Una ves en la puerta de la casa, bajo del auto, saco mi mochila y busco mis llaves del portón trasero, me gusta entrar por aquí porque mirándola desde afuera, la casa del personal parece un terreno aparte de la gran mansión que ocupa toda la manzana.Lo mejor de todo y que nadie sabe, es que es toda una sola casa, sólo que están separadas por un muro para que ellos tuvieran un espacio donde estar cuando están descansando y la puerta de acceso a mi casa no se ve porque este está todo cubierto por una hermosa enredadera que Thiago el jardinero se encarga de cuidar muy bien.
Si me viera mi padre me regañaría, pero lo que no entiende es que yo no soy el chico popular de la escuela como el, yo no corrí con su suerte, pero no me molesta en lo más mínimo, yo estoy conforme conmigo mismo.
Entro mientras sigo pensando en Lau, no pude hablar con ella después de lo sucedido con Car y estoy preocupado, no por Lau, sino por Car, sacudo mi cabeza para dejar de pensar un poco porque sino me va a estallar, una vez dentro voy a colocar la llave en el portón y alguien la empuja antes de que pueda hacerlo.
Qui.. quien eres?...- esta encapuchado y tiene un campera de lluvia que no me deja reconocer de quien se trata.
Camino hacia tras nervioso por si llega a ser uno de los estúpidos del Instituto o un ladrón y se saca la capucha, al ver quien es me quedo congelado, a la ultima persona que imagine que podría ser, esta aquí, parada frente a mi y debo admitir que me alegra verla.
Que.. que haces tu aquí?...-miro para todos lados no quiero que nadie la vea.
Mejor dime de que querías hablar conmigo?... no tengo toda la noche...- dice al ver que no hablo.
Se acerca unos pasos y yo me pongo nervioso como cada vez que lo hace, sonríe porque sabe lo que causa en mi y yo retrocedo unos pasos.
Que?...-trago con dificultad y estoy empezando a hiperventilarme.
- quería hablar contigo de Car....- el simple hecho de nombrarla izo que se le transformará la cara por completo.
Porque demonios tiene que estar ella siempre en medio? que fastidio....- camina de un lado al otro y yo no entiendo de que demonios habla.
De que estas hablando?.... - me mira pero no contesta, sigue caminando de un lado al otro mientras dice cosas que no entiendo por lo bajo, por mi lado sigo sin poder creer que este aquí y el estar hablando o discutiendo con ella como personas normales.
Porque la odias tanto?, que te hizo?...- no dice nada, sólo se para enfrente y me mira fijo, su mirada es intimidante, pero en mi no hace ese efecto.
Te gusta?...
Que???...
Pregunté si te gusta que la defiendes tanto?....
Doy un paso atrás mirándola confuso ya que no entiendo porque pregunta eso y puedo ver por su cara que no le está gustando nada que tarde en contestar, tiene los ojos entre cerrados, la mandíbula tensa y por más que este oscuro puedo ver qué está enojada.
Aprieta los ojos, baja la mirada y se da vuelta para irse, cosa que me sorprende, pero antes de que llegue al portón, la tomó del brazo sin hacer mucha presión y hago que se gire, no calculó la fuerza y esto hace que nuestro cuerpos queden pegados.
Por primera vez, puedo decir que esta nerviosa y me encanta saber que causo eso, sería genial poder revertir el juego y que ahora sea yo el que la vuelva loca a ella, pero eso sería imposible.
Me puedes decir porque actuaste de esa forma?.. - la agarro de los brazos.
- que haces aquí? porque me preguntas si me gusta? Y....
No te parece que son demasiadas preguntas juntas?...- se suelta de mi agarre y retrocede un paso hacia atrás.
Me vas a contestar?... me estás haciendo enojar....- me mira sorprendida por lo que acabo de decir y ríe como si hubiera contado un chiste.
- ríete todo lo que quieras porque a mi por mi parte no me gustaría que me conozcas enojado....- deja de reír.
Sentimos un trueno seguido de una gran lluvia, miro hacia el cielo, cierro los ojos y me quedo disfrutando del agua que golpea mi rostro, amo estar bajo la lluvia, por más loco que parezca, me relaja.
De pronto unas manos atrapan mi rostro haciéndome bajar la mirada y siento unos labios posarse sobre los míos, no me molesto en ver quien es porque se muy bien de quien son, reconozco esos labios sin necesidad de mirar a la dueña.
Le doy permiso encantado a su lengua y mis manos se posan en su cintura por primera vez, en un movimiento rápido la pegó más a mi cruzando mis brazos en lo bajo de su espalda, nuestro beso se vuelve más intenso y yo me siento en las nubes.
Mi corazón late tan fuerte que esta costándome respirar, con toda la bronca separo nuestras bocas, pero uno nuestras frentes dejando una mano donde estaba y la otra la llevo a su nuca, nunca estuvimos así y realmente era un sueño.
Se separa y nos quedamos mirando, sin decir nada, estábamos los dos igual de agitados, me vuelve a besar pero esta ves dándome un beso mas tierno y luego se separa, me mira hasta que rompe el silencio.
Nunca, pero nunca....-traga con dificultad.
- vuelvas a defender a esa idiota delante mío ¿ok?...- dicho esto me da un cachetazo pero no doloroso.
- la próxima ves la mato... ¿entendido?- asiento, me da un corto beso, se da media vuelta sobre sus talones y se dirige al portón.
Pero porque le tienes tanta bronca?..- pregunté antes de que salga, deja de caminar, me mira un momento y antes de salir me dice lo que ni en mis sueños se me ocurrió que podía llegar a escuchar.
Porque nadie se mete con lo que es mío....- dicho esto desaparece cerrando la puerta tras ella.
Me quedo dura en el patio bajo la lluvia tratando de asimilar lo que me acaba de decir y no lo creo, ni en mis mejores sueños creí que ella algún día podía llegar a estar aquí, así y ni hablemos de decirme eso, con una gran sonrisa miro al cielo, me quedo unos minutos así y luego me voy a la casa contento.