Sakura miró como Hinata estaba desmayada en el suelo. Por instinto seagachó para ayudarla a levantase; pero cuando estaba a punto de hacerlosintió un fuerte dolor que la hizo doblarse. Con diÚcultad llamó a laschicas; quienes llegaron asustándose con la escena. Ino y Reiko ayudarona cargar a Hinata mientras Karin y Sakura caminaban hasta el auto de laojimiel para llevar a la ojiperla al hospital. Sakura miró a su amigainconsciente mientras veía como el pequeño Hisaru que corría hasta sumadre llorando. La ojiverde miró al pequeño para decirle:
-Hisaru-kun, tranquilo tu mami estará bien.- Dijo la ojiverde tratando desonreírle al pequeño.El rubiecito miró con lágrimas a Sakura mientras decía:-Sakura-san, ¿Mi mami estará bien?- Dijo triste Hisaru.-Sí, Hinata-chan es fuerte. Hisaru-kun quédate con los niños y Chiyo-san.-Dijo la ojiverde.-Sakura-san, no sé preocupe. Yo cuido a los niños.- Comentó la anciana.-Gracias Chiyo-san.- Comentó Sakura mientras salía a toda velocidad.-Hisaru-kun, su mamá va estar bien. Vamos a llamar a Naruto-san.- Dijo laanciana mientras tomaba la mano del pequeño.
Sakura manejaba el auto de la rubia mientras trataba de mantener la
tranquilidad. Mientras tanto la rubia e Ino trataban que la ojiperla recobrara
el conocimiento. La ojiverde llegó al hospital y con cuidado se estacionó
en la entrada del hospital mientras Karin se bajaba y buscaba ayuda. No
tardo mucho la pelirroja cuando un grupo de enfermeras con una camilla
llegaron para llevarse a la ojiperla. Todas salieron menos la ojiverde que
dijo que estacionaria el auto. La ojiverde estacionó el auto mientras por
alguna extraña razón no dejaba de sentir la misma sensación cuando Ino
estuvo a punto de morir. La ojiverde miró el cielo que amenazaba con
llover; suspiró mientras decía en voz alta.
-Mamá, por favor no te lleves a Hinata-chan.- Dijo la ojiverde.Naruto estaba en la oficina de Sasuke llevándole unos papeles cuandosintió la necesidad de llamar a la ojiperla; pero cuando estaba a punto dehacerlo el pelinegro dijo.-Dobe, ¿Ya decidiste el nombre de los pequeños?- Preguntó Sasuke.-Oh, sí lo he discutido con Hinata.- Contestó el rubio con una sonrisa.-Hmmm, me alegro; yo ya escogí el nombre de nuestro hijo.- Comentó elpelinegro.-Me alegro, ¿Cómo lo llamaras teme?- Dijo el ojiazul.-Daisuke.- Contestó orgulloso Sasuke.-Muy bonito nombre.- Dijo el rubio con una sonrisa.-¿Cómo se llamaran los bebes?- Preguntó el pelinegro.-Hiashi y Souta.- Contestó el ojiazul.-Son muy buenos nombre. – Comentó Sasuke mientras firmaba losúltimos papeles
-Sí lo creo. No sabes cómo cuento los días para tenerlos en mi brazos alos gemelos.- Comento Naruto alegre.-Oh, otros gemelos. ¿Cuándo Hinata da a luz?- Preguntó el pelinegro.-Unas dos semanas.- Contestó el rubio.-Oh, vaya a Sakura le faltan dos semanas y media.- Comentó el azabache.-Creo que nuestros hijos nacerán casi juntos.- Comentó con una sonrisamientras recogía los papeles y salía de la oficina del pelinegro
Hinata era llevada de urgencia al quirófano; mientras los doctorespreparaban para estabilizarla la ojiperla viajaba en su pensamientos
Flashback
Una ojiperla miraba a un niño rubio correr por un parque infantil. Lapeliazul se ocultaba detrás de unos árboles cuando escuchó:-Hola, ¿Qué haces aquí escondida? ¿Quieres jugar conmigo?- Preguntó elniño rubio con una sonrisa.La ojiperla estaba tan apenada que no contestó; sólo se limitó asonrojarse.-Hmmm, bueno si no quieres jugar entiendo. Mi nombre es Naruto y ¿Eltuyo?- Preguntó el ojiazul con una sonrisa.-Hi...na...ta.- Dijo tartamudeando la ojiperla.-Mucho gusto Hinata-chan. ¿Quieres jugar con nosotros?- Preguntó denuevo Naruto.-Ohs, dobe deja de asustar a la niña.- Comentó un pelinegro.-Cállate teme, yo no la estoy asustando.- Comentó Naruto mientras lesacaba la lengua al pelinegro.-Ja, eso cres con esa cara hasta a mí me asustas.- Dijo Sasuke.-No, le hagas caso.- Dijo el rubio a la ojiperla. -¿Quieres jugar?-Esto yo....- La ojiperla no terminó; pues salió corriendo.Hinata miraba a un rubio quien se disculpaba mientras por casualidadesdel destino por un accidente la besó enfrente la fuente de Trevi.La peliazul llegaba al colegio de su hermano cuando un rubio setropezaba con ella. Naruto la ayudo a levantarse; mientras muy apenadodecía:
-Lo lamentó.- Dijo Naruto al darse cuenta que era la misma chica quehabía besado en Italia.-Oh, no es nada.- Contestó la ojiperla más roja que un tomate.
