Pov Donghae
–Entonces le has dicho que la quieres.
Asentí. Estaba en un punto en que mi personaje se frustraba completamente porque era un idiota. Me pasé las manos por la cara y dejé que solo mis ojos se vieran bajo el flequillo para mirar a Yuri. Su personaje era mi mejor amiga, aunque en la vida real no hubiese hablado con ella más de una vez. Por suerte solo era un ensayo y teníamos el libreto junto a nosotros; aún debía ponerme de acuerdo con ella en muchas cosas.
–Pero te has ido corriendo... –añadió y yo volví a asentir, terminando de taparme la cara.
Lo mejor de todo... o lo peor, dependiendo de si se miraba desde el ámbito profesional o desde el hecho de que mi vida amorosa ni siquiera existía, era que ni mi personaje ni yo habíamos besado nunca a nadie. Así que me sentía bastante identificado. Yo tampoco hubiera podido acercarme a alguien, declararme y luego besarlo. ¡Era bochornoso! No me consideraba tan valiente.
–¿Por qué no la has besado? ¡La tenías a huevo! –se dejó caer frente a mí, sentada de piernas cruzadas en lo que se suponía que era su habitación.
Yo solo moví la cabeza de lado a lado.
Ni un beso. ¿Cómo se le ocurría al imbécil preguntarme si tenía sexo con ropa? ¿A él qué le importaba? Yo no iba preguntándole si se tiraba a la Rubia desnudo. ¡Qué asco! Sacudí la cabeza con más fuerza, intentando quitarme esa imagen de la cabeza. Ya había tenido suficiente con verlo desnudo. Maldito pervertido. Encima lo hacía adrede y luego se burlaba de mí.
Y cuando pensaba que iba a ser amable conmigo, se ponía a hablar de la Rubia. ¿Qué tenía ella que ver conmigo? ¿No podíamos comernos una pizza sin tener que oír "Hyoyeon"? Se me había quitado el apetito de solo oír su nombre. No la conocía, pero si salía con el imbécil era obvio que no me iba a caer bien. Además, había oído a Hyukjae contándole que se había caído en la universidad para evitar hablar de nuestro choque y la muy idiota solo había querido "darle besos en la herida". El grima subía por mi garganta solo de recordarlo.
Seguía oyendo a Yuri hablando sobre que no había nada de malo en no haber dado nunca un primer beso. Sobre todas las formas de darlo; podía ser romántico, asqueroso, a la fuerza, e incluso por una caída.
–Eso que te caes y ¡pum! Labio con labio. Como en las novelas.
Parpadeé una única vez mientras la miraba, dejando de oírla. Con las manos todavía sobre la mitad de mi cara, sentí que mis mejillas se calentaban.
Sí había tenido mi primer beso. Tenía sus secuelas cubiertas por maquillaje en mi labio superior; por base y un montón de labial para dibujar el contorno de mi labio. La herida no era muy grande, pero sí lo suficiente para que la gente no dejara de preguntarme qué me había ocurrido. Una caída tonta, ¿qué otra cosa podía haber respondido?
–Donghae, tu frase...
¿Qué?
–¡Corten! –mire a los lados, confuso. Maldición. Se me había olvidado por completo que estábamos en mitad de un ensayo– No pasa nada, Donghae. Di tu frase ahora y seguimos.
Asintiendo repetidas veces, empuje al imbécil lejos de mi cabeza y miré mi libreto para leer mis frases. Ni siquiera había leído más que el principio en el camino en coche. Estaba demasiado liado tratando de componer una canción como para ponerme a estudiar un capítulo entero. Pero no había problema; yo era el protagonista, así que tendrían que ser pacientes. Después de todo, solo había sido está vez. Solía ser bastante responsable cuando se trataba de límites de tiempo.
Me mentalicé lo necesario para fingir que era del estatus de Hyukjae antes de hablar. No quería hacerlo, pero Sooyeon había tenido razón y debía dársela. Vivir con él, en cierto modo, estaba siendo útil. Solo un poco. Por lo demás era un incordio.
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❝Hey! Don't touch me❞ [EunHae +18]
Fanfiction▶Queda prohibida la copia total o parcial de esta historia◀