Estamos en los carruajes y todos los tributos estan a punto de salir, estoy nerviosa, pero aún así, me monto en mi carruaje que es de color negro y lineas plateadas a los bordes.
Thomas aprieta mis manos y me dice que todo estara bien. Esperamos cinco minutos para poder salir, mi carruaje fue el último, el camino era bastante largo como para que toda la gente extraña del Capitolio nos pudiese ver, ya estando en movimiento veo a la gente del Capitolio mientras sonrió, en un acto inesperado Thomas me carga sobre sus hombros y me alza, yo levanto las manos las manos señalando los tres dedos del centro llevandolos a mis labios y luego señalandolo a la pantalla, todos aplaudían.
El me baja, mientras tanto, el casco en mi cabeza, se estaba moviendo, un tenue sonido se escucho, de repente más fuerge hasta que en forma ascendete del casco, salió un holograma de un Sinsajo, disparado hacía el cielo, surcando todo el cielo del Capitolio. Era un espectáculo hermoso, volaba dando vueltas y más vueltas. Hasta extiende sus alas y de ellas se desprende un centenar de chispas.
Un estruendoso sonido de aplausos se escucho, ellos nos lanzaban flores y algunos pocos nos abucheaban, pero Iván sabía, para que era el casco.
Ahora lo entiendo, soy la persona que el Sinsajo protege, su misión es protegerme.
A medida que voy avanzando el pájaro vuela por mi cabeza, hasta que llegamos a un punto dónde todos los carruajes se detienen y mi Sinsajo que volaba arriba de nosotros se prende en fuego y desaparece dejando cenizas falsas.
- Bienvenidos, queridos amantes del Capitolio, tributos, espero que se sientan comodos con los... ¡76 Juegos Del Hambre! - Grito Anabelle quién lucía un vestido blanco. - Este año serán unos Juegos que jamás olvidarán, ni los tributos caídos ni los televidentes. ¡Un aplauso Capitolio!
El público aplaude unos segundos y ella pide tomar la palabra una vez más, con su mano. - Un minuto de silecio por nuestro ex-presidente Snow, este año, los Juegos serán diferentes, los únicos adelantos que les puedo dar es que habrá desastres naturales probablemente cada rato. Esto es para que las escorias de los rebeldes, aprendan lo que es el respeto. - Dijo Anabell mientras todos aplaudían.
ESTÁS LEYENDO
Willow Mellark
Novela JuvenilDespués de que la guerra acabó en Panem. Hubo una década de paz. Sin más Juegos, sin más muertes a sangre fría. Todos pensaban que ya todo estaría bien. Pero la presidenta Paylor, enfermo y su sucesora, la mismísima nieta de el ex presidente Snow. D...
