Mafioso Posesivo

13

A L E X A N D E R

Me encontraba agarrando la pálida mano de Ali, acariciándola como si fuera a romperse. A pesar de tener todo su cuerpo marcado, su piel seguía siendo como la porcelana.

¿Por qué no podían ser una pareja normal? ¿Porqué él no podía comportarse como un hombre normal? Se recriminaba una y otra vez.

Solté su mano cuando el doctor Anders entro a la habitación.

El doctor escribió un par de cosas en el cuadro de diagnósticos.

Una oleada de calor recorrio mi cuerpo de arriba hacia abajo cuando el doctor agarro con delicadeza el brazo de Ali, luego toco su frente y agarro su mano inspeccionandola.

Toci falsamente y él se giro a mirarme -No veo necesario que la toque tanto- lo miro serio y con la mandíbula tensa.

El alzó una ceja y me miro, como queriendo analizarme.

-Yo lo veo bastante necesario, si me disculpa, voy a seguir con mi trabajo- se dio media vuelta y siguio revisando a Alicia.

Es molesto ver a otro hombre (el cuál puede ser considerado atractivo desde el punto de vista femenino) tocar a tu mujer.

Tranquilizate Alexander, es cosa de trabajo, lo hace con muchas personas por día.

Ese puto pensamiento no me reconfortaba en lo absoluto, solo hacia que mi furia creciera.

Te enojas muy fácilmente... ¿Te diste cuenta? Por algo Alicia esta aca, como consecuencia de tu furia.

Muevo mi cabeza alejando esa voz o pensamiento que me dice puras estupideces.

Claro, y la casi muerte de tu "amada" es una estupidez.

Gruño y salgo de la habitación, después me iba a encargar de ese doctor. Con ese pensamiento me dirijo al café que hay en el hospital, luego de pedir lo mio, me siento en algún lugar vacío y me quedo mirando a algún punto fijo.

¿Que habria pasado si me presentaba como un chico normal?
¿Como hubiera sido mi relación con Ali después de eso?¿Y si ahora ella no estuviera aquí, sino mas bien, conmigo, disfrutando de algún placer de la vida?

Saco mi cajetilla de Marlboro de mi pantalón, pero la dejo en su lugar cuando veo el cartel de "prohibido fumar".

Me levanto de mi lugar dejando algo se propina y salgo de aquel hospital dirigiéndome al parque mas cercano.

Allí saque mis cigarrillos y comencé a fumar. Vi pasar a miles de personas, pero me llamaba la atención una pareja con un niño, de una manera, ellos me hacían acordar a Alicia y a mí.

¿Que pasaría si ella estuviera casada conmigo? ¿Le gustaría formar una familia?

Si tan solo todo fuera en otras circunstancias.

Uno de mis deseos mas locos fue aspirar a formar una familia, y cuando la vi por primera vez a Alicia, supe que ella sería mi compañera de vida.

Tan dulce, cariñosa... E inocente ante el ojo ajeno.
Desde el primer momento también supe que no tenía que fijarme en ella, ya que sabía que no tenía derecho en arrastrarla a esta vida de mierdq que llevo.
Recuerdo haber dicho: al diablo el amor y al diablo con el diablo.

Pero acá estoy siendo esclavo de mis propias palabras.

Solté el humo y tire la colilla del cigarrillo para poder volver al hospital.

No tarde demaciado en llegar allí y dirigirme a la habitación de Ali.

Entré y la vi, tan pálida, ojerosa y delgada, todo gracias a mis putos tratos.
Iba a agarrar su mano cuando el doctor Anders entró a la habitación.

-Señor D'laurentis, no es muy buena noticia- mi cuerpo se puso alerta ante lo que venía.

-Lamento decirle que su novia callo en estado de coma, no esta en estado vegetativo...por el momento-

-¿Como que "por el momento"?- hice comillas entre las ultimas palabras, ya empezaba a alterarme -¿¡Esta queriendo decirme que mi novia va a volverse un puto vegetal?!¡¿Este es el único recuerdo que voy a tener de ella?! ¿¡La tengo que recordar como una chica que no cumplió todo lo que deseaba!? - el doctor me quedó mirando. -¡Contesteme!.

-Calmese, primero, segundo, no es seguro de que su novia caiga en estado vegetal, solo quería aportarle ese dato y tercero, ella si sigue asi, no va a necesitar un respirador, progresa rapido a pesar de estar en coma- de alguna manera, eso me calmo y trate de relajarme.

-De acuerdo- asentí.

Anders estaba por retirarse cuando se gira a verme.

-Otra cosa señor, esto tomelo con calma- ¿ahora que desgracia vendría?.

-Suelte todo de una maldita vez-

-El feto no resistió el accidente que tuvo la señorita, de verdad lo siento Alexander- sin más, se retiró.

Quedé en shock.

Feto, un hijo.
Ella estaba embarazada y no me lo dijo.
No cuidó a mi hijo.

De igual manera si ella te hubiera dicho, la habrías obligado a abortarlo, o la habrias golpeado hasta que ella abortara involuntariamente.

Esa lejana voz estaba en lo cierto, pero no crei que reaccionaría de esta manera ante semejante pérdida.
Me acerque a el inerte cuerpo de mi novia y agarré su mano.

-Un hijo- la mire triste -Ibamos a tener un hijo, amor- una lágrima calló -Lo maté- solte un hipo cuando trate de contener mis lágrimas, mi cuerpo empezó a convulsionar debido a mis ganas de llorar, no lo haría.

Hace años no lloraba, y no iba a hacerlo ahora.

-Un hijo, ¿lo podrías creer? Sabes, siempre quise un hijo, pero se ve que no iba a ser bueno traerlo a este mundo, y menos en la forma en la que te trataba- entrelace sus dedos con los míos y besé su mano. -¿No te gustaría que todo sea diferente? Porque a mí sí.

La seguí mirando, nunca me iba a cansar de su cara y sus razgos, nunca me cansaría.

Instagram: gisesummer
Twitter: GWeeklychris
Snapchat: giseos