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Now, yes.


Por la mañana me levanté y llené los papeles que se debían para ingresar al colegio, estaba decidida que mañana empezaría sin falta, aunque no muero de ganas.

Estaba animada sin embargo, una nota en mi cama me alegró bastante el día.


"Problemas familiares, solucionado. Hablar con amigos, hecho. Planilla de ingreso, estoy seguro que hecho. Estudiar, 2 PM, por hacer. Así que voy a estar puntual y como alumno superior, repasas conmigo.
El lindo Ash."

Según mis cálculos, y la carta, ya eran las dos, y no me sorprende estar en la cocina y que llegue Ashton pronto, sorprendiendo todo y asustando mí ser.

Pero mientras tanto, estoy preparando algunos snacks dulces para comer mientras estudiamos.

Estaba pensando en algunas frutas picadas en cuadrados pequeños, porque todos amamos la fruta en miniatura.

Tal vez algunas galletas o licuado, pero quería algo rápido y que no me mate debido al calor del clima australiano.

La fruta picada era una buena elección, así que tome algunas y comencé a cortar.

- Que hay-. Escucho que exclamar a mis espaldas. Grité agudo, tal y como la niña que soy. Él suelta una larga risa.

- Sabía que vendrías, ¿por qué me gasto en asustarme?-. Bufo y suelto una risa algo atontada. Rueda los ojos y se acerca a mí. - Preparo fruta picadita-. Me explico y sonrío dulce. Sus pocitos se marcan en sus mejillas.

- Adoro la fruta picadita-. Acerca su mano a uno de los tazones y roba un cuadrado de manzana. Yo me quejo y él ríe.

- ¿Estudiamos?-. Pregunta finalmente y yo asiento tomando los dos recipientes para caminar, pero luego recuerdo que faltan las bebidas y los dejo a un lado.

- ¿Me ayudas a cargar los vasos?-. Pregunto abriendo la puerta del refrigerador. Asiente. - ¿Qué vas a querer tomar?-. Le pregunto amable. Lo piensa unos instantes.

- Agua-. Responde simple. Y reí para mis adentros. Me resultó gracioso pensar en nuestra conversación de doble sentido que tuvimos en la cocina aquella vez.
Me tomé el atrevimiento en contra de mis impulsos de soltar una leve risa y sonríe divertido.

- ¿Quieres agua de verdad o...?-. Bromeo extendiendo el agua hacia él. Se acerca y la toma dejándola a un lado.

- Quiero el agua de verdad y la metafórica-. Sus mejillas comienzan a enrojecer levemente.

El agua metáforica, era yo.

Quedamos algo cerca, no estábamos pegados, pero si con no mucha distancia. Podía sentir notoriamente el buen clima de atracción.

Ambos nos observamos, pero no decíamos nada, no sabíamos bien qué hacer ahora que ya estaba todo dicho, en el fondo sé que a ambos nos causaba gracia la situación.

- ¿Ahora es cuando Luke interrumpe?-. Pregunto por lo bajo. Reímos en sincronización, algo nerviosos a ser realistas y el finaliza mordiendo su labio inferior.
Con una sola mirada pudo hacer temblar mis piernas.
Era muy tierno hasta con esa expresión.

Su mano se estiró hacia mi rostro y lo observé con timidez, ambos nos acercamos unos pasos.

Íbamos hacia lo mismo,
Queríamos lo mismo,
Y nos daríamos el gusto.

Aún había espacio, pero la distancia no era tan grande como para no rozar nuestras narices. Me observo unos instantes donde no estábamos estudiando libros, pero él se encargó de estudiar mi rostro. Bajé mí mirada a sus labios, eran bellamente rosados y necesitaba tocarlos.
Creo que esa mirada, fue el paso que animó el curso de las cosas.

FriendsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora