Capítulo 12

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Rose me contó que se iba a casar en un mes, por lo que decidí que el no recordar no me impedía conocerlos ahora. Solo que quería conocerlos de a poco y de a uno, para no atormentar mi cabeza. Por cuestiones lógicas había empezado con Emmett, por más que se lo veía grandote era muy bromista y muy inteligente. Entendió cuando le dijimos que la propuesta de conocerlos de a uno había sido mía. No venía muy seguido a casa, pero cuando lo hacia hablábamos de él, del ahora y del futuro. Le agradecí muchas veces que no sacara cosas del pasado que yo aún no recordaba. Me había dicho que era profesor de educción física en la escuela primaria del pueblo y que trabaja en un pequeño gimnasio. Ellos habían conseguido una pequeña casa en el pueblo, ninguno se quería ir de ahí. Los veía tan bien juntos, estaban muy enamorados y eran muy felices.

El día había llegado, Rose estaba hermosa con el vestido de novia. Mi madre controlando las lágrimas para que no se le corriera el maquillaje y mi padre nervioso como la novia, pero feliz. Fuimos a la Iglesia donde todos la esperaban. Con mi madre nos fuimos a nuestros lugares y a los minutos comenzó a sonar el Ave María. Nos pusimos de pie y los vimos entrar. Rose con una sonrisa enorme y vi que Emmett tenía los ojos llorosos. Cuando llegaron al altar, mi padre le tendió la mano de Rose a Emmett y él la tomo con un beso. Luego mi padre se sentó a mi lado. Pude sentir durante toda la ceremonia como un par de ojos estaban clavados en mí. Mire de reojo y vi que eran esas esmeraldas verdes con las que tantas veces había soñado.

Cuando la ceremonia finalizo nos fuimos todos a la fiesta. El salón estaba lleno de pequeñas luces blancas, las mesas tenía hermosos adornos florales. En el centro había una pequeña pista de baile. Todo estaba tan lleno de felicidad, había amor en el aire y eso se notaba. Después de que Rose bailo el vals con todos los hombres, se fue a una habitación a cambiarse el hermoso vestido blanco por uno más cómodo. La fiesta duró hasta el amanecer. Cuando me despedí le desee toda la felicidad del mundo.

Al mes de la boda comencé a conocer a Alice y a Jasper. Ella tenía un pequeño local de arte y él era abogado y tenía su propio Estudio, ambos se habían casado hacia más de dos años y vivían en Port Angeles. Hacia pocas semanas se habían enterado que iban a tener un bebé. Estaban felices, Jasper decía que Alice no paraba de comprar ropa, muebles y demás cosas para el bebé, yo me reía de las caras que ponía Alice cuando Jasper se quejaba de su manera de gastar.

Los días ahora pasaban rápido, el trabajo no había aumentado, pero desde que había empezado no había estado muy quieta. Agradecí poder estar ocupada un poco.

Un mes antes de mi cumpleaños Alice dio a luz a la pequeña María, tenía los ojos color miel igual que Jasper y el pelo negro igual que Alice. Era una beba simpática y muy hermosa. Los tíos de María eran muy protectores y celosos. Con Edward me hablaba poco debido que había algo entre nosotros que aún no entendía que era...

Mi cumpleaños veintisiete fue una pequeña reunión en casa de mis padres con mis amigos. Fue una noche llena de risas, lágrimas y de buenas noticias, Rose estaba embaraza, por lo que la celebración se hizo por partida doble. Alice y Jasper se habían ido temprano debido que tenían que viajar hasta Port Angeles y no lo querían hacer muy de noche. Y Rose y Emmett los siguieron como dos horas después. Mis padres se habían retirado a su cuarto a descansar. Solo quedábamos Edward y yo en el living.

-Por alguna extraña razón, que no recuerdo cual es ni por qué, he soñado con tus ojos todos estos año- le dije de golpe, sin pensar lo que decía.

-Te dije que te esperaría y así lo hice, no se que te pasó para que te olvides de todos nosotros, de mi. Pero ahora no importa, estás aquí, conmigo- y se acercó mas a mi lado y de pronto sentí un escalofrío y un recuerdo fugaz pasó por mi mente

-Vicky...

-Te acuerdas de Victoria

-Si. Todos estos años estuve con ella, hasta que nos recibimos y se fue a Londres con quien hoy es su esposo. Por que lo preguntas, ¿la conoces?

-Se podría decir que ella fue quien te arranco de mis manos el día que te fuiste a Harvard. Todos la conocemos, llego el último año de la secundaria. Vos te hiciste amiga de ella y con los meses cambiaste, estabas rara...

Me pare y comencé a caminar por todo el living, estaba descubriendo cosas que no me gustaban.

-Bella que ocurre

-Cómo puede ser posible que recuerde todo lo que hice con ella pero no recuerdo nada más, hace meses atrás me encontré con tres personas en la playa que me dijieron que eran amigos de ella y míos, pero no me acordaba de quienes eran hasta hace unas semanas atrás.

-De que más te acuerdas

-Me acuerdo de Alice, Jasper y Emmett... pero de vos no. No se porque. Esto es frustrante.

-Que es lo que te sucedió Bella en todos estos años.

-No querrás saberlo. Por lo que te conozco ahora, no te gustará oírlo. Pero si puedo decirte que Victoria me solía dar unos preparados y unas pastillas, las tome por meses. Me calmaban, ya que en ese momento no la estaba pasando bien. Pero de golpe dejo de dármelos.

-Recuerdas como te sentías cuando las tomabas

-Me sentía relajada y sentía como una niebla blanca me cubría. ¿Por? ¿Qué piensas?

-Que fue lo que te ocurrió para que ella empezara con ese cóctel- me pregunto serio y preocupado. Que es lo que sospechaba.

-Mi pareja en ese momento solía abusar de mi y mas de una vez me pegaba. Estuve internada dos veces, la primera por rotura de costillas y rodilla y la segunda estuve internada inconsciente dos días debido a un fuerte golpe de en la cabeza, de lo que me dijeron que sufrí perdida de memoria temporal...- vi como se le transformo la cara.

-Dios. Bella, amor. Si hubiera sido más fuerte. Sino te hubiera dejado ir. Nada de eso te hubiera pasado.- me dijo rodeándome con sus brazos.

-Tal vez, pero ya pasó. Ahora tengo que saber porque no puedo recordarte.

-Tu corazón parece recordarme- dijo con una mano en mi pecho y una hermosa sonrisa.

-Es mi corazón quien me esta volviendo loca, mi corazón quiere estar a tu lado, pero mi cuerpo siente la necesidad de alejarse. Necesito averiguar que me pasa- dije desasiendo el abrazo.

-De acuerdo, te ayudaré y te esperaré. Te amo y te amaré siempre.- me dio un cálido beso en la frente y se fue.

La Solución está en tu Corazón - Finalizada -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora