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*1 mes más tarde*

BECKY

Hoy es un día especial. Bueno, digamos que lo es. Solo es un día normal y corriente. Miro la fecha: 28 de octubre 2016. Hoy es el gran recital. ¿Qué recital? Bueno les explico. Nuestra universidad siempre a estas fechas hace un recital, donde se canta, se baila, se actúa. Es una parte para que los padres vean que no fue una pérdida de tiempo escoger las carreras que no querían que escogiéramos. Cuando decidí seguir mi sueño como bailarina mi padre casi me deshereda, con el tiempo lo acepto, claro que fue porque como quiera estudio administración de empresas.

Estoy nerviosa. Hoy me tocaría bailar frente a un montón de gente. Frente a muchas cámaras. ¡Me hubiera enfermado! Pero no, no podía dejar sola a Samantha en esto.

- Bien, listas para el último ensayo - preguntó la profesora de baile y todos asentimos - esta vez practicaran junto a las cantantes, tenemos que ver que todo quedara perfecto

- Profesora, Samantha tuvo que irse antes - avisé. Aquí es donde comienza a gritar como loca y a llamarla que llegue aquí

- Lo sé, hable con ella antes - sonrió. Esto sí que no me lo esperaba - dijo que estaba totalmente lista que no necesitaba un ensayo más - maldita perra dejándome sola con esto - ¿estas lista o necesitas practicar?

- Estoy lista - respondí - ¿puedo marcharme para descansar?

- Claro linda - siguió en lo suyo

Lo único que me calmaba, pero me ponía triste a la vez es que Kilian no estaría. Hace unas semanas salió del país con su papá a familiarizarse con el negocio. Sam ha estado muy rara desde eso, Keiden también se fue con ellos y se encuentra más que nerviosa. Para mí es un alivio, mi novio no me vería hacer el ridículo. Aunque Sam no paraba de decir que hubiera sido maravilloso que nos vieran.

A Simeily le tocaba cantar para que Keimily bailara. Ojalá pudieran verlas. Están más nerviosas que yo. Incluso tiemblan, podría decir que se les olvido ponerse en silencio. Están en modo vibración. No debería burlarme mucho. ¿Se imaginan que me desmaye cuando pise la tarima? He pensado en eso una y otra vez. Es mi primera vez.

Basta de pensamientos absurdos. Estaciono el auto frente a casa de Sam. Ya debería mudarme, paso más tiempo aquí que en mi casa. Aunque algunos días es al revés. Pasamos más tiempo en mi casa que en la de ella. Ya deberían darme una habitación.

Entro sin llamar a la puerta. Las ventajas de tener tu propia llave.

- ¡Sam! - gritó esperando la respuesta - ¡Sam!

- ¡Estoy arriba! - grita en respuesta

Subo las escaleras corriendo y entro a su habitación.

- ¿Dónde está tu mamá? - pregunté al ver que no la encontré por el camino

- Salió con tu mamá y mis tías - respondió riendo - dijeron que necesitan un vestido para esta noche

- Cierto, la fiesta - me tire en la cama - ¿ya tienes vestido?

- Sí - respondió volteándose - y tú también

- La verdad, no - respondí sentándome

Entro a su armario y saco un hermoso vestido rojo.

- Me atreví a comprarlo para ti - dijo tímidamente entregándome la hermosura de vestido - a Kilian le gustaría - vaya que si

- Por cierto, ¿sabes algo de ellos? - pregunté - es extraño que hoy no han llamado, ni siquiera un mensaje

Una Dosis Peligrosa [1&2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora