25 de Octubre
-¡Vamos Old School! -Toda la grada gritanto. ¿Os suena?
Mi mejor amiga está en la final de baloncesto, ¡y está jugando! Al final su entrenador entró en razón y bueno, es una de sus mejores jugadores. No ganarían sin ella, lo sé.
Quedan tres minutos de partido, es como si tuviera un dejà vu, y me da miedo.
Alizz posee el balón y va corriendo hasta la canasta. Muchas se la intentan quitar, pero mi amiga es muy escurridiza.
Venga Alizz, no puedes fallar...
Pienso nerviosa, confío en ella, pero no me neguéis que no es un momento de tensión.
-¡Alizz, Alizz, Alizz, Alizz! -Toda su universidad grita su nombre. Noto que mi amiga ya se ha echo valer por allí.
Vavavavavava, corre hacia la canasta y... ¡¡¡CANASTA!!!
-¡FIN DEL PARTIDO! -Pronuncia el árbitro.
¡HAN GANADO!
(...)
Ahora mismo estoy corriendo al otro lado del campus, a ver otro partido, y creo que va a empezar a llover.
¡Por favor no! Es lo último que necesito ahora.
Day va conmigo, Alizz se tenía que duchar y luego venía.
¿Por qué es tan importante este partido? Porque además de ser la final de Lacrosse, juegan Mattel Jay contra Golden Unis. Sí, así como oís.
Llegamos y solamente llevaban 15 minutos de partido, pero iban ganando el equipo de Marcos.
No sé si alegrarme o no, mi universidad iba perdiendo...
-¡GOOOOL! -Grita Day levantándose del sitio.
Ni me he enterado.
-¿Quién ha metido?
-¡THOMAS! -Está demasiado ilusionada.
Pero no os penséis, aun así seguimos perdiendo. Llevan bastante ventaja.
¿Y Son? No le veo en ninguna parte del campo.
Ouch. Miro en los banquillos y está ahí el pobre. Es normal, se le daba fatal.
El partido sigue interesante, otro gol, pero de Marcos.
-¿Qué ha pasado? -Una voz nos sobresalta por detrás de nosotras. -¿Se ha roto algo?
-¡Alizz! ¿Qué? -Decimos al unísono Day y yo. Volvemos a mirar al campo y, ¿un chico tirado en el suelo?
Oh oh. Es nuestro equipo.
Se le llevan a enfermería, por lo que tenemos un jugador nuevo.
-¡¿Está saliendo Son al campo?!
-¡Sí! ¡Es Son! -Dice Day emocionada.
No puede ser. De verdad que ella no le ha visto entrenar. Es lo peor del mundo. Lo quiero mucho pero es verdad.
Quedan apenas diez minutos para que termine el partido, y como es de suponer, Son no ha tocado la pelota, ni si quiera de la pasan.
-¡Vamos Thomas! -Gritamos todas.
Mis ojos chocan con los de Marcos. Me mira con superioridad.
Nononono. -¡VENGA THOMAAAAS! ¡AÚN PODEMOS GANAR! -Exclamo alterada.
No quiero que Marcos se lo crea más y encima gane el partido.
Al oír esto, Thom se pone a correr con la pelota, pero Marcos va a por él y chocan.
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Sin batería #Parte1
Teen FictionY es que el problema es, que pensamos y queremos que todos sean nuestro para siempre. La persona con la que estemos el resto de nuestra vida. ¿Y si aparece alguien que te rompe todos tus esquemas? La persona que jamás imaginarías y por la que haces...