A L I C I A
Me estaba viendo a mi misma de pequeña, unos 9 años habría de tener, estaba corriendo por todo el parque mientras que mi madre charlaba con otras mujeres.
En un momento choqué con un chico de unos 15 años y eso provoco que me cayera y me raspara la rodilla.
La perspectiva del sueño cambia y yo me encontraba con 9 años y estaba viendo fijamente al chico en frente mio. Tan frío con su mirada pero en un momento esa mirada cambia por una de ternura cuando se fija en mi rodilla lastimada. Yo no lloraba, no se porque, estaba sintiendo el ardor de la lastimadura pero no le tomaba importancia.
-Hey, nena, ¿que te paso en la rodilla?- me dice agachándose a mi altura, yo solo me encontraba mirándolo pero no le respondía.
Mi mente se concentró en las palabras que me habia dicho mi madre anteriormente
-Si un desconocido se te acerca, solo trata de buscarme con la mirada y no contestarle-
Hice eso pero no la encontraba, entonces traté de ir al arenero de nuevo pero el chico me agarra de mi brazo, no tan bruscamente como para lastimarme.
-Te pregunte algo, bonita- me regala una sonrisa no tan acogedora pero yo sigo sin responder, ahora su agarre es mas brusco.
-Me duele, señor, suélteme- digo zarandeando mi brazo para salir del agarre.
-¿Señor?¿Tan viejo me veo?- me dice tratando de parecer chistoso pero yo estaba tan asustada, que solo reí por compromiso.
-Tengo que buscar a mi mamá- murmuro mirando para todos lados.
-Te ayudo a buscarla- me afirma mas que preguntar.
-Yo puedo sola-
-Eso para una niña es muy peligroso, puede venir cualquier hombre malo y llevarte, mejor te acompaño lindura- y sin más, empezamos a buscar a mi mama. La encontré comprando unos helados, ella le agradeció al chico desconocido. Algo curioso de todo esto es que cuando él mencionó su nombre, yo no lo escuché.
El sueño paso a sentirse mas real, yo sentía que el sueño se repetía ya que todo sucedía en el mismo lugar y pasaba de la misma forma solo que ahora el chico no me saludaba, solo se quedaba a lo lejos observándome.
Las voces en mi sueño se empezaron a volver más fuertes y la imagen se hacia mas borrosa, hasta que por fin se volvió todo mas claro y reaccioné.
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Mafioso Posesivo
Teen FictionEl representaba solo una cosa: miedo. Generaba miedo a quien lo mirase y pobre del que lo hiciera. Sabia que tenia que alejarme, pero no podia. No por quererlo, él me encontraría si lo hacía. Y el castigo que me esperaba no seria muy placentero. So...