Dalia
Llego a la puerta de mi edificio, entro y veo como siempre a la señora Peyton en su escritorio leyendo quien sabe que, paso y le digo buenas noches a lo que ella solo me mira y baja la mirada como si no me hubiera visto ¡vieja mal agradecida!. Pongo los ojos en blanco y giro para subir por las escaleras, aunque son muchas, no voy a usar el elevador.
Llego al pasillo de mi puerta y siento como si me miraran por lo que giro, pero no hay nada, ni nadie, el miedo se apodera de mí y entró de golpe al departamento. Siento que algo vibra en mí, ahora si estoy a punto de morir de miedo, pero me doy cuenta que es mi celular que está en mi bolsillo.
Tonta
Dice mi conciencia.
— ¡Oh! cállate que a ti también te dio miedo —digo en voz alta mientras cojo mi teléfono.
— An dice en la pantalla y contesto de golpe.
— Hola mujer, ¿dónde te metiste me tenías preocupado? —dice al otro lado de la línea.
— Hola An, lo siento sabes que el trabajo me consume y ni hablar de la universidad —le contesto mientras camino y me cuesto boca bajo en la cama.
— Pobre de mí BFF, pero ni te cuento ¡hoy tres chicos me dieron su número, soy candente —el orgullo se nota en su voz.
— Si claro Andy Brown el gay más candente de la ciudad —bromeo.
— Jajaja, chistosa, me vienes a ver mañana ya que a Liv y a mí nos tienes olvidados.
— Si mañana será.
— Bueno mejor amiga, tengo un chico esperándome, esta para tener sexo del bueno, hablando de eso ¿hace cuánto tiempo que no follas?
— ¡An! —le grito.
— Bueno, bye baby good night...Ahh y es gringo.
— Si eso son tus favoritos, bye a ti también —me despido.
— ¡Chau!
Cuelgo, la verdad es que yo pienso primero en mis estudios que en una "noche de sexo salvaje " vienen a mi mente las imágenes de An y el gringo...Deja de pensar eso Dalia ya basta listo ahora a comer.
Me levanto de la cama y voy directo a la ducha, las gotas tibias de agua alivian mis preocupaciones. Salgo de la ducha, mientras me cambio de ropa me pongo un piyama que tiene unos ositos realmente me hace ver infantil, pero es la única que tengo limpia... Hablando de eso debo ir a la lavandería, salgo un rato al balcón que hay en mi depa, por eso lo escogí amo la vista desde aquí, camino hacia los barandales a la derecha de ellos he puesto una mesa y una silla, en el centro de la mesa siempre hay flores.
Viró hacia la derecha y noto que la luz está prendida en el otro depa, es como el mío solo que un poco más grande, hay cortinas negras por lo que no me permite divisar nada pero si allí no vive nadie desde...... ¡la virgen!
Es el alma del Señor Robinson.
Se preguntarán...
¿quién diablos es el señor Robinson?
Bueno, él era un veterano de unos 70 años que se mudó un mes antes que yo al edificio, era mi vecino, sus hijos era unos malagradecidos, lo habían olvidado, solo le depositaban dinero en el banco para sus gastos, como si el dinero llenara todos los espacios vacíos en una persona, el dinero no nos hace conseguir el amor, bueno me desvío del tema, él fue la primera persona del edificio en hablar me, recuerdo esos días que llegaba mal debido a que él me seguía atormentando, el señor Robinson me invitaba a comer y contaba historias de sus años en la milicia aquellos años de guerra, en los que dio los años más valiosos de su vida y perdió la oportunidad de ver crecer a sus hijos.
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Mi Vecino(Ed Sheeran)
FanfictionDalia McCoy es una joven que parece tener una vida feliz sin ninguna preocupación, pero detrás de esa fachada de chica segura, se esconde una chica llena de inseguridades y heridas que nunca sanan. Todo cambia cuando se muda un nuevo vecino, quien n...