Día 15: El vestido perfecto.

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—¡Acabas de aceptar! ¡Lily Evans acaba de aceptar ir al baile conmigo!

Por las barbas de Merlín... ¿Qué se supone que hice ayer? La Lily de hace un año claramente se habría negado, sin tomar en cuenta los sentimientos del cara roca de Potter. ¿Por qué ahora sí?

Siempre he odiado una parte de los bailes, y es la parte en la que tienes que elegir atuendo y practicar una danza para la noche. Es cuando, la gente con deficiencia mental y poca coordinación piernas-brazos, mete la pata. Pues, yo, que poseo estas cualidades, sé perfectamente que este baile será catastrófico. Y a todo eso, añadamosle el hecho de que  Potter  alias estupidez en personas, será mi pareja.

—Vamos hoy a Hogsmade para buscar los trajes. ¿Vienes, no?

Maldito Potter.

—¿Lily podrías responderme cuando te hablo? —rechista Chloe.

—Perdón, estaba en mi mundo. Sip, vayamos.

Resulta que Remus nunca le llegó a pedir ir al baile a Nymphadora, la cual va a ir con un joven de su mismo curso, llamado Thomas. Chloe irá acompañada por un chico de sexto, ya que nadie de los de nuestro curso que le habían pedido ir le pareció adecuado. Y pues yo, tendré que soportar a Potter durante toda la noche. 

—No te ves muy emocionada con el baile, Lils. 

—Nymphadora, eso se debe a que el galán de James Potter irá con ella. 

—¿Galán? Querrás decir idiota, egocéntrico, estúpido, arrogante, mujeriego, tonto, cara de sapo... —enumero.

—Ya empezamos. —Chloe rueda los ojos. —odio cuando se pone así. Para de quejarte y vamos...¡Qué vamos a llegar tarde a los carruajes! 

—Intento de ser humano, inútil...

—Vaaamos, Lils.

Siento como alguien me jala del brazo y me arrastra hasta afuera del castillo. Yo, de mientras, sigo murmurando insultos hacia Potter. Por su culpa tendré que buscar un vestido, aprender a bailar y encima tendré que maquillarme. 

Una vez que llegamos a los malditos carruajes, Nymphadora me suelta el brazo y soy libre al fin. Debato entre la opción de saltar del carruaje en marcha o seguir hacia delante. La verdad, es que la segunda aunque la odie más, es en la que menos perjudicada saldré, así que...me tendré que aguantar.

Las calles de Hogsmade se encuentran repletas de estudiantes de Hogwarts. La mayoría de las chicas corren de un lado a otro buscando trajes etc. mientras que yo sigo siendo arrastrada por mis amigas hasta una tienda.

Tras horas y horas de rebuscar por todos los rincones de todas las.malditas tiendas de trajes de Hogsmade, Chloe, Nymphadora y yo, salimos cada una con una bolsa entre las manos.

Chloe ha optado por llevar un vestido ajustado de parte de arriba y suelto a partir de la cintura. Es de color violeta y la verdad es que conjunta  muy bien con el color de su cabello. Y unos tacones kilométricos con los que yo nunca podría andar.

Nymphadora lleva un vestido sencillo, de color verde esmeralda y escote de corazón. También ha decidido ponerse unos tacones.

Y yo pues llevo un vestido que odio a más no poder pero que según mis amigas es el vestido perfecto para mí. Es de colores celestes y azules y largo hasta el final. Es de seda y muy ligero, cosa que de verdad agradezco porque al menos podré estar cómoda con el puesto. Y de zapatos he optado por unos con poca cuña.

Decidimos ir a comprar algunos dulces y comer como las glotonas que somos. De camino a la tienda, nos cruzamos con los cuatro merodeadores, que al parecer también han aprovechado para comprar sus trajes. El estúpido de Potter lleva plasmada una estúpida sonrisa en su rostro, mientras que los demás se ríen de, seguramente, alguna de sus tonterías.

—Pero mira a quién tenemos aquí. —dice Sirius con burla.

—De todo el mundo que hay en el castillo nos tenemos que cruzar justo hoy con estos simios sin vida. —se queja Chloe mientras yo asiento.

—¿Simios sin vida?

—Sip.

—Oh, vamos. ¿Unos simios sin vida tendrían a casi todas las chicas detrás de ellos?

—Vamos, Chloe. No merece la pena discutir con ellos. —pongo fin a la pequeña disputa que estaba apunto de forjarse.

Tras ese pequeño encuentro, para alegría nuestra, no volvimos a cruzarnos con ellos. Lo siguiente que hicimos, fue comprar algunas golosinas y pasarnos a beber una cerveza de mantequilla. Como Nymphadora, al ser más pequeña, no podía beberla, optó por no tomar nada para beber.

El día en resumen, fue un desastre para mí. Primero tuve que comprar el maldito vestido para asistir a la maldita fiesta que no quiero maldita sea ir. Después me crucé con los merodeadores y por último nos echaron del bar debido a que estábamos montando Mucho escándalo, y todo eso sólo porque Chloe gritó por haber visto una rata. Desde siempre ella ha tenido fobia de estas pero tampoco creíamos que fuera a reaccionar así al verla.

Ahora, sólo me queda esperar y pedir que por favor los días que vienen se pasen más rápido y que mi “cita”-por llamarlo de alguna forma-con Potter no sea un aburrimiento.

Sé que es un cap corto y más aún cuando llevo un mes sin subir jeje. En mi defensa diré que entre los exámenes y las fiestas apenas he podido conectarme a Wattpad.

Espero que les haya gustado el cap.

Pd: Estoy pensando en empezar a escribir un FanFic del maravilloso Dylan O'brien, ¿qué opinan?

Adiooó!

30 días para enamorarme (Jily) (Editando) #MundialesQD2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora