Capitulo 11

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No he podido apartar mis ojos de él durante todo el concierto, y es inevitable no pensar en el día en que hicimos uno en el instituto sin ponerme nostálgica.

Ese fue nuestro último gran día...

Viktor está a mi lado sosteniendo mi mano mientras yo estoy recordando la manera en la que Castiel me besó aquel día ¿Eso está mal, no?

Suspiro frustrada y aparto mi mirada de Castiel por un segundo para darme cuenta que Debrah me mira fijamente, quedarnos en primera fila definitivamente no fue una buena idea pero Rosalya no había dejado de insistir y no me quedó más opción que quedarme en estos asientos.

Me mantuve atenta a sus movimientos, la manera en que sus manos se movían sobre su guitarra o como fruncía el ceño cada vez que trataba de concentrarse, su cabello cayendo sobre sus ojos; todas esas cosas, sus expresiones, sus gestos, estaba hipnotizada por cada cosa que él hacia y estaba comenzando a odiarme a mí misma por sentirme así.

―Sucrette... ―susurró Viktor en mi oído y salí de mi trance para mirarlo―. Saldré un rato ¿Si? ―apuntó a su celular y yo asentí, lo vi caminando entre la gente y luego volví mi atención a Castiel otra vez.

Sus ojos, aquellos ojos grises que siempre me encantaron, estaban ahora mirándome fijamente y me di cuenta de que estaba cantando. Palabras, que no lograban tener un significado claro para mí, salían de su boca como una armoniosa melodía.

Nunca lo escuché cantar antes, siempre se mantenía tatareando en voz baja pero esto era distinto.

―¡Oh Dios! ―Rosalya exclamaba a mi lado afirmándome fuertemente del brazo. 

―¡Auch! ―me aparté y la miré, estaba mirando hacia el escenario con la boca entreabierta―. ¿Que te pasa?

―¿No estas escuchando? Sucrette, si Castiel no está cantando esa canción para ti entonces no sé que pretende...

Empece a escucharlo con atención, las palabras que salían de su boca de pronto comentaron a tener sentido. Y Rosalya tenía razón, o quizá era solo nuestra imaginación pero en medio de la canción varias veces me tope con su mirada y todo esto me revolvía la cabeza. 

¿Que pretendía? 

¿Acaso pensaba que cantándome una canción en un escenario yo podría olvidar lo que hizo? Rosa parecía emocionada pero yo no podía hacer más que indignarme al escuchar cada verso.

Las cosas no se arreglaban así, no eran tan simples. O tal vez yo estaba exagerando y cada verso de la canción no era más que una coincidencia.

Al terminar la canción Lysandro apareció en el escenario, al parecer habían planeado algo juntos, Lys tomo el micrófono y Castiel su guitarra mientras los demás miembros y Debrah salían del escenario dejándolos solo a ellos dos. Como en los viejos tiempos, pensé. 

Mientras ambos cantaban mi mente seguía en la canción de Castiel, mi sangre hervía y tuve otra vez esa sensación,  de querer huir de él desesperadamente pero sintiendo la necesidad de aferrarme a él también.

El ambiente era muy bueno, sin tomar en cuenta como me estaba sintiendo yo en ese momento, la gente a mi alrededor parecía estar disfrutando en gran manera el concierto, la banda tocaba algunas canciones conocidas y otras de su propia autoria mientras el resto de chicos gritaba al son de estas, algunos bebían mientras disfrutaban del concierto. 

La banda de Debrah no era realmente muy conocida, no eran famosos, no andaban firmando autógrafos en las calles pero tenían lo suyo, eran reconocidos entre las personas de nuestras edad y lugar, tenían chicos guapos y también tenían algunos montones de fans, es decir que Castiel tenía chicas que estaban gritando por él justo detrás de mí, me gustaría saber que pensaba él sobre esto.

Me sentía nostálgica así que decidí salir del lugar, habían preparado un escenario muy bonito al aire libre, todo estaba rodeado de puestos de comida y juegos, la universidad celebraba en grande su aniversario.  

A medida que me iba alejando el ruido del concierto iba desapareciendo, el cielo estaba empezando a oscurecer pero el lugar aún se veía claro por toda la iluminación, caminé lo más que pude, queriendo escapar de algo que estaba en mi misma.

Llegué hasta un pequeño parque que estaba dentro del campus, estaba vació pues todos estaban en el concierto, me senté en una banca donde la luz no llegaba y saqué mi móvil, suspiré sin tener idea de que hacer, seguramente Viktor estaría buscándome. Me desplacé por la lista de contactos y vi su numero... "Castiel"  alguna vez su nombre estuvo agendado con un corazón a su lado.

Un día hubo algo ¿Dónde estaba todo eso? Todos tienen una mala historia de amor, un amor defectuoso que siempre termina mal, un amor que duele y te lastima y te marca, un amor que realmente nunca fue amor, todos tienen esa historia ¿Acaso Castiel era ese amor? ¿Él era mi malograda historia de amor? 

Mientras miraba la pantalla perdida en esos pensamientos llegó un mensaje de Kentin.

Kentin: Te veré este fin de semana ¿No? 

Sucrette: ¿De que hablas?

Kentin: Lo junta, Su. Dijiste que vendrías...

La junta, claro...la junta. Lo había olvidado por completo. ¿Estaba preparada para verlos a todos otra vez? ¿Seguirían pensando que yo fui la mala del cuento? 

―¡Sucrette! ―Un grito me asustó.

Era Viktor, se acercó sonriendo y se sentó a mi lado, escribí una rápida respuesta para Kentin diciéndole que iría y  guarde el móvil poniendo mi atención en Viktor. 

―Volví y no te encontré ¿Qué pasó? 

―Necesitaba un poco de aire ―dije sonriendo levemente.

―Estábamos en el aire libre Sucrette ―rió pasando una mano por mi cabello.

―Ah, bueno ―sonreí con un poco de más ganas y me encogí de hombros―. Solo quería alejarme del ruido...

―Te ves un poco perturbada ¿Hay algo mal? Puedes decirme lo que sea...lo sabes.

Viktor era el chico perfecto, era amable, educado, siempre estaba dispuesto a hacer todo por mí, siempre estaba protegiéndome, era casi como mi super heroe personal, era terco pero también era justo. Me respetaba y nunca me presionaba, me cuidaba y era divertido, con él mi corazón no se rompía porque siempre estaba curando mis heridas.

Viktor era el antónimo de Castiel. En todo sentido.

Se acercó a mi rostro y con su mano puso un mecho de pelo detrás de mi oreja, sus labios estaban cerca y su perfume llenaba mis sentidos, su toqué era cálido y todo parecía tan correcto. 

El sonido de mi celular interrumpió y "Mamá" apareció en la pantalla, era raro, hace varias semanas que no me llamaban. 

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¡Hola! He estado muy ocupada y no había tenido tiempo ni para escribir, si el capitulo esta algo raro es por eso, ya la próxima semana seguiré subiendo regularmente. Quería preguntarles ¿Que les gustaría que pasara? ¿Que no les gusta?  ¿Que debería cambiar ya sea en mi forma de escribir o en la historia? Espero sus comentarios y sugerencias, por favor y ¡Muchas gracias por leer! <3

PD: La canción de arriba se supone que es la que cantó Castiel en el concierto. 

Corazón de melón: La sombra del pasado [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora