Creepypastas

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Ya estaba saliendo el sol, lo que indicaba que ya era un nuevo día, lo que también indicaba que conocería a los demás.

Aún sigo preguntándome cómo serán, porque Slenderman dijo que iba a enloquecer... Pero tan raros no serán ¿No?

Me quedé pensando en cosas triviales hasta que llamaron a la puerta de mi supuesto cuarto.

-Pasa -Ordené.

Se abrió la puerta y pude observar a ese tal Slenderman entrando a éste.

-Te he traído el desayuno, toma -Me acercó la bandeja.

-Muchas gracias -Agradecí.

-No es nada.

De repente me acordé de los demás.

-¡Ah! Slender -Lo llamé.

-¿Slender? -Se extrañó.

-Lo siento... Slenderman... ¿Cuándo conoceré a los demás? -Pregunté.

-Después -Respondió.

-¿Por qué no puedo ahora?

-Están durmiendo -Respondió y abrió la puerta para irse.

¿Otra vez me va a dejar sola?

-¡Espera! -Grité y Slenderman se giró.

-¿Pasa algo? -Preguntó.

-Eh... ¿Te puedes quedar aquí conmigo mientras desayuno? -Slenderman me miró sin comprender -E-es que... Me siento rara aquí sola en esta... Dimensión y... Tú eres la única persona que conozco... Entones...-Slenderman me interrumpió.

-No hace falta que te expliques -Dicho esto se sentó al lado mío.

Me puse un poco nerviosa, jamás había estado con alguien en un mismo cuarto y menos, en una misma cama... Por no decir que nunca he tenido novio en mi vida, sí, es raro que una persona ya con veinte años no haya tenido nunca una relación pero yo nunca tuve tiempo para eso y tampoco me había importado.

-Gracias -Agradecí, sin embargo él no dijo nada.

Como el ambiente se hizo algo tenso, al menos para mí, propuse empezar una conversación.

-Slenderman -Lo llamé y giró su cabeza hacia mí -¿Cómo puedo saber si estás triste, enfadado o feliz...? -No sé si le habré ofendido con esa pregunta pero realmente tenía mucha curiosidad.

-Eso son sentimientos, así que si quiero que alguien lo vea, lo hará. Pero si estoy triste, alegre o de cualquier forma en el momento que no quiero que nadie lo sepa, no lo sabrán -Explicó.

-Hmm... Interesante. ¿Hay algo más que puedas hacer, fuera de lo normal? -Pregunté.

De momento el cuarto se volvió más oscuro, tenebroso y Slenderman me dio más miedo de lo normal.

-También puedo hacer que las personas tengan más miedo del que puedan tener hacía mí -Dijo con un tono tétrico y empecé a temblar. De un momento a otro esa sensación se fue y todo volvió a la normalidad pero yo aún temblaba -Y también puedo hacer que escuches estática, dar dolores de cabeza y vómito, pero obviamente no te lo voy a enseñar -Añadió.

Él se rió pero yo no le veía la gracia.

-¿Y por qué haces eso? -Pregunté.

-Aún no te lo puedo decir -Me miró serio, al menos podía sentir que él estaba serio.

-Bueno... -Dije simplemente.

Se escucharon ruidos fuera.

-¿Has terminado de desayunar? -Preguntó y yo asentí -Pues levántate, es hora de que conozcas a los demás. ¡Bien! ¡Por fín los conoceré! -Por cierto ¿Cuál es tu nombre?

Es verdad, no le dije mi nombre.

-Me llamo Katherin pero me puedes llamar Kat -Expliqué, Slenderman asintió.

-Sígueme -Me ordenó.

Le seguí hasta la puerta y pasamos por un pasillo y llegamos a lo que supuse que era el salón.

-¡Escuchad todos! -Gritó Slenderman haciendo que todos dejaran de hacer lo que estaban haciendo y prestaron atención a este ser -Tenemos a una nueva compañera, se llama Katherin -Saludé con la mano -Ella viene de la otra dimensión pero aún no se sabe cómo entró, por eso se tiene que quedar aquí unos días, respetadla -Dicho esto me fijé en cada uno ¡Eran muy raros! Algunos más que otros.

Se acercó un chico bajito, rubio y de ojos color rojo y se presentó -¡Hola Katherin! Me llamo Ben, ¿Te gustan los videojuegos?

-Pues, la verdad es que solo jugué de pequeña... -No sabía que decir.

-¿Qué clase de pregunta es esa, Ben? No le hagas caso, yo soy Nina, Nina the Killer, él -Apuntó a un chico de tez blanca, cabello negro, sin párpados y la boca con cortes haciendo una sonrisa -Es Jeff the Killer y ella -Apuntó a una chica con una careta blanca con cabello negro y largo -Es Jane The Killer, aquél de la máscara azúl es Eyeless Jack, ese chico sin brazos es Lost Silver...

Así se llevó presentándome a todos hasta terminar con los proxys

La verdad es que eran muy graciosos aunque al principio me daban un poco de miedo. En este momento estaba hablando con Niña y con ClockWork sobre todo lo que debía saber.

-Y bueno, a mí me gusta Jeff y a ella -Nina señaló a ClokWork -Le gusta Ticci-Toby.

-¿¡Qué dices!? -Gritó la mencionada poniéndose colorada.

-Ah, digo la verdad, mira te has puesto ruborizada y todo -Dijo Nina.

Yo me reí.

De un momento a otro Slenderman apareció como por arte de magia en el salón y todos les prestaron atención

-Ya pronto va a ser la hora de almorzar ¿Quién se ocupaba hoy de hacer la comida? -Preguntó Slenderman.

Masky y Hoodie levantaron la mano.

Todos bufaron.

-¡Se les va a quemar, como siempre! -Se quejó la pequeña Sally y todos comenzaron a reír.

-Pues que les ayude alguien -Sugirió Slenderman.

Nadie se ofreció voluntario así que propuse ayudarlos yo.

☆☆☆☆☆

Subo capítulo cada dos días

Another Way 『Slenderman』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora