Capítulo 16.

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Narra Yoongi:

Cuando Jungkook me preguntó aquello mi mente aún daba vueltas, y todo porque no conseguía aclararme con todo aquél tema. Si bien yo quería estar con Jungkook pero algo dentro de mí no parecía estar muy seguro de ello, aun así podía notar lo urgente que era para él mi respuesta y en un acto de impulsividad le respondí.

- ¿Y bien?

- Está bien.

- ¿El qué? -dijo él con los ojos abiertos mientras sacaba las manos que tenía metidas en los bolsillos.

- Volvamos.-aclaré.

¿Era lo correcto? ¿Realmente lo sentía? Lo dije de repente pero no muy convencido de ello por dentro.

- Gracias por darme otra oportunidad hyung. -dijo esbozando una amplia sonrisa.

- Si...

Pasé la tarde con Jungkook en un parque realmente precioso lleno de fuentes de aguas cristalinas y de flores de todos los colores y tipos. No lo había pasado mal pero noté que pese a lo juntos que íbamos, había entre nosotros una gran distancia que nos separaba.

Después me despedí de él con un beso y un sentimiento que jamás había experimentado me envolvió. Sentí una sensación que me oprimió el pecho cuando nuestros labios se juntaron haciendo que no pudiera disfrutar plenamente de aquél beso que simbolizaba el aprecio que ambos nos teníamos.

Me pasé la tarde metido en casa tirado en el sofá haciendo zapping. Estaba oscureciendo y decidí no quedarme allí apalancado cual mueble así que pensé que podría ser una buena idea el salir a dar una vuelta antes de que se hiciera de noche por completo. Salí y anduve por Seúl, aquella ciudad que cada vez me gustaba más.

Seguí andando y en pocos minutos llegué al rió Han, que aquella tarde se veía realmente bonito con todas las luces que alumbraban Seúl reflejadas sobre aquél manto azul tan calmado y relajante.

Me senté en un escalón de las gradas contemplando la hermosura del paisaje que se extendía ante mi, respiré hondo y después de varios minutos que se me hicieron eternos, me levanté y me encaminé hacia casa, un poco más despejado y ligero que antes.

***

Narra Jungkook:

Durante el tiempo que había pasado aquella tarde con hyung no pude evitar sentirme culpable por algo que no debería. En mi cabeza no hacía mas que formularse una pregunta y aparecer una persona que no dejaban que pudiera disfrutar de aquél rato que pasaba con mi persona favorita.

Taehyung. Taehyung era el que aparecía en mi cabeza. Sin cesar todas las imágenes de la noche anterior se agolpaban dentro de mi cabeza: él con el pijama alumbrado con aquella tenue luz, su rostro tan cerca del mío, sus labios casi rozándome. ¿Qué me estaba pasando?

Después de aquello, estuve pensando en las consecuencias que podían traer los hechos que hacia sin pensar como por ejemplo aquello, el haber ido allí sabiendo todo lo que Taehyung me hace sentir. Opté no decirle nada a hyung sobre lo que había sucedido, en esos momentos creí que era la mejor opción, por mucho que más tarde me equivocara. Acababa de arreglarlo con hyung y no quería que nuestra relación se volviera a ver amenazada por algo como era haber acudido a un amigo cuando me encontré mal.

Había dejado a Yoongi cerca de su casa hacía poco cuando minutos después recibí un mensaje de Taehyung.

Mensaje de Taehyung hyung:

Recibido hoy a las 20:21:
¡Hola Jungkook! ¿Cómo te encuentras hoy? Me dejaste muy preocupado ayer cuando te marchaste de aquella forma tan repentina de mi casa, espero que todo haya mejorado.

Algo en mi que desconocía provocó que esbozara una sonrisa al comprobar la importancia que tenía en su vida como para que se acordara y preocupara por mi, pero automáticamente volví en mi, era normal que lo hiciera, sobretodo, después de que yo hubiera ido hasta su casa a las tantas de la noche y que hubiera llorado sobre su hombro.

Enviado hoy a las 20:22:
Me encuentro muy bien, gracias por preocuparte.

No habían pasado más de cinco segundos cuando el móvil me volvió a sonar con un mensaje de Taehyung entrante.

Recibido hoy a las 20:22:
Eso está genial.

Por cierto, había pensado que podíamos ir a cenar algo cerca del río Han... ¿te apetecería?

No estaba seguro de si aceptar aquella propuesta fuera la opción más correcta en aquellos momentos. La oferta era muy tentadora pero me parecía demasiado arriesgado quedar ya que aún ni siquiera tenía claro los sentimientos que tenía hacia éste. Sentimientos... o bueno, lo que sentía cuando estaba cerca de él. Estuve unos minutos dudando pero finalmente acepté. Intentaría averiguar lo que sentía hoy y si realmente consideraba que podía amenazar a mi relación, entonces, dejaría de verlo.

Enviado hoy a las 20:30:
Me parece genial, ¿a las nueve y media allí te parece bien?

Recibido a las 20:31:
Perfecto, entonces a las nueve y media allí.
Por cierto, no te preocupes por nada, yo seré el que lleve algo de comer.

Enviado a las 20:31:
Está bien, allí nos vemos.

Dicho esto, bloqueé el móvil y retomé el camino a casa un poco más contento que antes.

***

A las nueve y media ya estaba llegando al río Han había salido de casa un poco antes ya que no quería llegar impuntual al encuentro. Antes de llegar, avisté de lejos una persona con una camiseta muy parecida a la que había llevado hyung esta tarde, dado que estaba oscuro no llegué a verla bien pero era muy parecida aunque cualquiera podía tener esa camiseta, al fin y al cabo, no era la única ni la última que la tienda habría vendido.

Desvié mi mirada hacia las gradas intentando encontrar a Taehyung sentado cerca de allí pero por mucho que forcé la vista, no logre distinguirlo por la poca luz que había. Iba a llamarle cuando él mágicamente se giró en mi dirección y al verme, esbozó una de esas sonrisas tan singulares suyas.

- ¡Hey! -saludé sentándome a su lado de cara al río.

- ¡Hola Jungkook! ¿Qué tal?

- Genial, ¿y tú?

- Muy bien, ¿tienes hambre? -preguntó al a vez que sacaba decenas de tuppers de bolsas.- no sabía lo que te gusta así que he comprado un poco de todo.

- No tenías porque... dime cuanto te debo esto es mucho...

- Calla y empieza a comer.

- Per...

- Shtttt... -me interrumpió a la vez que me pasaba unos palillos.

Me lo pasé muy bien con Taehyung hyung esa noche. Estuvimos comiendo lo que él trajo y sorprendentemente, nos acabamos todos lo que había comprado y además, charlamos y reímos juntos. Fue realmente agradable haber pasado aquella noche en su compañía.

Había conocido muchas cosas sobre él y había averiguado que teníamos muchas cosas en común que desconocía como por ejemplo el gusto por el canto. A ambos nos gustaba cantar y de hecho él tenía una voz preciosa que pude comprobar cuando conseguí que después de media hora suplicando y haciendo aegyo, accediera. También le gustaba mucho actuar y alardeó de ser un buen actor pero eso no lo había podido comprobar.

Cuando nos despedimos y empecé a caminar de regreso a casa, antes de que pudiera desaparecer por la esquina escuché a Taehyung gritando algo que hizo que esbozara una sonrisa y que hiciera a mi corazón hincharse de felicidad: "¡Gracias por haber venido Jungkookie!".

Algo tan insignificante pero que había hecho gran efecto en mi.

When your eyes meet mine. (Yoonmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora