23.

946 51 27
                                        

                _____.              

Virginia me había llamado para que me pasara por su casa en cuanto pudiera. Estaba realmente cansada, sentía una gran presión sobre mis hombros y mi cabeza daba vueltas. Al fin Zac había resuelto todo y se había tomado una semana para desconectar del mundo. El juicio había sido un caos y se hizo eterno esperar para saber el veredicto. Para colmo después me sale Niall con dejar a Jade trabajar en su disco, ¿acaso ese hombre nunca me escucha? Odio quedar siempre como la mala, casi siempre soy yo la que prohíbe cosas a los chicos. No hay un día en el que discutamos por alguna tontería y ese tema salga a flote. Se hace muy cansado que todo sea tan repetitivo, necesitamos salir de esta rutina o acabará por devorarnos a todos.

Nada más salir del estudio me dirigí a casa de los Styles. Harry me había contado que Connor se había peleado con James, algo que no me sorprendía lo más mínimo. Desde el primer momento que estuve junto a ambos en una habitación me dí cuenta que no se iban a llevar muy bien. Quiero pensar que no se pelearon por Jade pero mi instinto de madre me dice que sí fue por ella. Tendré que hablar con ella tarde o temprano.

-Hola, _____.-me sonrió Connor al abrirme la puerta.

-Pequeño C.-dije yo y le abrace. 

Connor podría crecer, podría odiarme o ni siquiera hablarme, pero yo siempre lo veré como a un hijo más. Si algo le pasaba a él o a alguno de mis hijos, enloquecería. De pequeños, Matt y Connor decidieron que era buena idea salir con las bicicletas sin decírselo a nadie. Ellos eran inocentes y no sabían lo que podrían esperarse pero al llegar a la calle los fotógrafos y las fans los persiguieron. Creo que por querer huir de ellos, comenzaron a pedalear más rápido hasta que Connor se cayó y se dio un brazo. Ese día creo que casi me da un ataque al pensar que podría haberles pasado algo peor. 

-Mamá está en su habitación.

-¿Está Harry con ella? No quiero llevarme un susto.-dije pasando junto a él.

-Papá salió, no te encontraras con ninguna escena poco agradable.-dijo riéndose.

Me reí también y subí las escaleras. Connor se quedó abajo, supongo que viendo la tele o jugando a algún videojuego. La casa estaba en silencio y podía oír al fondo del pasillo a Virgi. No sé que estaba haciendo pero podía distinguir su voz.

-Claro, mañana mismo te llamo y te digo si tengo un hueco para la cita.-dijo ella con el teléfono entre su oreja y su hombro.

-Perfecto, lo tendré en cuenta. Buenas tardes.-dijo ella colgando.

Sonreí al verla en su modo más profesional. Desde hace varios años,precisamente desde que abrió su empresa, me ha encantado lo seria y responsable que se ve cuando se encarga de asuntos del trabajo. La admiraba mucho por ello, yo nunca he podido ser tan responsable como quisiera.

-A ti te estaba esperando.-dijo acercándose. Tiró de mí y cerró la puerta.

-Hola a ti también.-me reí.

-Tengo que contarte dos cosas.-dijo buscando en su bolso.

-No me digas que...-dije tapándome la boca.

-No, no es eso.-dijo riéndose.- ¿Acaso no sabes que no puedo volver a quedar embarazada?

Unos años después de nacer Matt y Jade, Vir y Harry quisieron volver a tener otro hijo. Lo intentaron de mil maneras diferentes pero nunca pudieron. Los médicos les dijeron que existía una infertilidad secundaria que no permitía a Virgi concebir otro hijo. Al principio quedaron un poco impactados por la noticia pero luego siguieron como si nada hubiese pasado. Tener a Connor ya era una gran alegría para ellos aunque no pudieran tener más.

Littles Horan (n.h.) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora