Del Odio Al Amor ¿Se Podrá? (NamJoon Y Tu)

7.Sorpresa.

Narro yo - TN

Despertaste a las 9 de la mañana, la hora en la que"normalmente" despertabas los sábados. La idea de tener a Namjoon en tú casa casi a escondidas de tus padres te estaba matando.
Últimamente te sentías nerviosa estando cerca de el y sentías celos cada vez que Jae-won se le acercaba. Tú madre te dijo que esos sentimientos eran síntomas del "amor" pero tú siempre la decías que estaba loca, que eran alusinaciones suyas y que era imposible enamorarse de alguien en dos semanas.

Te giras en la cama y te levantas con pereza, caminas a la puerta quitándote algunos cabellos de la cara bostezando con pesades.
Abres la puerta y te dirijes a la recámara de Namjoon. Tocaste la puerta, pero al no recibir respuesta decidiste asomarte por el umbral de esta.
Sonries al ver un bulto que ronca en la cama. Sierras la puerta y bajas a la cocina.

-Si los pétalos de la rosa blanca uno a uno se van muriendo la amabilidad en la noche los teñira.*.-cantas sirviendote un vaso de zumo de naranja.-Y si al renacer nuestros de nuestros sueños, los recuerdos que hay en mi pecho floreceran haciéndose eternos al fin...*.-sales de la cocina dándole un trago al baso de zumo.-Buenos días madre.-saludas sentandote al lado de ella.-

-Buenos días Nezumi,*.-odiabas que tú madre te llamara así, pero era casi costumbre familiar así que no le diste importancia y te limitas a seguir bebiendo tú zumo.-¿Como amaneció Namjoon?.-

Casi te ahogas con el zumo y comenzaste a toser de forma presipitada ¿Como sabe que Namjoon esta en la casa? Se suponía que ellos estaban durmiendo cuando ustedes llegaron, ¿Como porque iba a estar enterada de la presencia de Namjoon?

-E-el aún está durmiendo...-dices tratando de calmarte.-Seguramente está cansado, después de todo el casi no hace ejercicio y yo lo puse a correr.-sonrisa nerviosa rascándote la nuca.-Ya sabes como soy jajaja.-ríes aún más nerviosa y tú madre te mira sin creersela.-Y es evidente que...no se mentir...

-Ve a despertarlo para desayunar.-la viste sonreír con grandeza.-Desayunaran solos. Me tengo que ir al trabajo. Ya sabes como es esto.

-Si má...-sonries aliviada de que no comenzara con sus sobreprotecciones.-¿Y papá?.-preguntas ya que era raro no verlo a las 9am con su tan acostumbrado periódico

-Trabajando.-te dice.-Al parecer en Tailandia, prepara tus maletas, nos mudaremos otra vez.-tú sonrisa desaparece.

Sentiste la rabia apoderarse de cada fibra de tú cuerpo. No estabas lista para irte de Corea del Sur, por primera vez te sentiste cómoda en un lugar que no fuera TP(tú país) y con alguien que no fuera Itsuki o TA(tú amiga). Sabías lo que iba a pasar y no querías irte, Namjoon es la única persona a la que le abriste tú corazón y te acepto poco a poco y tú a el.

-¡NO QUIERO!.-gritaste.-No tienes una idea de lo que estar viajando de aqui a haya, de hacer al menos un amigo y te lo arrebaten así como así...-apretaste el puño y la mano en la que sostenias el vaso.-

-TN, hija.-se acerco a ti.-No seas egoísta lo que hacemos lo hacemos por tú bien. Te entiendo pero...-

-¡NO! ¡NO ME ENTIENDES!.-y finalmente rompiste el vaso. Sentiste lo poco del zumo de naranja mezclarse con la sangre que escurria a cántaros de tú mano. Tú madre se acerco más a ti pero tú la apartaste.-Alejate de mi...-subiste corriendo las escaleras hacia tú habitación y asotaste la puerta.

Escuchas a tú madre gritarte desde la sala, si embargo no saliste de tú recámara hasta que la escuchas salir grandote que se iba a trabajar.
Tú mano aún sangraba. Te levantaste aún llorando y abres la puerta encontrándose con Namjoon, quién te miraba sorprendido.