Fin flashback
Oye, niña despierta.- Dijo una mujer.Hinata abrió los ojos mientras miraba a la madre de Sakura que tenía unacara de molestia.-Ohs, ¿Qué tienen las amigas de mi hija que siempre quieren morirse?-Preguntó la pelirosa molesta.-¿Mamá de Sakura-chan?- Preguntó la ojiperla.-Hmmm, sí.- Contestó la ojimiel.-¿Por qué está conmigo?- Preguntó Hinata.-Bueno estas entre la vida y la muerte; así que, yo vengo por las madresque van a morir. ¿No entiendo es que todos ustedes se quieren morir oson muy débiles?- Preguntó seria la pelirosa.-No.- Dijo sonrojada Hinata.-Ja, yo pienso que sí. Primero mi yerno, luego la rubia y ahora tú.- Dijo lamujer.Hinata se sonrojo por lo dicho; pero rápido alegó.-No, es que creo que estamos muy débiles.- Comentó la ojiperla.-Ohs, ya lo creo. Toda la culpa la tienen sus esposo por ser inconsciente yembarazarla tan rápido sin dejar a su cuerpo descansar lo suÚciente.-Comentó la pelirosa mientras le daba la mano a la ojiperla.-¿A dónde me llevas?- Preguntó Hinata.-A ningún lado.- Contestó la pelirosa. - ¿Sabes por qué estas en elhospital?-Creo.- Murmuró la ojiperla.-Bueno, entonces sabes que tus hijos están en peligro.- Comentó lapelirosa.La ojiperla palideció mientras decía:-Mis pequeños no.- Dijo triste la ojiperla.-Tranquila, creo que los doctores son capases. Pero lo hiciste por Hisaru.-Comentó la pelirosa.
Sí, si no hubiese corrido para evitar que lo atropellarán; no me lo hubieseperdonado.- Comentó la ojiperla con melancolía.-Sí, hiciste lo que cualquier madre haría.- Comentó la mujer con unasonrisa para darle aliento a la peliazul.-Tranquila tus bebes son fuerte; mientras te estabilizan me quedarécontigo hablando un poco. –Dijo la pelirosa.-Está bien.- Contestó la ojiperla.-Sabes, gracias por ayudar y querer a mi hija. Siempre le estaréagradecida por lo que hicieron por ella.- Comentó con una sonrisa laojimiel.-No es nada.- Comentó Hinata mientras sonreía a la madre de la ojiverde.Naruto llegó a su oÚcina con una sonrisa; pues quería saber cómo estabasu mujer. Así que, tomó el teléfono para llamar; cuando estaba a punto dellamarla. Entró Itachi pálido mientras decía:-Naruto, debes ir al hospital Hinata esta grave.- Comentó el pelinegro.Naruto palideció mientras dejaba caer su celular por la impresión.
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¡Sasuke, no soy tu juguete!
RomantizmSasuke Uchiha es un chico acostumbrado a tener todo lo que desea. Pero que pasaria si un día descubre que por sus caprichos esta a punto de perder lo más bello que le dara la vida.