Hell's Angells

Capítulo 13

Capítulo 13

                  

"A veces no podemos ver que lo mejor que nos ha pasado está ahí, delante de nosotros." –Donde termina el arcoíris.

Boom. Boom. Es rítmico y frenético. La pantalla esta por completo en negro pero un punto blanco se distingue moviéndose frenéticamente. Es el corazón de mi bebé.

-Está muy sano. –dice la doctora apuntando al punto frenético de la pantalla. John aprieta mi mano. –Y cómo te dijo el anterior doctor dijo tienes 12 semanas. Oficialmente has pasado el primer trimestre y los riesgos comunes. Dejare que te vistas y después pasas a la oficina.

Me pongo mis bragas y pantalones cortos junto a mi tenis. John solo está ahí mirándome. Saliendo de aquí iremos a la antigua casa de mi padre para ver que necesitamos para que sea completamente habitable. Nos sentamos en las sillas que están del lado contrario en el escritorio. Está escribiendo en lo que parece ser unas recetas.

-Debes tomar una de estas por día. Son vitaminas y calcio. Las vas a necesitar. Ahora, vamos a hablar de cosas prohibidas. No montar moto o caballo. No drogas ya sean legales o no y eso incluye el café. No impresiones fuertes.

-¿Por qué me dice todo eso? –cuestiono soltando la mano de John y colocándolas en mi vientre.

-Bueno, tienes un problema y es que podrías entrar en labor de parto prematuro. No requieres reposo absoluto, pero sí que hagas caso en lo que acabo de decirte. –Mira a John-. Señor Rilan, ¿lo molesto si nos espera un segundo afuera?

John me mira y asiento. La puerta se cierra detrás de él.

-¿Qué método anticonceptivo utilizabas antes de quedar embarazada?

-Ninguno. Mi ginecólogo de cabecera me dijo que era poco probable el tener hijos.

Asiente apuntando algo en sus papeles.

-¿A qué edad comenzaste con tu vida sexual?

-A los quince.

-¿Cuántas parejas sexuales has tenido desde entonces?

-Tres.

No entiendo a dónde quiere llegar con todo esto. Parece absurdo.

-Bueno, no sé por qué no podrías tener hijos. Es cierto lo que dijo tu doctor. Y ahora se ve que será un embarazo difícil.

-¿Por qué? –pregunto preocupada.

-Bueno, tu útero no es del tamaño adecuado, por eso no quiero que tengas estrés o tristeza o enojo. Tus pechos son muy pequeños y no crecerán lo suficiente para que amamantes a un bebé. Te suplico que sigas mis instrucciones al pie de la letra. No esfuerzos o emociones innecesarias. No montar motos. Come saludable y tomate tus píldoras.

(...)

Amo esta clase de días. John y yo estamos acurrucados en el sillón de la casa club mientras él bebe una cerveza y vemos futbol americano. Al parecer la casa de mi padre necesita una pintura nueva y todos los muebles.

Le di una lista a John y ya tiene a los prospectos ocupándose sobre eso. También tiene al abogado del club, Cock, trabajando sobre integrar de nuevo a la escuela a Deacon. Es bueno las cosas van bien y calmadas por una vez. Cock se deja caer con pesadez a mi lado suspirando mientras abre una cerveza.

De pronto sus brazos me arrastran y entierra su cara en mi hombro. Lo siento temblar.

-Perdón, John, pero tu chica es como...