Capítulo 16

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Capítulo 16.

"Creo que la prueba de amor más grande es dejar que la persona amas sea feliz con alguien más"

Estoy completamente excitada en ese momento. Hoy es el día que mi papá recibirá su implante.

Ha pasado un mes desde que los chicos partieron a su misión.

Estoy sentada en la cama de hospital junto a mi papá con Jackson en el otro lado de la cama y Georgia está en el sillón de la habitación.

-No sexo loco, no cerveza, no mucho sodio, no refrescos. Esto va a ser una mierda –se queja mi papá colocando su mano sobre mi pequeña pancita de cuatro meses. Es tan adorable. Como una pelota de basquetbol por la mitad.

-Que vivas más tiempo no será tanta mierda. –contesta mi hermano.

Mi prima entra con su madre y con Rony a la habitación. Entonces pasa mi tío sentado en la camilla con un gorro azul y bata del mismo color.

-Me prometieron drogas después de esto –comenta mientras es llevado al quirófano.

Nos reímos y Rony corre a escalar la cama y sentarse entre las piernas de mi padre.

Después de algunos minutos también vienen por mi padre para prepararlo y sinceramente todos estamos nerviosos, pero sonreímos para no preocupar a nadie. Salgo del cuarto para ir a la cafetería cuando mi teléfono suena.

-¿Diga?

-Debo decir que me sorprende que contestaras. –la profunda voz hace que me quede parada en medio del pasillo. Escucho a alguien quejarse así que me obligo a seguir y me siento en una de las mesas de la cafetería.

-¿Por qué no debería de hacerlo? No tenemos que terminar mal. –me defiendo.

-Me alegra escuchar eso. Pero dejaste muchas cosas tuyas aquí en mi departamento y quería saber si planeas venir por ellas.

La verdad ni siquiera se me había pasado por la cabeza.

-Bueno, supongo que iré a desalojar mi departamento y puedo pasar por ellas, pero realmente no tengo una fecha aún. Creo que hablare con mi hermano y mi padre para saber cuándo me pueden llevar. Es un viaje de un día y medio sin parar y como están las cosas ahora no estoy segura, pero te enviare un mensaje cuando eso pase.

Lo escucho respirar con fuerza en el otro lado de la línea.

-Señorita, debe ordenar algo o si no dejar la mesa libre, por favor. –me pide una mesera.

-Sí, claro, quiero un sándwich de pavo. Y té frío.

La mesera se va apuntando en su libreta con rapidez.

-¿Te mudas a Virginia? ¿Por nosotros? Eso es exagerado.

-No es por nosotros. –pongo los ojos en blanco aunque no pueda verme. –Pero ahora mi vida está aquí. Es más complicado de lo  podrías creer.

-Bueno no soy yo eres tu –argumenta mientras lo escucho abrir la regadera.

-Creo que es mejor si te cuelgo ahora. Parece que vas a entrar en la ducha.

Lo escucho reír un poco.

-Sí, los chicos me llevara a un bar.

-¿Sabes que lo más probable es que te lleven a un club de desnudistas?

Se ríe y yo también. Mi té es puesto delante de mí y le asiento a la mesera.

-¿Celosa?

Me vuelvo a reír. Está vez un poco más fuerte.

Hell's AngellsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora