¿POR QUÉ EL? #2

Sinopsis.

¿Os preguntareis que pasó después de unos años no? Pues os lo voy a contar.

- Dylan sal, ya mismo nos tenemos que ir. Eres un lento. - dije abajo de la escalera. Hoy era la boda de Oscar y de María. Si, al final terminaros saliendo y ahora llevan tres años y han decidido casarse. Todos estábamos tan contentos que a mi antes de estar en la boda ya estaba llorando. Sonia, Lucía y yo parecíamos tres magdalenas, llorando antes de tiempo. Cuando Dylan, Mario y Alex aparecieron por las escaleras, nos quedamos lastres sorprendidas. Los tres iban con un traje azul con todo a juego y bajaban como los de las películas, lentos y sexis.

Nos cogieron de la mano y cada unos nos fuimos para nuestros respectivos coches. Allí afuera, nos esperaban Kevin y su novia. ¿A que no sabéis quien ayudó a mi queridísimo playboy a tener el bombón que tiene ahora? Pues fui yo, es mi prima Estefania. Se conocieron en mi 18 CUMPLEAÑOS, ahora tengo 21. Que viejaaa.

Después de estar todo el día allí en la boda con tantos bailes y tanta musica. Nos fuimos a casa. Oscar y María se fueron ese mismo día de Luna De Miel a las islas Canarias. Nos estuvieron enviando fotos toda la noche. Ese día mi abuela dijo que se quería ir a casa de la abuela de Dylan para que todos estuviésemos juntos en casa. Nuestro querido Jace, se mudó hace años por el trabajo y solo hablamos por Skype o por Whatsapp. Lo echábamos tanto de menos.

Después de una noche loca, divertida y con mucha musica, decidimos acostarnos. Mientras todos dormíamos, escuchamos un grito proveniente del cuarto de mi hermano y fuimos todos corriendo. Y allí estaba Sonia, loca de contenta saltando encima de la cama y Marcos riéndose y moviendo la cabeza de lado a lado.

- Marcos me a pedido que me case con el. - y cuando esas palabras salieron de esa ruidosa boca de Sonia, nos pusimos todos a saltar y a gritar como locos. Yo me subí con Sonia para darle un abrazo y gritar con ella tambien. Estaba tan contenta. No pudimos dormir en toda la noche y la verdad es que por parte era por la emoción y por otra era porque tenía mucha fatiga. Estuve toda la noche cerca del bate y cuando terminé de vaciarme, Sonia y Lucía me dijeron que fuese al medico. Les dije que no pasaba nada y así lo hice. No fui.

Meses después, nos vino Lucía corriendo a mi casa a decirnos a mi y a Dylan que ella se iba a ir a vivir con Alex cerca de nuestra calle. Estaba tan contenta por ellos. Dylan y yo decidimos dejar todas esas cosas para más adelante. Dylan y yo trabajábamos en un bar para pagarnos los estudios, ya que la cosa esta muy mala con la crisis. Eramos un no parar, lo que pasa que cada día yo me volvía más lenta, mas fatigosa y mas molesta. No le eché cuenta, ya que con el estrés, del bar pensé que sería eso y más si le añadimos la universidad.

Marcos y Sonia estuvieron como locos preparando los preparativos de la boda mientras yo y Dylan nos quedábamos en casa. Estaba tan dolorida y tan molesta que no podía hacer casi nada. Dylan me obligó muchas veces a ir al medico pero yo le dije que hacía falta.

Pero me llevó. Estuvimos cerca de dos horas esperando en la consulta del medico y estuve por irme dos o tres veces pero, Dylan me tenía bien agarrada del brazo. ¡Que pesaoooo! Cuando entramos en la consulta, me estuvo haciendo unas cuantas de pruebas en la camilla, incluso me tocó el vientre, cosa que me dolía mucho. El medico, (amigo de mi abuela) no paraba de sonreír a cada dos por tres. Yo me quedaba mirándolo confundida ¿por qué coño se ríe este? Me duele el vientre. Cuando paró de tocarme, Dylan me ayudó a bajar y el medico empezó a hablar.

- Bueno Miriam pues todo va bien, te aconsejaría que fueses al ginecólogo. - cuando el dijo eso, me levanté de la silla. ¿Había escuchado bien? ¿El ginecólogo?

- ¿Para que voy a ir al ginecólogo? - dije mirando al amigo de mi abuela.

- Miriam, ¿sabes que estas embarazada no? - cuando dijo eso, me quedé de piedra. ¿Yo, embarazada? Esto es un sueño. Miré a Dylan el cual, no se había meneado de la silla y seguí sin moverse. Estaba igual que yo.

Salimos de la consultas sin decir nada. Me había dicho que estaba de cuatro meses y medio pero. . . ¡No se me notaba nada! Cuando nos monta.os en el coche, Dylan me cogió las llaves del bolsillo y se metió en el coche. Yo mientras estaba haciendo cálculos. Cuando nos montamos, Dylan estaba apoyado en el volante. Pero de repente se levantó y tenia una sonrisa en la cara. ¡Voy a ser padre! Empezó a gritarlo mientras yo no paraba de reírme. Se bajo del coche y todo el mundo se le quedó mirando. Después de montar todo eso, se vino hacia a mi y me besó. ¡Vamos a ser padres! Dijo el loco de contento mientras nos metíamos en el coche y así estuvimos todo el camino. Cuando llegamos a casa, se lo contamos a todos. Todos locos de contentos saltando y gritando pero claro, a mi no me dejaban saltar por el tema del bebe.

- Bueno, ¿y es niño o niña? - Dylan y yo nos quedamos petrificados al escuchar esas palabras. Mierdaa, ¡no lo hemos preguntado!

- Pues, no lo hemos preguntado. - dije riendome. Todos empezaron a reír conmigo. Estaba tan petrificada cuando nos lo dijeron que, se me olvidó lo que tenia que hacer.

¡Voy A Ser Madre!