Capítulo 6

34 11 0
                                    


Domingo

Por fin, ya es domingo. Me desperte a la 6:00 de la mañana, por que es 1 hora de viaje. Los vamos como a las 7:00 y estariamos llegando a la playa como a las 8:00 am.

Ya puesto mi traje de baño, me puse una ropa comoda por encima

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Ya puesto mi traje de baño, me puse una ropa comoda por encima. Cojo otra ropa por si acaso, una toalla y mi bloqueador solar y lo guardo en la mochila que voy a llevar. También cojo mi tabla de surfear.

Bajo a desayunar, despues de un rato escucho el timbre. Me paro y abro la puerta, encontrandome a Carol y Skay.

– Hasta que llegan– digo desesperada.

– A mi no me culpes– dice Skay.

– Es que no encontraba mi bikini favorito– dice Carol.

– Okey, ya vamonos.

Cojo mis cosas y las monto en el auto.
Despues de 1 hora, llegamos a la playa. Bajamos y cogimos las tabla de surfear. Cuando consigimos un lugar con sombra, nos sentamos.

Las chicas se empezaron a quitar las ropa, para quedarse con en traje de baño. Me empece a quitar mi camisa y despues mi pantalón quedándome un traje de baño. Después me aplico el bloqueador solar.

– Vamos al agua ahora– dice Carol.

– Por mi esta bien. ¿Skay sabes surfear?– le pregunto mirando las olas.

– Un poco.

– Pues, vamos. Pero hay 2 tablas– digo.

– Yo traje otra, esta en el auto– dice Carol.

– Yo la busco y ustedes vayan a surfear– le doy mi tabla a Skay, para que surfeara.

Cojo las llaves del auto. Cuando llego abro el auto, busco en la parte de atrás y la encuentro. La cojo y cierro el auto con seguro.

Veo a Carol surfear muy bien. Desde que era pequeña mi papá nos llevaba a Carol y a mi a la playa a surfear. Vi que Skay sabia, pero no mucho, pero por lo menos se paraba en la tabla y cojia las olas pequeñas.

– Hasta que llegas– dice Carol.

– No me tarde nada.

– Mejor, por que no se callan y surfeamos. Que para eso es que vinimos– dice Skay.

– Tienes razos, vamos a surfear– le digo dandole la razón.

Le doy la tabla que traje a skay y skay me da la mía.

Despues de un rato surfeando, fuimos a comprar algo de comer. Cuando comimos, regresamos a la playa y nos acostamos en la arena.

– Cri, ¿quien te enseño a sorfear así?– me pregunta skay.

– Mi papá– le contesto.

– ¿Donde esta?– me pregunta mirandome interesada en saber.

– Pues no lose, el se fue hace unos 7 años– Skay no pregunta nada mas, por que estaba apenada.

DESTINOS CRUZADOS O A MUERTE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora