Nirvana:
Me desperté con la cabeza martilleándome en la... ¿Habitación de Blake?
-Menos mal, pensaba que no te ibas a despertar nunca.- dijo Blake sentado en una silla.-El dolor de cabeza se te irá pronto, es lo que tiene la cohesión.
-¡¿Me has hipnotizado para traerme aquí?!-grite enfadada.
-Más o menos, más bien te hice creer algo que no pasó.-me miró con una sonrisa traviesa.- ¿De verdad te piensas que teniendo una cama comodisima me pararía a hacerlo en medio del bosque? A demás, no dejabas de llamar a Isaac mientras estabas hipnotizada.
Me quede pensativa, entonces, ¿Había sido una ilusión creada por Blake?
Alguien tocó a la puerta y Blake se puso de pie de un salto.
-¿Quién es?.-preguntó Blake
La puerta se abrió y entro una cabeza rubia.
-Hola, princesa. Tú madre se alegrará de verte.-dijo Hayden sonriente mientras entraba en la habitación.
-Hola mandril. A mí me alegraría ver cómo te tiras de un barranco.-contesté.
Se rió como un niño pequeño, cada segundo que pasaba tenía más ganas de que menstruase con cólicos incluidos.
Me levante y tenía ropa limpia ya puesta, era cutre a más no poder pero por lo menos estaba limpia. Mire todo lo mal que pude a Blake, me puse unas sandalias y salí detrás de Hayden... Muy a mi pesar.
No me podía creer que Blake me hubiese hipnotizado y me hubiese hecho creer que nos habíamos liado, era cruel y no tenía gracia, en mi corazón sigue Isaac y no hay hueco para nadie más.
Caminaba detrás del mandril hasta llegar a unas puertas negras muy altas, las abrió y me dejo pasar, estaba claro que era la sala del trono. Mi madre, Celine, tan imponente en unos de sus vestidos ceñidos que la hacían verse tremendamente joven.
Me acerqué a donde ella estaba sentada, en un gran trono plateado. La sala era enorme y tarde un par de minutos en llegar desde la puerta hasta el trono de Celine.
-Hola hija, ¿una noche dura? O eso me han contado- cruzo las piernas viéndose muy atractiva.- Creo que ya no eres una niña pequeña, ¿te parece normal todo este espectáculo? Entiendo que la sangre de Leviatan te haya afectado pero aquí siempre hemos estado dispuestos a ayudarte. Eres mi hija Ana y me preocupa tu bienestar pero no te puedo ayudar si no me dejas y así solo conseguirás convertirte en un demonio carroñero como Leviatan y no quedará de otra que cortarte la cabeza. Creo que hemos intentado ayudarte y...
-¿ayudarme? Te referirás a encerrarme en un sótano y tenerme vigilada, no sé tú pero para mí eso es más tortura que ayuda.- no me había dado cuenta de que había empezado a gritar a medida que las palabras salían de mi boca.
-Mi pequeña, no podíamos hacer otra cosa.-cambio el tono de imperativo al de madre cariñosa.- tu hermano y yo hemos pensado que es mejor que te quedes aquí un tiempo y si tu entrenamiento no va bien tomaremos otras medidas. Espero que entiendas que solo verás a tus entrenadores y a mí y que no saldrás de aquí hasta que veamos una mejora en tu autocontrol y cuando no puedan usar la cohesión en ti.
-Pero mamá... ¿Y sky? No sé nada de ella, ni de Sean, ni tampoco de Isaac. Quiero saber como están.- mi tono era entre suplica y un intento de imponerme.
Celine se calló durante unos segundos, el necesario para coger un cigarrillo y encendérselo
-Hija, Sean y skylar están bien, y Isaac... Él ya está con otra persona.
Antes de poder darme cuenta ya estaba llorando.
ESTÁS LEYENDO
Eres mi ancla (Isaac Lahey Fanfic)
Fiksi PenggemarDespués de tantos años intentando olvidar aquel día, el destino me ha traído de vuelta a mi ciudad natal, Beacon Hills, el lugar de dónde provienen todas mis pesadillas solo que, esta vez no será todo tan malo.