capitulo 31 Lluvia

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  Los recuerdos iban y venían en la mente de la pelirosa, quien sentía que un agudo dolor se apoderaba de su cabeza. Haciéndole emitir un leve alarido de dolor.   

  -Auch. – Dijo la pelirosa mientras se llevaba su mano a la cabeza.-Sakura, ¿Qué ocurre? – Preguntó notoriamente preocupado el pelinegro.-Nada. – Contestó la pelirosa tratando de sonar calmada.-Sakura-san, ¿Le duele algo?- Preguntó la doctora preocupada por su paciente.-No. – Dijo la ojiverde.-Sakura, no me mientas. – Dijo el pelinegro serio; pues sabía que la pelirosa sólo estaba tratando de hacerse la fuerte.-Está bien me duele mucho la cabeza. – Respondió muy sincera la pelirrosa; pues sentía que la cabeza se le partiría en dos.  

  - Bueno lo mejor será que la revise. – Comentó la doctora mientras revisaba a su paciente.   

  Después de revisar a la pelirosa; la doctora determinó que no tenía nada grave y que lo mejor sería que descansar. Dicho esto el pelinegro le agradeció a la doctora por sus atenciones; mientras se llevaba a Sakura a su casa. No tardaron mucho en llegar Sasuke a su casa acompañado de la pelirosa. Mientras entraba, fueron recibidos por Chiyo-san; quien sepreocupo al ver tan mal a la ojijade  

  Sakura-san, ¿Qué le ocurre? – Preguntó preocupada la anciana.-Sakura no se siente bien. Podrías Chiyo-san ayudarme con los niños. –Dijo el azabache.-Sí, Sasuke-san. – Respondió la anciana mientras tomaba a los niños y los llevaba a su cuarto.   

  Sasuke cargo a Sakura a su habitación; pues la pelirosa se había puesto muy mal. El pelinegro acostó a la ojiverde en la cama mientras la cubría con una manta. Sakura trató de protestar por la actitud del pelinegro; pero no lo pudo hacerlo. Pues cuando estaba a punto; un fuerte dolor decabeza hizo que soltara un grito de dolor  

  ¡Auch!- Gritó la pelirosa mientras se encorvaba del dolor.-Sakura, por favor no te muevas y trata de descansar. – Dijo el pelinegro con preocupación.-Sasuke, no quiero dormir. – Comentó temerosa la ojiverde por las imágenes que venían a su mente.-Sakura es por tu bien. Descansa. – Dijo el azabache mientras besaba su frente.   

  La pelirosa asistió y con mucho esfuerzo trató de dormir; pero cuando estaba a punto de lograrlo sonó el teléfono del pelinegro. Sasuke sin más remedio contestó de malas ganas.   

  -Naruto, ¿Qué ocurre? – Preguntó serio el azabache-Sasuke, disculpa que te llame. Pero encontré a Reiko. – Dijo el rubio.-¿La encontraste?- Dijo el pelinegro. - ¿Dónde estaba?-En Kyoto. – Respondió el ojiazul. – Pero ahorita está de regreso en Tokyo.-Me alegró. – Dijo feliz el pelinegro; pues desde el accidente de Sakura.Reiko había desaparecido de Tokyo.-Sí quieres, vamos a su apartamento para encárala. – Sugirió Naruto.-Está bien. –Dijo poco convencido; pues no quería dejar sola a Sakura;pero muy en el fondo sabía que era por el bien de su relación.  

  Sasuke regresó su mirada a la pelirosa y con mucho cuidado beso aSakura mientras le decía:   

  Sakura, voy a salir un instante con Naruto y pronto estaré de vuelta. –Dijo el pelinegro.-Está bien, Sasuke. – Dijo la pelirosa algo adormilada.- Descansa, regresó pronto. – Comentó el azabache al tiempo que salía del cuarto.  

No pasó mucho tiempo para que Sakura cayese en los brazos de Morfeo.

