Mío (Kaisoo)

Parte cinco: Es hora de conocerte

Parte cinco: Es hora de conocerte

D.O está abriendo la puerta de su cuarto cuando una mano toma su brazo. Sorprendido, se voltea para encontrarse con Kai. Se nota que ha corrido, como se quedó con Suho, supone que ha tenido que apurarse para alcanzarlo y, para su mala suerte, lo ha hecho a tiempo.

–¿Qué pasa?– pregunta D.O sin mucho interés.

–Te dije que quería hablar contigo, ¿por qué no me esperaste?– Kai no lo ha soltado, pero con su otra mano se apoya en la pared para respirar correctamente.

–El líder pidió hablar contigo, ¿por qué me quedaría ahí? Además, no creo que tengamos nada de que hablar, si te soy sincero.

–Estás siendo increíblemente injusto conmigo, Kyungsoo.

–Deja de llamarme Kyungsoo, Jongin.

Golpe bajo. Recordaba, recordaba su nombre verdadero, algo sólo mencionado una vez en su tan acalorada y variada conversación. Kai esperaba que tuviera lagunas mentales como siempre que bebía en exceso, pero no era así. Y eso significaba muchas cosas dolorosas. La primera es que lo que había hecho con Baekhyun no era tan inconsciente como él pensaba y esperaba, también estaban las palabras hirientes que salieron de su boca y, sobretodo, las palabras que él mismo había dicho seguían en su memoria. En ese momento, la puerta se abre y D.O entra. El que no la haya cerrado en su cara era una muy buena señal, así que Kai entra también y se asegura que tenga seguro, no quiere interrupciones repentinas.

D.O hace como si el no estuviera ahí. Recoge sus cosas, incluso se cambia de ropa, dando un espectáculo entre sexy, tierno y angustiante, ya que el yeso le estorbaba un poco. Kai recuerda que falta poco para que se lo quiten y luego se da cuenta que ese poco es muy pronto al oírle mencionar que le van a quitar esa "porquería" al día siguiente.

–¿Qué tengo que hacer, Kyungsoo?

–Empezar por dejar de llamarme así, ya te lo dije– comenta el chico, de mala manera, perdiendo la paciencia.

–Dijiste que te llamara así cuando tú sepas mi nombre real, y ahora lo sabes.

Sólo un suspiro indescifrable se deja oír y D.O vuelve a darse la vuelta para arreglar sus cosas intentando ignorar la presencia del otro en su habitación. Pensó que Kai diría algo estúpido y se iría, pero nunca debía subestimarlo.

–Estos días siento como si no te conociera– comienza con tono suave, casi como si estuviera afectado por la situación –Parece que ignoraras las señales tan directas que te doy. Como si no las quisieras ver intencionalmente. Actúas de manera extraña cuando estoy cerca. Podría entender si estuvieras enojado, pero no lo estás o al menos finges bien no estarlo. Sé que te afecta, así no lo digas, pero todavía no soy capaz de saber cómo te afecta.

–Jongin– su nombre real suena poco natural en los labios del otro – Lo que pasó ya pasó, no podemos regresar a ese punto otra vez. Hay muchas preguntas que tengo y que no soy capaz de resolver, ¿sabes? No eres el único que está frustrado. Siempre lanzas palabras cuando estás enojado sin pensar en ellas y me lastimas.

D.O cierra los ojos con fuerza y se tapa la cara con una mano. Kai está parado cerca, sin estar muy seguro de acercarse o no. Es la primera vez en su vida que teme ser rechazado por una persona, la primera vez que quiere consolarlo propiamente dicho. ¿Por cuánto tiempo han estado en esto? No puede estar muy seguro. Kyungsoo y Jongin no saben que un dramático cambio en su relación está por llegar, sobretodo después de esta noche.

–Sé que suelo ser estúpido... a veces digo cosas que... te juro que si pudiera borrarlas... si yo realmente pudiera evitar.

–No eres estúpido, eres... frustrante e irritante. Siempre tengo que ir primero hacia a ti, de otra forma es seguro que voy a perderte. Eres como un callejón sin salida, puedo alejarme un poco, pero no puedo salir.