Mío (Kaisoo)

Parte tres: Tenemos algo en común

Parte tres: Tenemos algo en común

Kai encuentra a Chanyeol y a Baekhyun parados en la puerta de la habitación del gigante y sus caras sólo muestran preocupación. Chen se acerca y entre susurros comparten información mientras el chico avanza para entrar.

–Kai, si no quieres hacer esto, no tienes por qué hacerlo– le dice Baekhyun tomándolo del brazo– Puedo hablar con Suho, no tienes que...

–Tranquilo– Kai sonríe tristemente. Quería parecer calando, pero justo en ese momento escucha una voz que le pone los pelos de punta.

–¿Quieres que te acompañe?

Es D.O, quien seguramente está parado detrás de él y ha llegado con los demás, porque también escucha otras voces conocidas.

Las únicas personas que sabían su secreto eran Suho y Baekhyun, por eso el chico se ve tan preocupado y quiere evitarle un mal rato. Kai puede manejarlo solo, pero por nada del mundo quiere que D.O se entere, sabe que las cosas van a ser diferentes con él si lo hace, así que se voltea para negar con la cabeza. Siente una extrañamente dolorosa punzada al ver al chico con sus muletas, pero no dice nada.

Todo está absolutamente oscuro excepto por el pequeño rayo de luz que aparece cuando Kai abre la puerta, pero éste también se pierde cuando la cierra. Le cuesta un poco que sus ojos se acostumbren a la oscuridad y no se como es capaz de llegar hasta donde sabe que Xiumin está. Kai se sienta en el filo de la cama y se mantiene en un largo silencio, hasta que suspira. En eso, siente el cuerpo de Xiumin a penas moverse.

–Seguramente no quieres saber nada, quieres dormir para siempre y que nadie sea capaz de mirarte de nuevo. Te sientes sucio, te sientes herido física y emocionalmente, te sientes traicionado por la suerte. Quieres encontrar un culpable, tienes rabia y sed de venganza. Piensas que tu vida está acabada desde ahora y nunca nada será lo mismo, también supongo que piensas en Chen... nunca he estado enamorado, pero debe ser horrible. Yo... puedo comprender.

Sólo un sollozo ahogado es audible y Xiumin vuelve a revolverse incómodo entre las mantas. Kai evita tocarlo, no va a hacerlo, así que vuelve a suspirar y junta toda la fuerza que va a necesitar para hablar sin romper a llorar el también.

–Nunca podrás entender–susurra el chico repentinamente y de nuevo se escuchan pequeños lloriqueos.

–Tú no lo sabes, Xiumin, pero la razón por la que me han pedido a mí en particular que hable contigo, es porque probablemente soy la única persona que conoces que realmente puede entenderte. Va a pasar mucho tiempo antes de que seas capaz de calmarte y dejar de pensar en eso, no te voy a pintar todo hermoso porque hay que ser realistas... pero lo vas a terminar superando. Tu vida no termina aquí, Xiumin. Si yo, que nunca tuve a nadie a mi lado lo conseguí, tú que tienes a Chen y a tus amigos lograrás salir adelante. Será incluso más fácil para ti.

–Kai... ¿tú...?

–No vamos a hablar sobre mí,¿entendido? Es más, de ahora en adelante esto quedará entre tú y yo, si quieres hablar puedes buscarme, pero no lo hagas con los demás. No dejes que muchas personas se enteren de los detalles, no quieres que nadie te tenga lástima ni te recuerde esto, ¿verdad?

–Sí

–Bien, eso es todo. Duerme tres días seguidos, come mucho y deja que las personas hagan cosas por ti por un tiempo. Luego, debes regresar a tu vida normal, como si nada hubiera pasado, así estés muriendo por dentro. Los episodios de depresión no te van a venir bien para sobrevivir en este mundo.

Kai, incómodo como estaba por tener que hablar de esto, se puso de pie y decidió marcharse. Había dicho todo lo que podía decir, sabía que por más que quisiera no podía hacer mucho más por el chico, así que le parecía mejor ya no meterse.