Mientras los recuerdos iban y venían de la mente de la pelirosa. Esta

sudaba frio en la cama y recuerdos dolorosos venían a su memoria:

La ojiverde miraba a sus padres y les sonreía mientras un camión se venía

sobre su auto impactándolos; mientras el auto era empujado al precipicio

su madre abría su puerta y la empujaba fuera del coche...........................

Sakura se encontraba en el hospital mientras su abuela le decía que sus

padres la cuidarían desde el cielo.......................................

  Sakura miraba la tumba de su abuela mientras Neji la abrazaba y le decía:-¡Yo nunca te dejare; gastaré hasta mi último día en hacerte feliz!......Sakura miraba la tumba de su abuela mientras Neji la abrazaba y le decía:

-¡Yo nunca te dejare; gastaré hasta mi último día en hacerte

feliz!......................................................................   

  Sakura entró a la casa de campo buscando al peligro; como no lo encontró en la planta baja decidió directamente a su recamara. Pero alabrir la puerta contempló la pero escena de su vida. Ahí estaba Sasuke desnudó con una rubia que no identificó en la misma cama donde tanta veces le había hecho el amor. La pelirosa sintió que su corazón se le contraía mientras sentía un fuerte dolor en su vientre. Sasuke abrió sus ojos y contempló como Sakura lo veía con dolor mientras se agarraba su vientre. En ese momento Sasuke se levantó y trató de agarrar a la pelirosa;pero cuando lo intentó Sakura salió corriendo rumbo a las escaleras.Sasuke la siguió, pues verla así le preocupaba. No obstante, cuando la trató de detener esta se quitó la mano logrando perder el equilibrio y como consecuencia callera escalera abajo.................................................  

  Este último recuerdo hizo que la ojiverde se levantase de la cama mientras gruesas lágrimas salían de sus ojos. Trató de incorporarse para orientarse; pero al hacerlo se percato que estaba en la cama que por meses había compartido con el hombre que más había amado después de Neji. Sintió que su corazón se encogía y con esfuerzo se levanto de la cama para buscar a sus hijos y salir de ese lugar que la estaba asfixiando.   

  Sakura llegó al cuarto de los niños y con sumo cuidado los vistió tratandode no despertarlo. Ya vestidos salió de la casa cuidando de no ser  

  descubierta por nadie. Caminó por la vereda lo más rápido posible para no ser encontrada por el azabache. Doblo una esquina mientras no paraba de llorar; pues sentía que su mundo se venía abajo. ¿Cómo era posible que Sasuke la hubiese traiciona y no le diera la oportunidad de defenderse? se preguntaba la pelirosa mientras le costaba respirar. La pelirosa trataba de no nublar más su pensamiento por el bien de su bebé; pero por más que trataba no podía.   

  Las horas pasaban y la pelirosa no se podía ubicar; así que, miró a su alrededor en búsqueda de un lugar donde descansar. Ya que, se sentía agotada de tanto caminar. La ojiverde caminó uno paso hasta una banca;pues sin darse cuenta había llegado a un parque infantil. Ya sentada Sakura miró a sus pequeños que dormían plácidamente; sonrió tristemente mientras decía:  

  -Lamentó hacerlos sufrir con mi decisión; pero no puedo estar con él. –Dijo con lágrimas la ojijade.   

  Sakura sonrió amargamente mientras lloraba. Mientras la ojijade lloraba el cielo se iba oscureciendo cada vez más; pues las estrellas desaparecieron dando paso a nubes negras. Parecía que el cielo comprendía su dolor; ya que, tan rápido como oscureció empezó a llover. La pelirosa corrió para refugiarse; pero al cruzar la calle no se fijo que un auto venía. Pronto la noche fue rasgada por el sonido de unos frenos.   

  Un joven pelirrojo se bajo del auto mientras gritaba: sakura  

¡Sasuke, no soy tu juguete!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora