CAPITULO 38 FINAL- Día en familia.

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Ya pasaron varios meses de haberme enterado de que esperaba un hijo de Levi. Los dos seguíamos contentos ante la noticia y no parábamos de pensar en nuestro futuro. Ya hemos decidido el nombre del bebé... Que por cierto, es niña asi que... se llamará Nicol, a Levi le gusta ese nombre así que no le veo el problema. Durante estas semanas, en las que cumplí nueve meses, las chicas del cuartel han tejido prendas para la niña. Algo realmente adorable. Sinceramente, cuando ordenaba su ropita me daban ganas de tener más niños y al azabache le pasaba lo mismo. Él podía esconder su felicidad bajo su rostro serio pero yo no. Todos los días me levantaba con una enorme sonrisa al recordar que ya había llegado a los nueve meses y faltaría muy poco para que Nicol pidiera salir.
Durante todo este tiempo, Levi ha asistido a muy pocas expediciones por mí. Digamos que de veinticinco salidas, estuvo en diez. Normalmente, mis antojos me hacen mal y él no quiere irse sabiendo lo mal que está su esposa. Me siento un ... estorbo aunque todos me dicen que no pero yo lo creo así porque, gracias a mí, no han avanzado NADA y eso es terrible ya que a ese paso no lograrán ningún objetivo.
Era un día normal, me encontraba ordenando por décima vez la ropita de Nicol, estaba sumamente emocionada por verla usar su ropita. De repente, empecé a sentirme mal, me sentí mareada, por lo que decidí sentarme a descansar un rato. Me recosté sobre la cama, y sin darme cuenta, empecé a sudar demasiado. Me percaté de eso porque sentí un cosquilleo por mi frente, a lo que llevé mi mano para inspeccionar la zona. Una gota fría de sudor, y un sólo movimiento, me di cuenta de que toda mi frente estaba estaba mojada por la transpiración. Me senté lo más rápido que pude e intenté ver o descifrar qué me sucedía. Unos dolores intensos, empezaron a atacarme. No tardé mucho en darme cuenta de que iba a tener a Nicol. Me paré apurada y, como pude, me dirigí hasta la oficina de Hanji. Tambaleante y con la ayuda de Christa, a quien la encontré en el camino, llegué al laboratorio de la chica con gafas. La rubia me avisó que estaba teniendo contracciones, lo que alarmó a Hanji y me hizo pasar rápidamente a su laboratorio. Unas de las chicas que estaban allí, me ayudaron a quitarme algo de ropa para dar a luz a mi hija. No tardó demasiado para que un Levi desesperado, entrara al laboratorio, buscándome con miedo. Al verme acostada, corrió hacia mí y me abrazó. Sentí como se relajó al verme bien, se había asustado, tanto que soltó algunas lágrimas. Sonreí al saber que se tranquilizó al verme bien, él realmente me amaba y moriría si algo me pasara.
Se separó y besó mi frente, para luego hacerlo con mis labios. Sin dudar, seguí su beso pero un gemido de dolor nos interrumpió. Atajé mi panza y volví a gemir. Levi se asustó tanto que le gritó a la pobre chica que estaba con nosotros.
-¡Mi esposa está sufriendo y la estúpida al mando de tu escuadrón no aparece! ¡Vé a buscarla, mocosa estúpida! -Le gritó. La pobre, asustada, asintió y salió corriendo del lugar, para ir tras Hanji.
- N-no debías tratarla así... -Formulé como pude. El me miró y frunció el ceño, para decir.
-¡Parecía idiota mirando como sufrías sin que ella haga algo! -Exclamó y tomó mi mano.
-Tranquilo, Levi... t-todo estará b-bien...-Traté de sonreír, pero me vi interrumpida por un maldito gemido de dolor.
Al cabo de un rato, llegó Hanji con Erwin y otro sub-capitán. Levi los miró con fastidio, él no dejaría que me vieran casi desnuda. Se puso frente a ellos, queriendo taparles la vista, pero él era una hormiga comparado con esos gigantes. Eran realmente altos y mi esposo no podía hace más que echarlos del laboratorio.
-¡Lárguense! ¡¿Acaso no ven que MI esposa está semi-desnuda?! ¡Váyanse! -Exclamó, molesto.
-¡Enano, cálmate! -Hanji lo tomó de los hombros y él, de un manotazo la alejó.
-¡Qué se vayan! -Espetó. -¡Yo las ayudaré, es mi esposa y sólo yo puedo verla! -Los dos altos suspiraron y miraron a Hanji, quien le pidió por favor que se marcharan y después vuelvan. Los dos asintieron y salieron.
-¿Preparada, Mikasa? -Hanji preguntó, poniéndose los guantes. Sólo atiné a asentir, no podía ni hablar de lo mal que estaba.
En un abrir y cerrar de ojos, escuché el llanto de la niña al salir. Había pujado demasiado y al fin logró salir. Levi se quedó mudo, sosteniendo mi mano. Sonreí al ver a mi hija. Rápidamente, la taparon y me la acercaron. Por primera vez, la tuve en brazos. No puedo explicar la emoción que sentí en ese momento, era la persona más feliz del mundo. Levi la miraba con notable enamoramiento ante su bella creación. Al sentirnos cerca, ella dejó de llorar y se acomodó para dormir. Levi y yo, sonreímos, a mi esposo le costó un poco pero no pudo resistirse. Me pidió para cargarla y se la entregué. El la cargó y paseó por la sala, susurrándole cosas que no pude oír. De inmediato, me quedé dormida.

