Una Dosis Peligrosa [1&2]

46.

           

KEIDEN

- No puedo creer que mi hermana te haya dejado - repite

- No hace falta que me lo recuerdes a cada minuto Kilian - respondí ya frustrado

- ¿Qué piensas hacer? - preguntó

- Nada - respondí tomando un sorbo de mi trago

- ¿Como que nada? - preguntó soltando el suyo - ¿La dejaras ir? Es decir, después de todo lo que has luchado por tenerla de vuelta, ¿Planeas dejarla ir? - esa fue una buena pregunta - dime que no estás hablando de verdad Keiden - la verdad ni yo mismo lo sé - entonces no la amas como tanto juraste hacerlo - espera, ¿qué?

- Si la amo - dije rápidamente - pero ella no me quiere ver - la verdad no lo dijo claramente - ella me boto hermano, ella no quiere estar más conmigo y la entiendo - es obvio, la llame zorra - no confié en ella, en vez de abrazarla y decirle que la extrañé solo desconfié de ella y la trate mal - además de que no entiendo sus sentimientos claramente, es obvio soy hombre, nosotros no entendemos las cosas rápidamente, tienen que ser explicadas con manzanas si es necesario - la perdí Kilian y no la recuperare tan fácil

- ¿Sabes cuál es tu problema? - lo mire dándole a entender que continuara - olvidaste quien eres

- No entiendo - conteste

- Eres Keiden Blackwood - eso lo se idiota, no puedo olvidar mi nombre - eres el rompecorazones Blackwood - es cierto - a quien ninguna chica se le escapa tan fácil, ¿vas a perder a esta?

- Hermano, tu y yo sabemos que Sam tiene el peor carácter - suspire - no es cualquier chica de la que hablamos, Sam es diferente, no tiene nada que envidiarle a ninguna otra, no será fácil conquistarla

- ¿Vas a morir sin haberlo intentado?

- No lo se

- Es mi hermana de la que hablamos, lo sé, pero en este momento tu eres mi hermano y hablamos de una chica - dijo dándome una palmada en el hombro - tienes que ir por ella y no rendirte hasta tenerla cerca, haciendo lo que sea necesario - tenía razón - sabes una vez alguien me dijo que el amor es maravilloso y amar es lo mejor de la vida - sonreí - corre tras ella Keiden, arriésgate, lucha y tráela de vuelta a tu lado

- Gracias hermano - choque nuestros tragos - ahora dime, ¿qué sucede con Becky?

- Estoy muy molesto con ella - suspiro - lo que hizo estuvo muy mal

- ¿Estas consiente de que no lo hicieron cuerdas? -  asintió

- Pero aún estoy enojado, le dije que esperara y no lo hizo - respondió - ¿qué me hace creer que si falto unos días esperara por mí?

- Sabes, alguien me dijo hace unos minutos que me arriesgara por la mujer que amo - sonrió

- Eres maravilloso

- Lo sé, por eso me aman - reímos

- Quien imaginaria que estuviéramos en esta situación - dijo - hace unos meses estábamos preocupados por cual elegir para llevarnos a la cama y míranos

- Hasta el más mujeriego se enamora - cité

- Y hasta el más mujeriego sufre por amor - terminó el

[...]

SAMANTHA

- Entonces, terminaste con el - dijo Becky sin poder creerlo

- Si - respondí - y no me arrepiento

- Pero Sam...  - no la deje terminar esa oración

- Pero Sam nada, lo hice y ya está - nadie me haría cambiar de opinión, no esta vez - el me llamo zorra, no confió en mi además de que si me amara tanto como dice hubiera pensado igual a mi o por lo menos hubiera hecho lo que sea por mantenerme a su lado - algo en lo que fallo - sin decir que el muy idiota se atrevió a pensar que estoy loca

- ¿Como sabes que lo pensó? - pregunto levantando una ceja

- No lo sé - me levante - de seguro lo pensó

- ¿Estas totalmente segura de lo que estás diciendo? - pregunto sin poder creerlo, ¿acaso nadie me toma enserio?

-  Totalmente segura - respondí y suspiro

- Sabes que no lo permitirá - aseguro - es decir, Sam tú lo amas como el a ti, vamos, solo fue una discusión

- ¿Lo estas defendiendo? - pregunte molesta

- No lo defiendo - respondió al instante

- Claro que lo defiendes, Becky me llamo zorra sin ningún problema en decirlo - dije desesperada caminando de un lado a otro - además, ¿Porque lo defiendes? ¡Tu amiga soy yo!

- No he dicho lo contrario Sam - se detiene frente a mi - solo quiero que veas lo que yo veo, se aman, no puedes dejar de amarlo de la noche a la mañana solo porque no entienda tus sentimientos no puedes abandonarlo todo

- Sabes, no quiero tener esta conversación - dije cortándola - estoy decidida, nada me hará cambiar de opinión - dije caminando hacia el baño -  iré a bañarme, hoy iré al club por si quieres ir

No quería que me hicieran cambiar de opinión, no esta vez. Lo amo, es verdad que no puedo dejarlo de amar en un día, pero estoy segura de que lo haré. No puedo estar con la persona que no confía en mí, que ni siquiera sabe lo que desea.

[...]

Al salir del baño veo que Becky se marchó. Lamento mucho que se haya ido enfadada pero la verdad no necesito que alguien intente hacerme cambiar de opinión. Soy Samantha DuCraine y nadie me hará cambiar de opinión. Podrán decir que soy una egoísta, pero no me importa. El me llamo zorra pues le enseñaré como es ser una de verdad.

Me pongo un vestido color rojo totalmente ajustado y revelador junto con unos tacones altos negros. Me maquillo totalmente sencilla, pero a la vez no, llevando mis labios de un rojo pasión. Recojo todo lo que necesitare esta noche y lo meto dentro de mi bolso. ¿Debería llevar mi celular? Creo que no. No necesito que nadie me interrumpa esta noche.

Manejo mi auto hasta llegar al club que tanto frecuentamos todos. Estaciono y me bajo caminando con total seguridad como siempre ha sido. Al entrar la música inunda mis oídos, me continúo caminando llamando la atención de varios hombres de este lugar. Me acerco a la barra y pido un buen trago para empezar la noche. Como era de esperarse, los chicos están a unas mesas lejos de mí. Le sonrió, pero no me acerco a ellos, ni siquiera me molestare en hacerlo, y mucho menos viéndolo allí sentado. Me mira serio, si piensa que por mirarme así caeré a sus pies está muy equivocado.

- Hola - me saluda un chico que no está nada mal

- Hola - sonrío coquetamente

- ¿Que hace una mujer tan hermosa aquí sentada sola? - pregunta

- No estoy sola, acabas de llegar a hacerme compañía - respondo y ríe

Desvió mi vista de el hacia la mesa de los chicos. Keiden no deja de mirarme mientras Kilian le habla, quizás tranquilizándolo.  Le dedico una sonrisa y veo que aprieta sus labios.

- ¿Como te llamas? - preguntó el chico captando mi atención

- Samantha - respondí sonriendo

- Un hermoso nombre para una hermosa mujer - es tan dulce, me lo podría comer - mi nombre es Yeriel

- Bonito nombre

Está sonando una de las canciones que más amo.

- ¿Quieres bailar? - le pregunto y acepta

Toma mi mano y caminamos hasta la pista donde todos se mueven. Muevo mis caderas acercándome a el de espaldas. Sujeta mi cintura y se mueve junto a mí, su perfume es embriagante. Me volteo y pongo mis manos alrededor de su cuello, siento su aliento en mi mejilla, puedo oler el whisky venir de él, tan embriagante. Miro de reojo hacia la mesa y veo a Keiden respirar con dificultad, está furioso.

Me acerco a los labios de Yeriel mientras continuamos bailando. Sonrió y lo atraigo de una vez a mis labios. ¡Vaya que sabe besar! Me alejo y veo que Kilian está reteniendo a Keiden y sonrío con maldad, el solo me mira mucho más que furioso. Esto es ser una zorra mi amor...

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Aquí rompiendo sus corazones...

Besos ❤️