24

3 0 0
                                    

Relationships


-Sam, te hechaba de menos-. Sonrío feliz, hasta el punto de achinar mis ojos. Él ríe.

- Yo también pequeña-. Despeina mi cabello y toma un sorbo de su soda.

Sam era mi confidente.

Era esa persona que si bien nunca hablábamos por redes sociales, uno que otro saludo, likes o insignificantes pero nos guardamos todo aquello para cuando nos veríamos soltarlo todo, buscar desahogo y respuestas, tanto como para él como para mi.

Son de esas personas que sabes que si un día estas en completa soledad, sabes que él estaría y seria imposible discutir.

Estuvimos toda la tarde conversando sobre su vida en este tiempo, mientras nos meciamos sentados sobre un mismo columpio de esos largos donde puedes recostarte o simplemente sentarte mientras te la pasas en relajación. Como en nuestro caso la última opción.

- Entonces, ¿Qué hay de tu vida?-. Ladea su cabeza. Tomo un respiro y observo hacia el frente, al cerco del jardin.

- Mi familia siempre de viaje, por el trabajo, mientras yo acumulo títulos que beneficien y refuercen la carrera familiar-. Río y él igual. - Tengo que dar la imagen de una joven virtuosa, para un futuro y en lo actual de sus campañas electorales, ya sabes.- Doy un chasquido con mi boca y hago una pausa. - Terminé mi curso de cocina, guitarra y lenguaje de señas-. Enmarqué una ceja orgullosa. Sam niega divertido.

-¿ Y eso a qué ayuda en tu título y carrera familiar?-. Hace una mueca. Elevo una mano como si la respuesta fuera obvia.

- A nivel territorial-. Respondo. - Con mis dotes ahora incorporados puedo servir en tareas comunitarias como para niños, pobres, ancianos o gente con capacidades diferentes-. Sinceramente aquello era lindo. Crucé mis piernas y abrace una de mis rodillas de manera sofisticada. - Además, en un futuro pueden asignarme en un puesto de cultura a nivel alcaldía, es decir, de la ciudad o comuna, o tal vez en un evento ser jurado de...-. Comencé a expandir mi respuesta y Sam cada vez entendía menos y se horrorizaba.

- Callate por favor. A caso, ¿Tienes ochenta o 16?-. Bufa divertido. Me encogo de hombros. - Me perdí a la mitad y no entendi. Lo importante es que sumas títulos, Felicidades -. Se ataja con ambas manos.

- Perdón y gracias-. Carcajeo.

- ¿Los sigues extrañando de todas formas?-. Su cara transmitía algo de pena. Ladeo la cabeza algo confundida. - Tus padres-. Se explica.

- Oh-. Asiento para darle a entender que sí comprendí. - Si, desde siempre. Pero ahora que estoy creciendo creo que gracias a su ausencia yo pude aprender y tener libertades que otros chicos no, mas madurez supongo-. Me encogo de hombros. Gime exasperado.

- Eres tan profunda que siento el lava del nucleo de la tierra-. Pincha mi ojo.

Molesto.

- Tonto-. Achino mis ojos. - Mis amigos tuvieron un accidente, varios mal, pero gracias a Dios fuera de peligro, fue confirmado hoy. Corté con Manuel, y hace una semana ingerí un medicamento con alcohol, enloquecí y tuve que retomar con el psicólogo-. Agranda sus ojos mientras explico. - De todas formas, nada grave. Siento que hasta ahora las cosas estan, quietas-. Muerdo de lado mi mejilla del lado interno. Suspira.

- Tienes una vida cotidiana tan normal-. Usa su sarcasmo tan... Sam. Me encogo de hombros.

- Fuera de tema pero necesito que me ayudes-. Hago pucheros. - Tú eras el que me ayudaba con mis problemas amorosos-. Enmarco una ceja. Lanza la lata lejos y recobra postura de seriedad. Trato de no reír. - Creo que me atrae Ashton-. Siento el calor subir a mis mejillas. Su rostro muestra emoción y luego neutralidad.

- Pero quiero que estés con Luke-. Bufa. Golpeo mi frente cansada. - Siempre que te ayudé, terminé haciendo que te unas con Luke-. Usa un tono inocente.

- ¿Entonces tu idea era unirá ambos? -. Río ante la idea y me acomodo en postura. Sam observa algún punto desconocido del jardín de la casa Hemmings y ríe negando con señas de su cabeza.

- Éramos tan sólo niños, no sabía que Luke era tu mejor amigo y que él tuviera novia-. Se defiende. - Aún sigo creyendo que no quedarían mal juntos, pero sé que Aleisha es el amor de su vida -. Sonríe con melancolía. Yo asiento y miro mis manos con poca gracia.

Me sentí algo disgustada. No sé el porqué.

Sus rastros faciales demuestran algo de sorpresa y algo divertido.

- Lo siento. Es que estamos peleando mucho con Luke últimamente y siento una batalla interna-. Arrugo la nariz. - Lo de Manuel aún siento que es muy reciente, pero Ashton llegó y en tres semanas me demostró una personalidad que... -. Hago una pausa tratando de buscar las palabras. - Es tan diferente a los otros chicos que me atraían o quería -. Me encogo de hombros. - Me deja tonta-. Sonrío. Me hecha una mirada de ternura. - El problema es que nunca sé cómo enfrentar chicos, de forma atractiva, siempre termino en la zona de amigos-. Me quejo y suelta una carcajada.

- ¿Como Luke?-. Se divierte con la pregunta y fue picante. Abro mi boca ofendida.

- Cuando conocí a Luke lo odié, y terminamos siendo amigos de casualidad -. Me defiendo. Sonríe de lado.

- Es decir, que admites tu zona de amigos en la que estas ahora -. Ríe de forma malvada. - Tal vez antes no pero ahora sientes cosas-. Se cruza de brazos como si fuera el ganador. Ruedo los ojos.

- Ni siquiera estamos en la zona de amigos -. Me quejo. Su semblante resalta su confusión. - No me llama, no contesta mis mensajes, me ignora y trata de que su relación con Aleisha funcione, y no le soy de ayuda-. Corro mi cabello a un lado.

- ¿Y no te preguntaste el por qué a caso?-. Sentencia.

- ¿Qué insinúas?-. Me cruzo de brazos.

(...)

- Chicos-. Grita Sam con una sonrisa enorme. - Con Clar tenemos una fiesta, se vienen sí o sí -. Levanta los brazos en forma de baile. Yo carcajeo. Todos se dan la vuelta y nos observan divertidos.

- Sam ya se iba-. Muerdo mi labio inferior divertida y ruedo los ojos, negando con mi cabeza.
Los chicos saludan con exclamaciones y yo lo acompaño a la puerta.

- Recuerda el plan-. Me apunta con su dedo. - En la fiesta todo puede pasar, con Ashton, Luke o quién sabe-. Su voz se torna aguda como niña. Yo lo empujo para que se vaya mas rápido, de forma divertida.

- O quizás besar a un chico cualquiera con cara linda y acento londinense -. Cierro la puerta en su cara.

Que el plan comience.

.
.
.
.

FriendsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora