, están en su casa.- Digo.

-Si gracias mi amor.- Dice Eduardo. Veo a Effy lo cansada que esta.

-Effy, ven, vamos a mi recámara para que duermas un rato.- Digo subiendo las escaleras. Al mirar esa puerta con mariposas y girasoles, recordé aquel día que Justin había dormido en el piso por mi.

-Muchas gracias ___.- Dice effy recostándose en mi cama. No dije nada, solo salí de ese lugar.

El teléfono de la casa sonó. Baje a contestar, pero Eduardo ya lo había hecho.

-No se encuentra.- dice Eduardo. Sin saber quien había llamado, tome el teléfono.

-¿Con quien quiere hablar, disculpe?.- Digo sin más. Hubo un silencio.

-¿___?.- Escuche a la misma voz, que tanto me hace falta, esa voz grave, era la voz de aquel chico que me había enamorado. De inmediato, colgué.

-No era nadie importante, ¿me ayudas a preparar algo de comer?.- Digo nerviosa.

-Oh claro mi amor.- dice dándome un beso. Estaba muy nerviosa, conociendo a Justin, es capaz de venir a buscarme. Eduardo y yo preparamos papas fritas, ensalada,  y carne. Escuche a Julio hablarme desdé su habitación.

-Ya vuelvo mi amor.- Digo. Subí a la habitación y estaba descansando.

-¿Estás bien?.- digo. 

-Si, Justin viene para acá, me acaba de llamar, sabes que estás aquí.- Dice. Sentí miedo, miedo a justin, por como pueda reaccionar, en que le pueda hacer algo a Eduardo, o simplemente a caer en sus mentiras, una vez más.


Una vida juntos.❤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora