Lo siento + Jjk » Book 1 ✔️

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Mis clases de chino me estaban alocando. Era bastante complejo, sobre todo su pronunciación, pues la gramática era bastante cercana al coreano, exceptuando que el objeto directo iba después del verbo, y no como en el coreano que iba antes. Lo sencillo era que no existían formalidades, solo un nivel neutro. Ni siquiera escribir los caracteres me era difícil. Solo la maldita pronunciación que me sacaba de quicio. Ya llevaba más de cinco meses estudiándolo- desde que había llegado a la capital- de forma intensiva más la presión de la universidad, podía asegurar que estaba muy estresada.

Salí del instituto donde aprendía dicha lengua y me dirigí al Starbucks que solía ir después de clases junto con Taehyung o con Jiamin. Tenía examen dentro de 18 horas, uno cual debía estudiar demasiado. Así que imagínense cuan tensa estaba en ese momento. Ni siquiera podía detenerme a respirar, pero era solo un examen más y por fin adiós exámenes parciales. Miré mi reloj apenas llegué, ya iba diez minutos tardes cuando llegué al local, pero no vi a Jungkook en la entrada, donde habíamos acordado vernos. Por tanto, revisé mi móvil en búsqueda de algún mensaje, pero no había. Jungkook se estaba demorando más de lo normal, lo cual era atípico de él.

Ya habían pasado un mes desde aquella reunión en la casa de Taehyung. Esa noche en la que estuve prácticamente sonrojada y avergonzada gracias a muchos comentarios. Jimin era bastante directo con las chicas, en este caso con Jiamin, pues hasta la mencionada se volvía roja, ella siendo bastante desinhibida era de sorprender esa rojez en sus mejillas. Otros comentarios eran los de Taehyung, pues parecía notar la gran timidez que me rodeaba al lado de Jeon, y para romper la tensión se le ocurría decir comentarios bastante especiales. Sin embargo, no podía hacer nada, Taehyung era como un niño para mí, él era como un hermano más. Desde esa noche, por arte de magia, todos nos volvimos bastantes cercanos. Jimin seguía tratando de conquistar a Jiamin y viceversa, haciendo a Taehyung y yo cuestionarnos ¿Por qué no salen de una buena vez? pero era cosa de ellos.

Kook o Kookie, los apodos que solía decirle a Jungkook como cariño, resultó siendo el chico más dulce del planeta, siendo sincera. Muy contrario a lo que era Taehyung. La amistad que había logrado con Jungkook era bastante tranquila, mientras que con Taehyung eran hasta lágrimas de risas, y ¿por qué? Era porque Jungkook era bastante tímido, a pesar de que su apariencia decía lo contrario, y aunque a veces suela ser bastante extrovertido, la mayor del tiempo paraba tranquilo. Era muy amable y también sensible. Sensible era una palabra que no cuadraba si es que siempre lo veías sonriendo -muy aparte de su estado neutro que daba siempre cuando estaba concentrado-, sin embargo en una ocasión, lo encontré llorando luego de una fuerte discusión con su padre, quien lo había obligado a estudiar en una universidad que no quería y una carrera que detestaba. Incluso le cuestioné que por qué permitía eso, y su respuesta me dejó pensando: Es que tampoco no sé qué es lo que realmente quiero, por eso decido obedecerlos por el momento. Su respuesta desgarró mi corazón, si soy sincera, y no supe qué decirle. Y desde aquel entonces, ambos nos convertimos cercanos, inclusive podía decir más que Taehyung. Y no sabía si era por que sentí pena por él en ese entonces, o porque nos parecíamos en cierto modo en personalidad. Taehyung al notar aquella cercanía, me recalcaba el abandono que le hice, pues a él le había conocido primero, y por esa razón Taehyung sabía más cosas que Jungkook, solo por eso.

Y por esa misma razón, Taehyung fue el primero que se dio cuenta de mi atracción por Jungkook, desde el día en su casa. Dijo que vio como mis pupilas se dilataron al verle, pero se mantuvo callado hasta que vio que me volví muy cercana a Jeon. Confirmando su teoría. Quizá tal vez era esa la razón por la que me sentía tan parecida a Jungkook, la atracción que tenía a él me hacía tan... tan condescendiente con él, que le prestara más atención de la que debía, pero era inevitable, el gusto a veces te hace eso y no podía evitarlo. Por ende, Taehyung parecía comprender que pase más tiempo con él, como buen amigo. Taehyung aunque pareciera tonto y despistado, era muy perspicaz y astuto. Y lo adoraba por eso, y por muchas razones más.