Cheater (origen Del Mal)

Capítulo 29.

Era evidente que ellos sabían la ubicación de mi casa, me imagino que la razón por la cuál no habían venido por mi antes era por que no tenían las pruebas suficientes en mi contra para culparme de cualquier hecho, ya que siempre cambiaba mi rostro, pero luego de lo que pasó, ya tienen suficiente información visual para atreverse a venir a mi casa, así que debo buscar otro lugar donde quedarme mientras me preparo para la gran batalla que se avecína.

Me encontraba en la casa de vianny para ver si había hecho lo que le pedí, y para que me ayudara con lo que tenía pensado hacer.

—Vianny espero que ya hayas conseguido a las nuevas chicas —le dije luego de que ella me abriera la puerta de su casa.

—¡Hey! Pero al menos saluda, mal educado —respondió ella con una leve sonrisa.

—No estoy muy bien que digamos vianny así que debemos darnos prisa —le dije con frialdad en mis palabras.

—¿Qué pasa tony? —preguntó preocupada.

—Te contaré todo pero primero dime que si tienes las chicas que pedí.

—Te tengo a una que vale por diez, por ahora, no tuve tiempo de juntarlas a todas, ella esta aquí conmigo, ven para que la veas.

Entramos y nos sentamos en la sala junto a la chica.

—Tony ella es perla, perla el es tu nuevo jefe tony —nos dijo vianny mientras se acomodaba en el mueble.

Antes de hablar, me quede viendo en sus ojos para ver si tenia buenas intenciones o si podía confiar en ella.

—Un placer conocerte perla, espero que nos llevemos bien.

—Si lo mismo digo, vianny me ha contado de ti, y me pareces interesante —me dijo con cara de emoción.

—Bueno pues sin mas que decir vamos a salir hacer unas cuantas cosas, en el camino les cuento todo lo que ha pasado, como esta la situación, y lo que vamos hacer.

—Está bién, vamos perla —dijo vianny.

Nos fuimos en el auto de vianny y en el camino les conté todo lo que estaba pasando.

—¿Y ahora que haremos tony? —preguntó vianny.

—Lo primero que haremos es conseguir 3 vehículos veloces, y luego les diré a donde iremos.

Fuimos a comprar tres lamborghini. usé la hipnosis en el sujeto que nos atendió para que nos entregara los autos legalmente sin darle ni un peso, cada uno tomó un coche y fuimos a modificarlos y a personalizarlo a nuestro gusto.

Luego de terminar con los autos, salimos a la calle como sí fuéramos dueño de ella, cada uno en su lamborghini, y yo en el medio por supuesto, guiandolas hacia nuestro nuevo destino.

Ya era hora de darle un mejor uso a mis poderes, asi que fuimos a infiltrarnos a unas cuantas bases militares en busca de armas, explosivos, y cualquier otra cosa que llamara mi atención y que sirviera para destruir.

Mandé a mis dos chicas a entretener a los guardias mientras yo entraba a la base y buscaba información suficiente para infiltrarme. luego de obtener la información tomé un uniforme y cambié mi físico por el de un militar de alto rango, usé la hipnosis en unos cuantos militares para que cargaran todo lo que me iba a llevar.

Me fui con un camión cargado, manejado por uno de los militares; y así íbamos por las calles, tres lamborghini y un camión militar atrás. Pero aún necesitábamos una guarida donde crear todo lo que tenía en mente, no podíamos ir a la casa de vianny ni a la mía.

En los coches teníamos instalado un sistema de video llamada, para ir hablando en todo momento por medio de una pantalla que teniamos al lado del volante.

—Perla, ¿donde es que vives? Necesitamos una nueva casa para escondernos, ¿podemos ir a la tuya?.

—mejor que una casa tengo una verdadera guarida, es un espacio subterráneo, solía ser de mi padre pero el ya no está.

—¡Excelente! Vamos a volver ese sótano, el sitio más cómodo de la ciudad —dije con una pequeña risa de emoción.

Dejamos que perla fuera adelante ya que ella era la que sabía donde estaba la nueva guarida. Cuando llegamos al sitio, era perfectamente lo que buscaba, era un espacio grande y discreto, con espacio para 10 vehículos en el área del parqueo que también era subterráneo. El sitio era un poco retirado de la ciudad, por lo que no íbamos a tener vecinos mirando los cargamentos que llevemos allí.

Luego de unos días ya teníamos nuestra guarida perfecta, reforzamos y ampliamos más el lugar, para poder entrar debíamos usar nuestra huella digital, un completo sistema de cámaras de vigilancia por dentro, por fuera, y por todo el alrededor. Teniamos el lugar bien amueblado, que brindaba una comodidad excelente en cualquier parte de la guarida, teníamos un salón de monitoreo con varias pantallas grandes, que permitían ver todo lo que pasaba alrededor de la guarida, salón de video juegos, un gimnasio, un gran laboratorio, un campo de entrenamiento, el área de la cocina era enorme, teníamos una gran despensa, y por supuesto no podían faltar máquinas industriales para crear nuevos tipos de armas y artefactos súper tecnológicos.

Ya tenía todo preparado, solo me faltaba llenar mi mente de valiosa información científica y tecnológica.

duré varios días leyendo en Internet, y compre una gran cantidad de libros para nutrir mi mente, ya que podía leer a una gran velocidad y cada cosa que leía, o veía, nunca, pero nunca se me olvidaba, mi mente era un tipo de ordenador, o un buscador así como Google; no sabría bien como definir el rendimiento exacto de mi cerebro, pero quizá yo usaba el 90 o el 100% de su capacidad. Me basta con ver un paso de baile, una acrobacia, o cualquier otra cosa para copiarla a la perfección ayudado con mi gran visión me resulta aún más fácil.

Luego de terminar de leer, fui a hacerle una visita a unos cuantos científicos, y a grandes emprendedores en el área de la tecnología, con el fin de ver sus proyectos y mirar en sus mentes para tener aún más conocimiento.

Ahora me encontraba en el laboratorio trabajando en mi primer proyecto, había buscado información sobre el magnetismo, y estaba creando un artefacto que me permitiera utilizar el magnetismo a mi favor.

—Tony, tengo reunidas al nuevo grupo de chicas, solo es cuestión de traerlas aquí —dijo vianny parada en la puerta del laboratorio.

—Esta bien, yo te avisaré para cuando las voy a necesitar —le contesté sin dejar de hacer lo que hacía.

—¿No piensas descansar un poco?llevas días sin parar, todos estos días han sido agotador, no niego que han sido emocionantes, los robos y todas las fechorías que hemos venido haciendo desde hace días para poner esta guarida así como Está —dice vianny mientras entra al laboratorio—. Nos veíamos genial en esos tres lamborghini por las calles.

Vianny se acercaba a mi, pero yo no paraba de hacer lo que estaba haciendo, nisiquiera volteé a verla.

—Enserio tony, ¿no piensas tomar un descanso? —dijo vianny tocando mi hombro.

—¿Cansancio? ¿que es eso? —respondí sin voltear

—¡Tony! —dijo vianny riendo. - de verdad, ven descansa un poco, comemos algo y te doy un masaje.

—Vianny, estoy ocupado, si te sientes cansada ve y duermete, no dejaré de hacer esto hasta que termine, se te olvida que mi cuerpo no conoce el agotamiento.

—¡Uff! Que pesado —dijo vianny virando los ojos—. me iré a dormir entonces, Pasa buenas noches tony.

—Tu igual —respondí.

----------------lea más en el siguiente capítulo de... ¡cheater! :p-----------'''