Habían pasado más de dos meses del nacimiento de Kylie.
Dos meses en los que había sido la mujer más feliz sobre la tierra. Y sólo por los simples hechos, de tener a la bebé más hermosa del mundo y estar comprometida con un gran hombre.
No voy a mentir, el hecho de ser madre era cansado. Tanto para Kyler y para mí todo era cuidar a Kylie, cambiar a Kylie, dormir a Kylie...ella simplemente era nuestro mundo.
Y entre más crecía más bonita la miraba. Su cabello castaño había crecido más, y sus ojos eran un azul verdoso exactamente como los de Kyler. También había ganado más peso y estaba mucho más grande.
Kyler, por otro lado, había permanecido conmigo en esos dos meses. Al principio creo que fue difícil para ambos acostumbrarnos a nuestra nueva vida, pero ahora era algo normal.
Había notado que estaba algo tenso y preocupado por no estar con la banda. Y lo entendía, era su pasión, pero desde que nació Kylie todo parecía cambiar. Y no es que haya dejado la banda, sino que no se había estado presentando con ellos por estar con nosotras, y yo...me sentía mal. Más al saber que Scott lo estaba presionando a volver. Él no me lo había dicho, pero lo había escuchado hablar un día por teléfono.
Y no, no me molestaba que no me lo dijera. Sabía que no quería poner esa carga en mis hombros, pero la sentía. No habíamos tenido la oportunidad de hablar acerca de ello, y no es porque no tuviéramos tiempo sino...creo que simplemente era algo que estábamos evitando.
También habíamos iniciado con los preparativos de la boda. Skyler se ofreció a organizar todo y me sentí aliviada, quien mejor que mi hermana para organizar mi boda. Ella también se había ofrecido a cuidar a Kylie mientras yo volvía al trabajo.
Tuve que reintegrarme después de haberme ido por más de dos meses. Extrañaba a mis niños, mis alumnos.
Kyler había dicho que pasaría por mí y estaba por terminar de recoger todas mis cosas, cuando mi teléfono sonó con un nuevo mensaje de texto:
Estoy afuera.
Sonreí para la pantalla como si Kyler pudiera verme.
Tomé mis cosas y salí de mi salón justo en el momento en que Chris iba pasando. Disminuyó su paso al verme y sonrió.
—Hola, Chris —lo saludé.
—Hola, que gusto verte de nuevo en la escuela.
—Gracias, yo...ya extrañaba mis alumnos.
—Lo imagino, amas lo que haces.
—Sí —suspiré. Un silencio incómodo cayó sobre nosotros. Chris rápidamente queriendo evitar una incomodidad, se aclaró la garganta y preguntó:
—Y ¿cómo está tu bebé?
—Muy bien —respondí, una sonrisa extendiéndose en mi rostro. Skyler cuidaba de ella cuando yo venía a trabajar y luego pasaba por ella. Ella se alegró tanto de pasar más tiempo con su sobrina 'favorita' como decía, y tenía que serlo, era su única sobrina—. Es una bebé hermosa.
—Tú eres su madre, es de esperarse.
Sonreí. —La amo tanto, que a veces siento que no la merezco. Tengo miedo de no ser una buena madre para ella.
—Ya lo eres, Hayley —dio un paso más cerca y sonrió—. Estoy seguro que eres la mejor mamá de todas.
—Gracias —sonreí—. Tengo que irme, Kyler me está esperando. Nos vemos luego.
Él asintió y me dio un rápido abrazo, para luego seguir su camino. Salí de la escuela y el auto de Kyler estaba parado justos en la entrada.
Sonreí al verlo y él me sonrió de vuelta. Bajé las escaleras y estaba por abrir la puerta del auto cuando escuché mi nombre:
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A Pesar Del Tiempo.
Teen FictionHan pasado dos años desde la última vez que se vieron. Kyler y Hayley se vieron obligados a separarse para sanar sus heridas. Pero ellos saben que en dos años pasan mucha cosas, perdonas, olvidas, cambias, y sobre todo, conoces nuevas personas. El d...