Una Dosis Peligrosa [1&2]

43.

BECKY

Todo se nos fue de las manos anoche. No recuerdo absolutamente nada. Tal parece que lo de olvidar nuestros nombres se hizo muy literal. Nuestros teléfonos están muertos. Hemos buscado por todas partes y no tenemos nada de dinero.

- Deberíamos llamar a tu hermano - le sugiero a Sam

- Estoy segura de que nos matará - contestó frustrada

- Es cierto - dije - pero tenemos que hacerlo, no nos podemos quedar aquí

- Disfrutemos de la playa - pareció Simeily con trajes de baños

- ¿De dónde sacaste eso? - preguntó Keimily

- Fue fácil seducir al encargado de la tienda - respondió sin interés

¡Está loca! Pero tiene razón a Sam le hace falta relajarse un poco. Todas lo necesitamos Kilian puede esperar un poco más. Nos cambiamos rápido y nos pusimos en marcha a la playa. La verdad se veía hermosa, me suicidaría si nos íbamos y no la disfrutaba.

- Que hermosa - me siento en la arena - relájense

Nos sentamos en la arena a mirar el gran paisaje. La verdad, bajo esta situación tan loca, el despertar en otro país y sin nada tengo que admitir que es un poco divertido. La adrenalina de estar asustadas por no saber que pasara con nosotras en un rato. A donde iremos, el cómo saldremos de aquí, como llegaremos a casa. Todas, aunque no digamos nada estamos preocupadas y asustadas. ¿Abran notado que no estamos? ¿Nos estarán buscando? ¿Estarán preocupados? De lo único que estoy segura es de que nos mataran.

- ¿Bebidas? - nos pregunta un camarero en inglés

- Claro - respondemos y nos sirve

- ¿Tiene algún teléfono que nos preste? - preguntó

- Si, en la barra, se lo prestare cuando guste - asiento

- Iré a llamar a Kilian - les aviso a las chicas - como sea tardara mucho en venir por nosotras

- Conociéndolo vendrá volando - contesto con Sam con sarcasmo - las mujeres más importantes de su vida están aquí atrapadas, no tardará en venir

- Es cierto - apoyó Kei - nos cuida más que un niño cuidando un juguete

- No importa chicas - respondo - no tenemos nada de dinero ni ropa

- Tienes razón - ¡al fin! - llámalo

- Ahora vuelvo - las deje solas

Kilian reaccionaria de dos maneras; me grita y viene a matarnos o se emociona y viene a salvarnos. Marco su número y lo llevo hasta mi oreja. Estaremos muertas, algo me lo dice...

[...]

KILIAN

- Creo que es mejor rendirnos - digo cansado - hemos recorrido toda la ciudad y no las encontramos

- Además de que no se han comunicado con nosotros - dice Kedriel

- No podemos rendirnos - dice Keiden agotado

- Apoyo a Keiden - Kenai bosteza - solo necesitamos descansar

- Nuestros padres están moviendo fichas para encontrarlas - digo bostezando - vayamos a descansar unas horas, necesito dormir

- Vayamos a descansar a mi casa - sugiere Keiden y aceptamos

Quizás en el camino se comuniquen. Aunque aún no lo han hecho tengo un poco de esperanza. Keimily es la más cuerda de las cuatro, estoy seguro de que ella tomara su teléfono y llamara. Llegamos a la casa de Keiden y todos entramos. Nos quedamos en la sala, no sería buena idea ir a las habitaciones y que nos quedemos dormidos completamente por días. Este cansancio es tan pesado que no dudo que lo hagamos.

No hago más que cerrar mis ojos y mi teléfono comienza a sonar provocando un ruido horrendo. No me molesto en mirar quien es, solo contesto.

*LLAMADA TELEFÓNICA*

- Hola

- Mi amor

Me levanto de golpe

- ¿Becky? - todos se levantan al escucharme decir su nombre - ¿dónde demonios están?

- No me lo vas a creer - comienza a reír nerviosa

- ¿Dónde están? - vuelvo a preguntar

- No sabemos cómo llegamos aquí Kilian, no tenemos dinero, nuestros celulares están muertos - comenzó a hablar rápidamente y la interrumpí

- ¿Dónde Becky?

- Amanecimos en un hotel en Tailandia

- ¿Que?

- En Tailandia - repitió - necesitamos que nos ayuden a volver

- Iremos por ustedes

- Gracias

- No se muevan de ahí - finalicé la llamada

*FIN DE LLAMADA*

- ¿Dónde están? - pregunto rápidamente Keiden

- Tailandia - respondí - alisten sus maletas que salimos lo más pronto posible

Esta vez sí que se pasaron. Emborracharse hasta el punto de amanecer en otro país, nunca lo imagine. ¡Menos de mi hermana! Ya se enterarán.

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¡Hola!

Es corto, lo se, no tienen porque decírmelo. ¡Estoy muy furiosa! Cuando fui a publicar el original presione algún botón equivocado y lo eliminé. Escribí lo mas rápido que pude, además de lo que me acordaba. Por alguna razón mi mente también me traicionó.

Espero que les guste aún así.

Besos ❤️