Es Mío

Capítulo 5

Entro a la habitación y pongo música a bajo volumen. Es buena en momentos de tranquilidad. Acomodo mis cosas en los cajones y el baño. Estaremos en Texas 4 días y debo decir que el clima no es amable conmigo, hace un calor de los mil demonios y debo decir que yo no estaba preparada para eso, mi ropa entera es de frío. Supuse que haríamos gira pero no en Texas y países que arden como el infierno. Así que supongo que me veré obligada a salir y comprar algo de ropa.

— ¿Qué crees que haces?—Una voz retumba en mi habitación y suelto un grito del susto.

—Santo Dios—Me giré después de apagar el sistema de sonido. Lo miro algo confundida—Me asustaste, aunque parezca obvio.

—Mmm. ¿Estás bien?—Ahora se preocupa que esté bien. Que bipolar.

—Si lo estoy. ¿Sucede algo?

—No, sólo venía a decir que la comida esta lista. Vamos—Intenta entrelazar nuestros dedos, pero yo finjo no notarlo y regreso por mi celular. Me adelanto a salir y lo escucho mascullar algo sobre la indiferencia y cómo la detesta.

—Elena esto esta delicioso. Que me perdone mi madre pero eres la mejor cocinera del mundo—Asiento mientras miro con deleite mi plato.

—Gracias cariño, que bueno que te guste.

—Elena hace las mejores hamburguesas en este mundo, ¿No es así?—Lenny le envía una mirada cómplice y ella carcajea mientras limpia su boca con una servilleta.

—No caeré en tu trampa Lenny, les he dicho que sólo haré comida chatarra una vez al mes.

—Y a ti Sofía, ¿Qué comida te gusta?—Damon pregunta y un nudo crece en mi garganta, al paso que voy seguro no me acostumbro a estar cerca de Hércules versión 2.

—Las alitas picantes, ¿Eso es considerado comida chatarra?—Pregunto a Elena.

—Algo así, pero estoy seguro que Elena algún día las podría hacer, ¿No es así?—Él taladra a Elena con la mirada.

—Tal vez algun día te sorprenda cariño—Me mira con dulzura. Sin poder evitar mira al tigre que la acecha sin remedo.

—Gracias de verdad—Le sonreí cómoda—Em, ¿Sabrán de algún centro comercial cerca? He tenido algún problema con mi elección de ropa—Elena asiente como concordando conmigo.

Damon me mira un momento que se vuelve incómodo tanto para mí, como para los demás.

—Lenny te llevará—Sentencia.

Me enoja saber que él decide lo que hago ahora—Él es su trabajador señor Ivanovic, no el mío, puedo ir y volver sola perfectamente.

—En Texas todos tienen un arma Sofy, estoy bien con llevarte—Sé que lo dice para aligerar el ambiente. Pero me enoja saber que en el fondo y de manera principal sólo lo hace por darle la razón.

—Deja de retarme Sofía. Lenny te llevará y fin de la discusión—El ruge con decisión a mi lado y mi enojo crece aún más.

—Gracias Lenny—Le sonrío. Dejo el cubierto a un lado dispuesta a levantarme— Pero iré y regresaré sola, como ha sido mi plan desde el principio.

—Entonces te llevaré yo—Él golpea la mesa justo cuando he dado dos pasos lejos de la misma.

—No es necesario que lo haga, señor—El parece más enfurecido con el hecho de que lo trate de usted, pero creo que mi postura no es de extrañar. Es mi jefe y nada más. Esto no es un tipo de reclamo o algo de rebeldía, es una simple decisión como empleada que debe ser respetada.