Un mes con el príncipe

Todo es mejor en familia

-¡Megaraaaaa despierta!- gritó Clarissa sacudiéndola con brusquedad. -Hoy es un gran día-

-¿De qué hablas?- balbuceó intentando levantarse.

-Hoy es el día en que conoceremos a la futura familia. ¿No estas nerviosa?

-¿Futura qué? ¡Ah ya!- anunció emocionada -pues si un poquito pero técnicamente ya los conozco y...

-¡Shh! Me hablaba a mi, ya han pasado dos eventos importantes y en esos dos han encontrado pareja, aunque claro lo de Emilia es distinto pero... ¡No importa! ¡Es mi turno, me lo merezco y me toca! Todo mundo aléjese porque hoy conoceré a mi futuro esposo-

-Toc toc toc-

-Hablando de... Alteza justo hablábamos de usted. Ya le decía a Meg que me muero de ganas de conocer a su familia- dijo sonriendo.

-Si, acerca de eso. Debo advertirles que a pesar de ser de la realeza, aún somos una familia normal. Así que si notan un poco de... pues descontrol no se espanten y hagan lo que hagan no se acerquen a mi tía abuela-

Al dar las once en punto, un helicóptero partió su camino hacia el lugar acordado. Las chicas se encontraban emocionadas de encontrarse a tal altura.

Clarissa no paraba de hablar fantasías en donde encontraba a su príncipe justo al bajar del vehículo.
Dianne refunfuñaba fingiendo dormir para no tener que hablar con nadie y Emilia se encontraba sumida en una conversación con Meg quien descansaba sobre el pecho de Derek.

-Casi llegamos majestad- anunció el piloto al ver de entre los árboles, lo que parecía un gigantesco tapete de picnic.

-¿Derek?- susurró una mujer mientras se limpiaba los lentes -¿Eres tú?- lo siguiente fue una ola de abrazos y saludos donde lo único que podía hacer el chico era dejarse querer.

-¿Y esta es?- preguntó una mujer que se veía ya mayor, mirando con recelo a Meg, quién decidió no articular palabra.

Derek sonrió con nerviosismo pero antes de abrir la boca fue interrumpido por una voz que ya extrañaba. -Meg Potters-

-¡Roger!- gritó la chica corriendo a abrazarlo. -¿Como has estado?-

-Excelente niña, disfrutando de la vida con mi amada esposa. No podría estar más feliz-

-Hmm- masculló la mujer enfadada -Aún no tengo idea de quien seas y porque conoces a mis sobrinos tan bien. Digo, entiendo que quizás vivas con ellos pero eso no te da el derecho de tratarlos como tu igual.

Son tus soberanos y debes de mostrarles respeto o ¿es que tu madre no te enseño modales?-

-No, murió antes de hacerlo- susurró la chica, recibiendo una mirada desaprobatoria de la mujer.

-Pues debiste haberlo dicho antes de venir aquí, mira que hospedar a una jovencita que se piensa igual que nosotros, alguien debe de mostrarte tu lugar-

-Con mucho gusto te lo muestro- dijo Derek -Ven aquí Potters, tu lugar es junto a mí- susurró tomando su mano sin temor alguno.

-¡Derek! ¡No me lo puedo creer de tí! ¡Cuantas veces te he dicho que no es cortés ilusionar a las señoritas así, solo les vas a causar desagrado. ¡Eres un príncipe, comienza a actuar como tal!.

Si tan solo Roger me hubiera escuchado antes, no habría tenido debilidad por esa empleada y no hubiera sido necesario mandarlo lejos para olvidar esa tontería del amor-

-¿Disculpe?- gruñó Meg ante la mirada de advertencia de los otros -Lo siento mucho pero no me pienso quedar callada mientras usted no hace nada más que insultarnos.

Ni siquiera me conoce y ya esta pensando lo peor de mí. Es cierto que mi familia no es del todo convencional o que sea una joven con clase pero se lo que es querer a alguien de verdad.

Lo he visto muchas veces, con mis padres, amistades incluso entre su sobrino Roger y su, lamento si rompo su fantasía, esposa Amelia. Es algo mágico y lo se, porque lo he sentido también, no solamente por Derek, sino por todos mis amigos y mi familia.

Y lo que no logró entender es como alguien puede dejar eso por dinero, no puedes comprar amor, no puedes forzarlo. Si lo haces no estas mas que engañándote, no eliges a quien querer, tu corazón lo hace por ti.

Y si alguien es tan cruel como para querer elegir por alguién más, entonces supongo que ese alguién no tiene idea de lo sencillo que es sentirlo y lo difícil que es conservarlo.-

-¿Cómo te atreves a decirme eso? ¿Te crees que eres mejor que yo? ¡No me interesa quien seas, te quiero fuera de mi casa!- gritó con los ojos llenos de ira.

La chica no lo pensó ni un minuto y salió corriendo con Derek por detrás.-Potters espera- gritó tomándola del brazo.

-Lo siento tanto Derek, lo arruiné todo y entiendo si tendré que irme del castillo pero no podía quedarme callada. Amelia es familia de Roger y es mi familia, yo no podía dejar que siguiera con eso-

-No arruinaste nada, al contrario hiciste lo que ni él y yo nos atrevíamos hacer.

¿Sabías que ella prefería mil veces que nos casáramos con alguna prima lejana que con una..

-Plebeya, alguien pobre como yo-

-Si- susurró -pero eso ya no importa, te quiero a ti no a tu dinero. No hay mayor tesoro que el que me das al elegirme todos los días.- dijo besando su mejilla -Ahora ven es hora de volver a casa-

-¿Pero ella...

-No te preocupes por eso. Tu eres mi familia y cualquiera que diga lo contrario, ni siquiera merece que lo llame así.-

-No quiero que tengas problemas con ellos por mi culpa. Son tu familia-

-No es acerca de la sangre sino del corazón- susurró Derek -ven quiero presentarte a mi familia-

Dedicado con muchísimo cariño a las increíbles y maravillosas:

skytoo, MicaBlack17, PamelaAguilarGuadarr, adrisanchez2,  sofiramirez10, maddiewillson270,  encantadora98, Gissellgg,  Annett1509 y kathie2001