Desperté de la forma más natural posible, sin utilizar algún despertador o que alguna persona lo hiciera. Luego recobré el sentido y me moví un poco desesperada.
-Steve...cariño...
Dije mientras movía su hombro para poder despertarlo. Abrió los ojos con lentitud, me contempló por unos segundos y juntó mi cuerpo contra el suyo.
-Hola amor -besó mi mejilla.
-No llegamos anoche, los chicos nos mataran.
-Tranquilízate, llamaré a Jeremy -tomó el teléfono del suelo y lo colocó en su oído.
Avancé hacia el extremo de la azotea dando pequeños pasos. Sólo llevaba la ropa interior, el vestido seguía estando en el suelo. Minutos después, sentí un cosquilleo en el cuello.
-¡No, Rous! -alcé la voz. Giré quedando frente a él y coloqué una mano en su pecho deteniéndolo.
-Sólo dime una razón por la cual no quieres.
-Porque si accedo, Jeremy encontrará nuestra ropa interior por todos labios.
-Cierto -me dio un rápido beso en los labios-. Por cierto, Jeremy me dijo que tus amigas insistieron en venir.
-Déjame adivinar, ¿Jessica e Itzel? -bufé.
-Sí -soltó una pequeña risa-. No tardaran en llegar.
-Está bien, pero antes -tomé su teléfono, coloqué la cámara y lo posé frente a nosotros-. ¡Sonríe esposo!
Sonreí, sonrió y la fotografía se tomó. Por obvias razones en el retrato sólo se miraba nuestros rostros. Lo besé y le entregué el teléfono para poder ponerme el vestido. Luego de vestirnos, bajamos de la azotea y corrimos por las escaleras para llegar fuera del edificio. El auto de Jeremy estaba estacionado, mis dos amigas estaban impacientes afuera de él. Jeremy tomaba un vaso de café.
-¡Ya era hora! -gritó Itzel mientras nosotros llegábamos al auto tomados de la mano.
-Cállate -dije riendo y la saludé de mejilla. Luego de ella, saludé a Jessica y a Jeremy.
-Y díganme que hicieron -preguntó Itzel alzando las cejas.
-Cosas de esposos -respondí y reí.
-Jenni, ¡qué emoción! -gritó.
-Hermano, muero por aprender español, no entender me está matando -habló Steve.
-Lo mismo pienso -dijo Jeremy-. Toda la mañana estuvieron hablando en español y burlándose de mí por no entender.
-¡Eso no es cierto! -gritó Jessica-. No nos reíamos de ti, nos reíamos contigo -rio.
-Así que estuvieron torturando a mi hermano, eh -dijo Steve.
-No lo torturamos, sólo que Itzel no sabe inglés y tenía que hablarle.
-¡Eh! Dejen de hablar inglés, no entiendo -habló Itzel. Todos comenzamos a reír.
-Jeremy y yo no sabemos español, bueno sólo lo básico -dijo Steve.
-Es fácil, Jenni puede enseñarte -dijo Jessica.
-Eso espero -contestó y me besó los labios.
-¡Que lindos! -expresó Itzel-. Y bueno, ¿a dónde irán de luna de miel?
-Aún no lo hemos hablado -contesté.
-¿Qué dijo? -preguntó Steve.
-Luna de miel, cariño. Nos pregunta qué a donde iremos -le dije a Steve.
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Viviendo el Sueño ©
Roman pour Adolescents¿Cómo diferenciar la fantasía de la realidad? El sinónimo perfecto de la palabra fantasía sin duda alguna lo gana Jennifer Smitt. Jennifer es una chica llena de sueños y metas que tiene propuestas a futuro. El deseo de realizar uno de sus sueños hac...