Pasaron varios días en los cuales ni siquiera vi la sombra de Harry.
Literalmente parecía como si se lo hubiese tragado la tierra. Pensé que tendría que verlo en la clase de pintura pero no fue así. De todos modos su ausencia era beneficiosa para mí porque su cercanía era capaz de alterarme.
Tracy por su parte me envió muchos mensajes preguntándome sobre Harry y por el supuesto “interés” que tenía en mí.
Ella no olvidaba que él estaba buscándome aquella vez y quería saber los detalles pero sólo le respondí que no lo conocía cómo para saber sus intenciones.
No le quise contar nada de lo que había ocurrido antes entre los dos porque no tenía sentido, además estaba segura que esos episodios no volverían a repetirse.Me dirigí hacia el salón correspondiente siendo la primera en llegar. Me encantaba que ocurriera de esa manera porque tenía la posibilidad de elegir el asiento más alejado del profesor.
Me senté a un lado de la ventana y miré hacia el exterior. Cerca del lugar había una pequeña cancha de baloncesto y algunos chicos se encontraban jugando.Recordé cuando iba a ver a mi hermano jugar en la primaria.
Esos tiempos fueron los mejores de mi vida porque no tenía complejos que me limitaran. Vivía con normalidad y disfrutaba cada momento junto a mi familia y amigos.Ahora daría lo que fuera por retroceder el tiempo y volver a esa época.
Extrañaba todo y aún más la relación cercana que tenía con mi hermano. Creo que él junto con Tracy han sido los más afectados con mi fobia porque inexplicablemente mi sistema me hacía sentir que eran casi desconocidos cada vez que me hablaban provocándome ansiedad al momento de responderles.A Ashton comencé a verlo como alguien imponente cuando entró a la universidad.
Ya no me transmitía la imagen del hermano afable y comprensivo desde el momento que decidió mudarse cerca del campus sólo para no tener que lidiar con los problemas que surgían entre mis padres por mi culpa.—Ojalá todo volviera a ser como antes — murmuré dando un suspiro.
La llegada de los demás alumnos y el profesor interrumpió mi cavilación y di un pequeño salto en mi asiento.
— Bien muchachos hoy la clase de pintura la haremos en el taller así que lleven sus implementos y diríjanse al lugar.—dijo el hombres canoso.
Todos acatamos las órdenes y caminamos hacia el taller.
Me molestaba un poco el hecho que cambiaran de un momento a otro la tónica de la clase porque la adaptación siempre había sido un problema para mí. Al más mínimo cambio mi sentido de la orientación se veía afectado y me resultaba difícil volver al estado normal.
Eso precisamente me ocurría ahora.
Ya había escogido el asiento apropiado y debía tratar de hacer lo mismo en el taller pero mis compañeros eran siempre el obstáculo.Finalmente pude conseguir un asiento casi al fondo y acomodé el atril frente a mí.
—Esta vez utilizarán la pintura acrílica para crear un paisaje—habló el profesor—Será su primera evaluación por lo que deben ser muy prolijos a la hora de pintar.
De pronto la puerta se abrió y la figura de Harry apareció en el umbral:—Perdón por el retraso.—dijo el rizado entrando con rapidez y llegando al lado del profesor.
—Tranquilo Harry. Acabamos de comenzar.
El chico asintió y se colocó el delantal.
Sentí un malestar profundo en mi estómago de tan solo verlo. Su presencia me tomó desprevenida y no sabía cómo actuar en este momento.
Lo único que sabía era que los nervios ya estaban actuando sobre mí pero inspiré profundamente para calmarlos.
Necesitaba canalizar toda mi atención en aquella pintura porque no quería tener una mala calificación. Volví a tomar aire y me dispuse a pintar.Resultó fácil elegir el paisaje que utilizaría.
Hace años mi familia y yo solíamos ir a una cabaña ubicada en un hermoso bosque durante las vacaciones de invierno.
El sonido de la lluvia golpeando el tejado y del viento meciendo los árboles eran mis favoritos. Además el riachuelo que pasaba cerca de la cabaña llenaba el lugar de vida.Todo resultaba ser de ensueño y lo más importante era que disfrutábamos esos pequeños momentos juntos y felices, sin problemas de por medio.
Comencé a trazar el cielo y luego el suelo. Después fui añadiendo los árboles y el riachuelo para terminar con la cabaña.
Concentrada al máximo ignoré todo tipo de distracción a mi alrededor por lo que en cuestión de minutos ya tenía lista la primera pasada.Sonreí satisfecha al notar lo que había hecho y me ocupé de afinar los detalles.
Sin querer de reojo miré a Harry y noté que estaba paseándose por el salón aclarando las dudas de los alumnos. Mi corazón se aceleró cuando se dirigió a ayudar a una compañera situada al lado mío. Por un momento creí que también haría lo mismo conmigo tal y como aquella vez que pintamos juntos pero caminó hacia otro sector, ignorándome por completo.
Evité tomarle importancia por lo que focalicé mi atención nuevamente en la pintura.
Después de largos minutos logré acabar con el trabajo convencida que no había más reparos por hacer.Escribí mi nombre en la pintura y sequé los pinceles para luego guárdalos. Estaba a punto de irme cuando repentinamente sentí la presencia de alguien situándose a mis espaldas cogiendo al instante el bastidor que estaba sobre el atril.
— A eso le falta que definas su contorno. También deberías hacer que se diferencien más los árboles aplicando la técnica del sombreado.—oí su ronca voz la cual logró descompensar mi transitoria tranquilidad. — Si presentas éste trabajo ten por seguro que conseguirás una calificación deficiente — habló con desdén para luego dejar la pintura en la posición inicial y alejarse de mí.
Permanecí perpleja mirando el lienzo antes de volver a fijar mi vista en el rizado quien parecía no inmutarse de lo que acababa de decir.
C.on esmero había intentado crear algo de calidad sin recibir ayuda por parte de él y ahora se acercaba solamente para criticar lo que había hecho. No era justo.La angustia me invadía porque la clase ya había terminado y mi trabajo al parecer no estaba completo. A mi alrededor ya no habían alumnos, todos habían finalizado sus pinturas. Sólo se encontraba el profesor y yo lo cual aumentó mi desespero.
Analizaba el paisaje con detención porque no estaba convencida que presentara los errores mencionados por Harry. Volví a hacer el mismo procedimiento, mirando minuciosamente cada detalle, obteniendo el mismo resultado.
Detestaba ser tan insegura al punto de tomar siempre en cuenta las opiniones ajenas y no tener el valor de arriesgarme por mis convicciones, por lo que yo estimaba que era lo correcto. Quizás sólo ésta vez debía creer más en mi misma, en mis propias capacidades antes de poner la confianza en el juicio de otras personas.
Guardé los pinceles nuevamente y salí del taller con la tranquilidad de saber que había hecho lo correcto.
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The only one ⇎ h.s ❴AU❵
Hayran KurguLa vida de Alice Jonhson escapaba de la normalidad. Tomando el silencio como su mejor aliado, vivía bajo la sombra de lo que siempre pretendió ser a sus diecinueve años y su miedo a socializar con las personas transformó las paredes de su hogar en s...