¿POR QUÉ EL? #2

¡Película en casa de Oscar!

Después de comer en el POMODORO, un "restaurante" de pizzas, nos fuimos a la casa de Oscar y Sonia que tenían al pie de playa. Allí cuando llegamos, le contamos a todos lo que había pasado con la ex-novia de Oscar y se empezaron a reír. Después Dylan  les contó que nos habíamos encontrado al Ken de Plástico y los mayores, no lo entendían y nos empezamos a reír. Después de estar un rato hablando para que el amigo de Oscar nos conociera a todos un poco, el hermano de Sonia se levantó y hizo que le prestáramos atención.

- ¿Os apetece ver una película de miedo? - por supuesto que todos le prestamos atención. Escuchar película de miedo para mi, es como si a un niño le dices que vas a ir al kiosco.

- ¡Si! - dije levantándome del sofá. Todos se quedaron impresionados de mi, incluso Dylan que ya me conocía. - Oscar, ¿podemos ver la película de la bruja?

- Tendría que buscarla. - dijo buscando en el ordenador.

- Si la encuentras, te como la vida. - dije sonriendo ante la cara que puso. Eso para los mal pensado significa que le vas a comer la ...... Todos comenzamos a reír, ante mi comentario pero, yo sabía que, Oscar no se iba a quedar callado.

- ¿Aunque sea larga y dura?  -dijo el cruzándose de brazos y poniéndose delante mía.

- No creo que sea tan larga. - ante eso, todos comenzaron a reírse pero Oscar, Oscar puso la típica sonrisa de "sigue diciendo esas cosas, que al final te voy a tener que hacer una perrería! Pero antes de que pudiera hacer nada, me cogió como si fuese un saco de patatas. Empecé a patalear, a golpearlo pero, no sirvió para nada. Parecía que estaba pegándole a un muro de ladrillo. Cando llegamos al puente de tablas que había allí en la playa, me soltó. Cuando intentaba recuperarme de los mareos que me había provocado, Oscar se sentó en el puente y agachó la cabeza.

En ese momento yo no lo entendía, pero al fijarme bien, vi que estaba llorando. Me sentí fatal de haberlo echo llorar pero........ ¡Espera! ¿Qué he hecho? No creo que se haya tomado tan a pecho lo de que la tenía pequeña? Pero....... ¿Y si es verdad? ¿Y si es verdad que la tiene chica? ¡Oh dios mio!

- Oscar yo....... yo....... lo siento, no debería de haber dicho eso. - dije sentándome a su lado.

- ¿Por qué te disculpas? No has hecho nada. - dijo el mirándome, con esos ojos verdes brillantes y húmedos por las lágrimas. 

- Por lo que te he dicho........ Oscar, ¿por qué estas llorando? - dije cogiéndole las manos y sonriendole, para hacer que se sienta mejor.

- Sabes, pensaras que soy tonto o mejor dicho un gilipollas pero, lo que ha pasado esta tarde, lo de ver a mi ex, decirle que eras mi novia y todo eso, me ha hecho recordar a cuando estaba con ella. Ella era igual que tu, así de loca, de risueña, de contestona, cabezota y todas esas cosas que me llaman tanto la atención en una persona. Se que estas con Dylan pero, si no lo estuvieras, tu serías la persona que querría a mi lado. - escuchar todas aquellas palabras me conmovieron muchísimo. Nunca nadie en el mundo, me había dicho que yo era lo que buscaba, que era una persona especial para el/ella. 

- Oscar yo....... - las lágrimas brotaron de mis ojos, como si hubieras abierto un grifo. El empezó a sonreír para hacer lo mismo que yo intentaba hacer antes.

- ¿Y tu por qué lloras ahora? - dijo sosteniendo mis mejillas con sus manos, sus manos suaves que tanto me gustaba tocar y la verdad, me agradaba sentir sus manos tocándome, me hacía sentir cosquilleos.

- Nunca nadie me había dicho eso. - dije mirándolo. - Ahora mismo, me veré estúpida, llorar por nada, vaya idiota. - dije cerrando mis ojos para no ver la expresión de su cara.

- ¿Estúpida? No, te ves muy linda. - dijo secándome las lágrimas con suavidad, como hacía Dylan cada vez que veíamos la muerte de Dobby o de Fred (Harry Potter)

- ¿Linda yo? Pero si soy un orco. - dije para reírnos los dos.

- ¿Un orco? Pues entonces eres un orco muy guapo. - dijo el riéndose.

- JAJAJA, refresquemosnos un poco para que nadie vea que "hemos sudado por los ojos". - dije poniéndome de rodillas para alcanzar al agua pero, al final, acabé tumbada literalmente en las tablas para alcanzar el agua. Cuando nos dirigíamos para la casa, se escuchaba una canción muy conocida para mi.

Entramos los dos y, todos estaban bebiendo "fanta y coca cola" y bailando, así que nos unimos a ellos. La noche fue divertida. Al final no vimos la película pero, esto de bailar con tus mejores amigos en una casa en la playa, era una nueva experiencia para mi que, nunca nunca quiero olvidar.

NUNCA ME CANSARÉ DE DECIRLO, CONOCER A MIS AMIGOS ES LO MEJOR QUE HA PODIDO PASAR, Y CONOCER A DYLAN, ESO YA NO TIENE PRECIO.