Capítulo XI: La Llamada

69 11 0
                                    


Al trascurrir los días en la mansión todo continuaba igual, Robinson era el presidente de las bodegas, Cesar esperaba que se venciera el contrato para poder poseer de todo lo que le dejo su padre, Gilary la hija de Ricarda estaba totalmente asustada cada vez más solía ver la aparición de la señorita Estefanía, pero ella aterrada no le contaba a nadie, comenzó a pensar que la difunta Estefanía quería darle un mensaje, pero ella no lograba descifrarlo aún.

Una tarde como cualquiera una llamada extraña llega al teléfono de la mansión, por casualidad contesta Doña Esmeralda, ella se da cuenta que la voz es conocida pero no logra descifrar quien es así que pregunta: -¿Quién es?

La extraña voz le responde: -Hola querida tía, ¿Ya te olvidaste de mí?, luego de todo el infierno que me hicieron vivir.

Doña Esmeralda muy nerviosa y preocupada dijo: -¡Dios mío!, ¡mija eres tú!.

Era la sobrina mayor de Doña Esmeralda, hermana de la señorita Estefanía, llamada Anastasia, fue enviada desde muy joven a un internado en Suiza por Don Octavio, ya que la joven era muy safrisca y andaba con muchos jóvenes del pueblo al mismo tiempo. Era una ofensa para una familia tan importante como los Maldonado de la Rosa, así que su tío por el bienestar de la familia decidió enviarla lejos, y así esta no le diera mala fama a lo que él con tanto esfuerzo y dedicación logró construir.

Anastasia en su llamada comentó a Doña Esmeralda que iba a regresar al pueblo, quisieran o no, ya que era una mujer hecha y derecha, una reconocida modelo, la perla mas apreciada y solicitada de Europa, que había hecho una gran fortuna modelando en las pasarelas mas importante de Suiza, para los diseñadores mas famosos del mundo.

Por supuesto Doña Esmeralda se negó rotundamente, sabía que esta mujer no iba a traer nada bueno al pueblo ni mucho menos a la mansión Maldonado; así que decidió llamar a todos y contarles.

Reunidos todos en la cena, excepto Marcos, Doña Esmeralda decide contarles que Anastasia iba a regresar; por supuesto los amigos del alma se enojaron y dijeron que esa mujer iba a traer muchos problemas a todos, Ricarda como siempre de desapercibida dijo: -¡Dios santo!, esa mujer no puede regresar, esa mujer es como Marcos, indeseable para esta familia.

Estelita argumentó y recordó que Anastasia era su mejor amiga, pero lo que nadie sabía era que ella había traicionado a Anastasia y temía que esta viniera a vengarse de ella.

Laura dijo. - En esta familia desde que Marcos asesinó a Estefanía no dejan de ocurrir desgracias.

Cesar, que había comenzado a querer de verdad a Marcos, desde que fue a conversar con él vio que decía la verdad, así que no iba a permitir que nadie más hablara mal de el en su casa. Así que con voz fuerte y clara dijo: El próximo que hable mal de Marcos en esta casa, se tendrá que ir, él es mi hermano y no permitiré que más nadie y mucho menos ustedes lo sigan juzgando. Y que sepan que le pediré que venga a vivir aquí, a su casa. 

Todos los amigos del alma estuvieron en desacuerdo, pero Cesar les recordó que él era el dueño de todo y allí se hacía lo que ordenara.


Mientras tanto, Amanda continuaba cada vez más asustada, la reina le había dejado una nota sobre la cama, pero esta vez  la dejó junto a la corona y eso solo significaba una cosa: muerte segura, la nota decía: "Entrégame la llave"


El Fantasma de la ReinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora