Era fin de semana y yo estaba en mi balcón viendo la lluvia caer. Los audífonos estaban en mis oídos mientras escuchaba los adelantos de las canciones que Kyler estaba grabando con la banda.
Mis manos subían y bajaban por mi abultado estomago de dieciséis semanas de embarazo.
Kyler y yo hablábamos todos los días, ya sea por Skype o por teléfono. Todos los días me contaba lo que hacía con la banda y me había estado mandando canciones que estaban grabando para pedirme mi opinión, pero ¿Qué le podía decir? Todas las canciones eran grandiosas.
Cuando la canción que estaba escuchando terminó y comenzó la otra me quité los auriculares y los coloqué alrededor de mi barriga.
—¿Escuchas mi amor? —le hablé a mi bebé, aún acariciándolo—. Ese que canta es tu papi. Aún no sabe de ti, pero sé que te amará.
Había averiguado en varios blogs, que ponerle música a los bebés desde que están en gestación, ayuda a desarrollar la inteligencia musical. Quería que nuestro bebé también naciera músico o música cómo su padre. O una gran dibujante como su madre.
Al terminar la canción me dio hambre así que fui a la cocina por algo de comida. Al ver a Jake frente al refrigerador buscando comida, me detuve en la entrada.
Me había estado escabullendo de Kyle y Jake, debido a que mi barriga ahora con cuatro meses de embarazo era más notoria y ya no podía ocultarla bajo mi ropa floja que había estado usando.
Estaba por regresar a mi habitación cuando Jake cerró el refrigerador y se giró rápidamente, viéndome. Su mirada bajó a mi abultado estomago y gritó.
Yo también grité. En realidad, ambos gritábamos. Skyler y Kyle aparecieron rápidamente por el otro lado y miraron a Jake.
—¡¿Qué pasa?! —gritó Kyle.
Jake no respondió y sólo apuntó a mi estómago. Kyle miró mi estómago y luego encontró mi mirada.
—¡¿Estás embarazada?! —gritó de nuevo.
—Sorpresa —forcé una sonrisa. En un momento Jake estaba en suelo inconsciente.
—¡Oh, Dios mío! —los tres nos acercamos a él, arrodillándonos a su lado.
—¡Jake, Jake! —lo removí.
—Es un idiota, ¿Qué le pasa? —espetó Kyle molesto. Nunca había visto a Kyle molesto. Skyler se levantó y tomó un vaso llenándolo de agua en el fregadero. Lo tomó y vació el agua sobre el rostro de Jake, haciéndolo reaccionar.
—¡¿Qué pasó?! —habló rápidamente.
—Te desmayaste, idiota —respondió Kyle poniéndose de pie.
—¿Por qué?
—Sólo porque Hayley está embarazada.
Los ojos de Jake se volvieron a mí rápidamente.
—¡Santa mierda! —espetó. Se puso de pie secando su rostro con una toalla que Skyler le dio—. Pero....pero....
—¿Podemos ir a la sala y hablar cómo personas normales? —bufó Skyler. Kyle se volvió a ella.
—¿Tú lo sabías?
—Es mi hermana —rodó sus ojos—. Ahora muevan sus traseros a la sala.
Jake pasó primero seguido de Kyle. Skyler me lanzó una mirada y fuimos tras ellos. Ambos se desplomaron en el sillón y Skyler y yo nos sentamos en el otro.
—¿Nos estuviste mintiendo todo este tiempo? —cuestionó Kyle.
—No es mentir, sólo omitir un pequeño detalle.
ESTÁS LEYENDO
A Pesar Del Tiempo.
Teen FictionHan pasado dos años desde la última vez que se vieron. Kyler y Hayley se vieron obligados a separarse para sanar sus heridas. Pero ellos saben que en dos años pasan mucha cosas, perdonas, olvidas, cambias, y sobre todo, conoces nuevas personas. El d...