Al terminar la jornada de la escuela, regresé a mi casa sintiéndome una idiota. Necesitaba explicárselo a Nick de alguna forma. Cuando me cambié de ropa, vi que mis hermanas estaban profundamente dormidas. Mi madre entró a despedirse de las tres y luego se fue a dormir. Agarré el teléfono y llamé a Nick al ver que su habitación tenía la luz encendida. De nuevo ambos nos miramos por la ventana, sonrientes a causa del otro.
-Hola –Comenzó él-
-Hola… Sabes, hice algo muy estúpido hoy, yo… Perdóname –Le supliqué-
-¿Qué hiciste? –Preguntó preocupado, cambiando su tono de voz y su expresión facial-
-Me dejé llevar por mis sentimientos y accidentalmente dije que eras mi novio cuando me preguntaron sobre ti en la escuela- Reí tontamente-
-¿Por tus sentimientos? –Preguntó un tanto extrañado y feliz-
Mierda. Se me escapó. Inútil, Inútil, Inútil, Inútil, Dios, ¡Que hago!…
-Ah… Yo…-
Nick comenzó a reír tiernamente
-Diablos, no quise ponerte incómodo –No. No hay otra manera peor que decirle esto… Y aún peor si es por teléfono-
-No te preocupes, además… Necesito mostrarte algo mañana. Es importante, necesito que me acompañes-
-Está bien- Respondí animada-
De fondo del teléfono, se escuchó la voz de una pequeña niña. Era Melanie.
-¿Con quién hablas, hermana? –Dijo, soñolienta-
Me volteé hacía ella, pero luego miré a Nick otra vez
-Lo siento, me tengo que ir, adiós –No esperé ninguna respuesta y corté el teléfono-
Le lancé un beso al aire y él me lo respondió tiernamente. Nada me haría dormir mejor. Besé a Melanie en la frente y se durmió. Yo, en cambio, me quedé como una hora pensando en que sería la sorpresa que me tenía. Esperaba que fuese todo lo que yo quería que sucediera…
