Alexander Amor Y Orgullo

Capítulo 22 verdades

Alex:

Me fui en mi motocicleta hasta la casa de Williams, mis manos sudaban y los nervios me estaban devorando.
Estaba sentado en el sofá esperando ver a William ¡a mi...padre! todo me parecía una locura, tenia en mis manos la carta de mi madre, pero las dudas de que todo fuera una mentira rondaba mi cabeza.

William apareció algo sorprendido por mi visita inesperada, note que sus ojos estaban hinchados.

-¡Alexander que sorpresa no te esperaba, pero debo decir que me alegro que estés aquí!- me dijo con un notable tono de voz nervioso.

-¡lo siento! Pero no podía esperar- le dije mientras miraba mis manos.

-¿Qué sucede?- me pregunto.

-¿William conoces a Vanesa Smith?- lo mire impaciente y la expresión de su rostro confirmaba mi pregunta.

-¡si! Ella y yo tuvimos una relación hace muchos años, ¡Alexander... no es casualidad que me preguntes esto!- me dijo serio mientras refregaba su rostro.

-¡No, No lo es!, yo acabo de enterarme de que esa mujer es mi madre, ¡claro que yo siempre creí que se llamaba Susan Adams!- le dije mirandolo a los ojos.

-¡Alexander yo acab.!- lo interrumpi

-¡lea esto por favor! Porque yo aun no puedo creer que sea cierto!- le entregue la carta de mi madre, tomó la carta con su pulso temblando y se sentó en el gran sofá para leerla. Al cabo de unos minutos me miró con sus ojos húmedos.

-¡es cierto! Yo acabo de enterarme, Contrate un detective para buscarte Alex, yo nunca supe de tu existencia hasta que mi madre tu abuela me lo confesó antes de morir- ¡era verdad! William es mi padre, me sentía mareado y perdido, tantos años sufriendo con el maldito que decía ser mi padre, un alcohólico que me obligaba a trabajar y maltrataba a mi madre. Ella  me había negado mi identidad por miedo pero a la vez me obligó a vivir un infierno.

William me mostró el informe del detective se sentía feliz por haber encontrado a su hijo y que ese hijo fuera yo era un sueño según el. 

-¡estoy feliz de haberte encontrado!-me dijo dándome un abrazo, no pude evitar que lágrimas se escaparan de mis ojos, el ciertamente se había portado como un padre conmigo, y ahora resultó serlo realmente.

-¡es como si la vida nos hubiera reunido!-

-¡solo espero que me permitas ser tu padre, que lo intentes!- me observaba expectante.

-¡siempre te quise como a un padre! Y ahora que se que lo eres comprendo porque teníamos esa conexión- le conteste pensando en eso. Desde que lo conocí sentí que era especial, tal vez por su forma de ser o por como me trataba, siempre desee haber tenido un padre como el y ahora era real.

Pasaron algunos días, Williams me contó como había conocido a mi madre, tenía un primo que pronto conocería y ademas el mismo detective se encargaría de buscar a mi hermana.

-¡quien diría que mi amigo terminaría siendo hijo de un rico!- me decia Tyler mientras comía un bocado de pizza.

-¡eso es lo de menos, realmente creí que todo sería más difícil pero William es un gran hombre!- le conteste para luego dar un trago a mi cerveza.

-¿tienes noticias de tu hermana?-

-no, aun no hay noticias, al parecer el convento sufrió un incendio y se perdieron muchos archivos- le conteste frustrado.

-¡la encontraras ya veras!-me dijo con una sonrisa de lado.

-¿sabes como esta?- sabía a que me refería.