Dos años después...

Me levanté a la hora de siempre, las siete de la mañana. Hoy teníamos día libre en el escuadrón y Levi planeó pasar un día para los tres. Caminé por mi casa hasta la habitación de nuestra niña, la cual, estaba sumida en un sueño. Sonreí y la observé por un rato más, para después irme hacia el baño y asearme.
Después de un rato, los tres estábamos despiertos y listos. Nos encaminamos hasta una pradera. Allí, había un gran árbol gigante, lleno de flores y con pastizal corto. Ese gran árbol, nos regalaba una fresca sombra. Nos sentamos allí y preparamos un mantel para poder sentarnos. Nicol, quien ya sabía caminar, corrió por la pradera, recolectando flores y jugando con su pequeño cachorro. Levi de lo había regalado para no aburrirse, ya que no tenía amigos por ser muy chiquita. Desde ese día, ella no se separa de su mascota. Los dos la mirábamos sonrientes, nos sentíamos felices de estar alejados por fin del cuartel, aunque sigamos dentro de los muros. Nos miramos por un instante, para después hundirnos en un beso cálido. Nos levantamos y corrimos hasta Nicol, quien reía y jugaba con su perrito.
Empezamos a jugar con los dos, corriendo, haciéndonos cosquillas y siendo felices, como tanto queríamos serlo.

Narra Levi y Mikasa.

Y desde ese mismo día, le juré amor eterno a ella/él que le devolvió a mi vida la alegría de sentir amor. Jamás creí que en éste caótico mundo en el que vivimos, pudiera encontrar al amor de mi vida, formar una familia con ella/él y ser felices sin importar los obstáculos de la vida. Desde ahora en adelante, Mikasa Ackerman/ Levi Ackerman, te entrego mi cuerpo y vida, para que me hagas feliz por el resto de mi vida. Te amo, mi primer y último amor verdadero.

The end~

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Capítulo editado.

[Sinceramente, no puedo creer que hayamos llegado al final de esta historia >.< estoy tan triste y a la vez tan feliz. No tengo palabras para agradecerles sus votos y comentarios. Ustedes hicieron posible esta historia y estaré sumamente agradecido por todo ♡ como agradecimiento a sus votos y comentarios, les haré un epílogo.

¡Las amo, las quiero!

Ah, y algo de spam en mi historias :v pásense por mis otras obras, les gustará :3 nah mentira, odio el spam así que sólo era una joda, hagan lo que quieran.

Nos vemos en el epílogo, bai amores♡]

《XxCatchYourCrayonxX》

Hidden Feelings | RIVAMIKADonde viven las historias. Descúbrelo ahora